Al entrar en la habitación Luisa estaba muy nerviosa y Julián, lo noto y decidió romper el silencio he indico.
-Luisa por favor respira, como te prometí nunca te tocare sin tu permiso- dijo acercándose a ella.
-gracias lo sé pero- no termino de decir lo estaba diciendo cuando él la abrazo y la beso, ella se asusto con la acción de Julián.
-dijiste no me tocarías sin mi permiso- dijo y lo aparto de ella.
-soy tu novio, un novio puede abrazar y besar a su novia, pero lo que no haría es tener sexo, si ella no quiere- dijo apretándola hacia él y con una mirada pícara en el rostro.
-Luisa no sabes cómo te deseo hoy que te vi con esa prenda, vaya no sabía cómo contenerme por favor Luisa no me castigues así, siento hervir mi sangre al no poder tenerte- dijo volviéndola a besar.
-Julián por favor – dijo mientras sus palabras se perdían entre sus caricias el la tomo para llevarla a la cama, Julián al no sentir resistencia por parte de ella le quito su pequeño chal que llevaba, el sentía que se volviera loco si no la poseía.
-Luisa me traes loco eres más hermosa de cómo te recordaba- dijo intentando quitar su blusa, ella estaba ya en un punto que no sabía si ceder o no, era tan tentador y sentía como el calor subía pero tenía un debate interno en ella no quería ser una simple amante.
Al lograr quitarle la blusa comenzó a masajearle uno de sus pechos, era como una pequeña danza entre ellos intento quitarle su pantaloncillo cortó pero al mirarla observo como una lágrima brotaba de sus ojos.
El levanto su mano y seco la lagrima y se paró para sentarse a lado de ella –discúlpame, no llores, no pretendía ofenderte ni mucho menos aprovecharme de ti- ella se levanto
-no discúlpame Julián simplemente no sé cómo comportarme, de verdad que lo intento, como me comentaste la vez pasada claro que te deseo, pero sé que escuchara ridículo teniendo dos hijos, pero para mí sería como la primera vez, sé que para ti la experiencia conmigo no lo es, discúlpame- él se volvió a ella y la abrazo con fuerza.
-lo sé no te preocupes y déjame decirte que cuando suceda seré lo más tierno posible, pero promete algo- dijo y le coloco su mano encima de su rostro. –no te alejaras de mí no quiero tenerte lejos estaremos dos noches en esta habitación quiero tenerte a mi lado, prometo portarme bien-
-bien, necesito solo tiempo- ella comento tímidamente, el solo le dedico una sonrisa fingida
-iré a darme una larga ducha fría la voy a necesitar, ¿no quieres acompañarme?- dijo de una manera picara.
Ella solo cubrió su rostro, la noche transcurrió tranquila, él durmió a lado de ella a diferencia de la primera vez que lo hicieron esta ocasión se abrazaron antes de cerrar los ojos el se tranquilizó y ella lo sintió.
Al siguiente día se levantaron y fueron a conocer la bahía, caminaron, compraron muchos recuerdos Luisa y Julián se sentían tan contentos, los que habían tenido una mala noche eran Sara y Arturo, ellos si la ocasión lo ameritaba dormían juntos sin molestarse mutuamente había desarrollado ese don, pero la noche anterior Arturo no tenía planeado respetar la tregua descrita y había querido propasarse con ella y habían tenido una mega pelea.
-entiendo discúlpame por molestarte, pensé que seguíamos siendo primos, pero me doy cuenta que tú sigues tu camino, me vuelvo a disculpar me retiro que tengas una buena vida y te olvides por completo de nosotros– dijo la chica en un tono de reclamo y con una mirada triste.
-¿y porque dejarían de ser primos solo porque Julián esta con Luisa? -Pregunto sorprendido Arturo, quién también le había extrañado la actitud de la chica.
-es correcto en el pasado nos llevábamos muy bien y nos veíamos como primos, no tiene que cambiar nada, en otra ocasión las visitare, el viaje en esta ocasión es muy corto y no contamos con tiempo- índico Julián, intentando sonar lo más tranquilo posible.
-bien, me retiro que tengas un excelente día – dijo la chica y se apartó de ellos.
Cuando se retiró la chica Julián explico con un poco de nerviosismo
-es una chica que conocí hace muchos años nuestras familias se llevaban muy bien y nos tratábamos como primos, pero cuando me enfoqué en los negocios dejamos de convivir y desde entonces no hablaba con ella, que hasta me olvide que ellos vivían aqui - comentó Julián y cambio el ya porqué para el no era importante solo quería dejar en claro que había solo sido una casualidad de la vida encontrarla ahí.
Todos siguieron conversando pero Luisa estaba muy seria algo no le gustaba de esa chica.
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