El corazón de Señor Peréz romance Capítulo 124

-¡Ejem!- Mauren casi se ahoga con un bocado de sopa.

Miedo de su debilidad. ¿Darle una nutrición?

¿Podría estar hablando de la noche anterior, teniendo sexo con él ... toda la noche?

La pequeña cara de Mauren se puso roja al instante. Estaba tan avergonzada que casi quería encontrar un lugar donde esconderse.

Tomas y las criadas estaban de pie a un lado. Senda hablaba tan fuerte. ¿No pueden oírla?

Las criadas se sonrojaron. Bajaron la cabeza y no se atrevieron a mirar a su alrededor.

Sólo Tomas sonrió y presentó a Mauren -Señora Pérez, estos son los suplementos de hierbas recetados por señor Mayo.-

-Esto es para la sangre. Esto es para la energía. Y esta sopa de ginseng y pollo negro. Es especialmente bueno para el cuerpo de una mujer. Extra nutritivo.-

-Y esto, rollo de cuerno de ciervo y pescado plateado. No sólo es bueno para el cuerpo de señora Pérez. También es bueno para señor Pérez.-

-Los hombres comen más cuerno de ciervo. Y tendrán más energía por la noche ...señor Pérez. ¿Hay, hay algún problema?-

La mirada repentina de Senda era tan fría que hizo que a Tomas le cosquilleara el cuero cabelludo. Tomas no se dio cuenta a la primera.

Pero, cuando las palabras acaban de terminar lo entendió inmediatamente. Se apresuró y volvió a decir.

-Señor Pérez está lleno de energía. Ciertamente no necesita estos suplementos extra. Pero señora Pérez es más delicada. Señor Pérez acompañará a señora Pérez a comer un poco.-

Es decir, señor Pérez come esto sólo para comer con señora Pérez. Para que ella no se sienta demasiado sola.

No es que señor Pérez ... ejem, lo necesite.

¿Cómo es que señor Pérez no es capaz? Nadie lo creería, ¿verdad?

Mauren quería cavar un agujero para sí misma. Meter la cabeza dentro. Y no volver a salir a ver a nadie.

Lo que pasó en su habitación con Senda anoche ... ¿es lo que sabe todo el mundo en la villa?

¿Qué pasa con esta gente? ¿Siguen escuchando fuera anoche?

Originalmente era un asunto de ellos. Ahora parece un antiguo emperador mimando a su concubina ...

Al ver su cara tan roja como los tomates, agitó la mano para despedir a todos los sirvientes. Tomas condujo inmediatamente a la gente a otras habitaciones.

Pronto sólo quedaron Senda y Mauren en todo el comedor.

Dio una orden sin expresión -Coma.-

-No quiero comer.- El sabor de la medicina china era demasiado fuerte, y era imposible comer.

Lo más importante es que. Comer esta comida era como aceptar el destino de ser mimado.

¿Después de mejorar ella seguirá sirviéndole?

¡Dios! ¿Qué tonterías está pensando?

-¿No comes?- Senda levantó una ceja -¿Quieres que te dé de comer?-

Mauren levantó la vista hacia él. Accidentalmente, sus ojos se estrellaron contra los profundos y helados ojos de la primavera.

La noche anterior, el hombre se apretó contra ella. La imagen del sudor resbalando por sus mejillas sobre su corazón saltó instantáneamente a la mente.

El corazón de Mauren se estremeció. Apartó los ojos con pánico.

-Huele un poco asqueroso.- Susurró.

El ceño de Senda se arrugó más, ¿asqueroso? ¿No es delicioso?

-Mañana, cambiaremos de cocinero.- Pero hoy, terminemos de comer primero.

-Entonces comeremos mañana ...-

-Tu fuerza física es demasiado pobre. Si no repones la nutrición a tiempo. También será fácil desmayarse.-

Los ojos de Senda estaban llenos de razón. No había nada incómodo en su rostro. Pero lo que dijo hizo que ella se sonrojara y sus corazones latieran más rápido. Era casi demasiado para soportarlo.

-Anoche, te desmayaste dos veces.-

Mauren sintió que estaba a punto de desmayarse. Un tema tan explosivo. ¿Podemos parar inmediatamente?

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