La expresión de Luo Hao era un poco complicada. Especialmente después de presenciar la derrota de Yang Jing, tuvo un sentimiento indescriptible en lo más profundo de su corazón. Entonces, cuando abrió la boca, no le salieron las palabras. Después de que Yang Jing se calmó, finalmente preguntó:
—¿A dónde quieres ir? Te llevaré.
—No es necesario... —rechazó Yang Jing, negando con la cabeza—. Luo Hao, a pesar de que te he hecho muchas cosas malas a tus espaldas a lo largo de los años, todo lo que he hecho es porque me hiciste abortar a nuestro hijo. Por lo tanto, nunca sentí que te debiera nada.
Después de hablar, abrió la puerta del coche y se fue. En cuanto a Luo Hao, a quien había dejado atrás, su mente estaba era un caos...
El niño... así es, todos los problemas comenzaron a partir de ese niño. Pero, esta es la industria del entretenimiento, nadie quiere terminar como An Zihao y Yun Xin.
Entre la oscuridad, Luo Hao se burló. Si a lo largo de los años, él no hubiera ayudado en secreto a Yang Jing, ¿pensaba ella que lograría un estatus tan alto con su actitud orgullosa? No podía negar que todavía tenía sentimientos por ella... pero no había manera de que volviera atrás.
En la actualidad, el poder en Cheng Tian estaba igualmente dividido; él tenía a Hua Yuan y An Zihao tenía a Tangning. En cuanto a Li Danni, que anteriormente estaba bajo el control de Yang Jing, estaba temporalmente en manos del vicepresidente. Desde su punto de vista, la batalla por los mejores recursos estaba a punto de comenzar.
Entonces, Tangning tiene a alguien que la respalda, ¿eh?
¿Pero acaso no todo el mundo tiene a alguien que los respalde? Si la persona que apoya a Tangning fuera tan poderosa, ella habría llegado mucho más lejos hace ya mucho tiempo.
Luo Hao sintió que la información que Yang Jing le había dado no tenía ningún valor.
En conclusión, durante la confrontación entre Lan Yu y Tangning, Tangning simplemente tuvo que levantar un dedo sin decir ni una palabra; todo lo que hizo fue presentar los resultados de su prueba de drogas y lidió con Lan Yu da manera rápida y eficiente con mucha difusión de la prensa. Tangning era una oponente fuerte.
Debido al incidente de Lan Yu, la confiabilidad de Tangning se incrementó una vez más. Por lo tanto, las ofertas de primer nivel inundaron su correo electrónico, incluyendo muchos endosos de marcas importantes.
Como resultado, el horario de Tangning, bajo los arreglos de An Zihao, se llenó por completo. A excepción de los tres días que tenía actualmente, el mes siguiente estaría muy atareada, ocupándose de varios trabajos.
La noche antes de viajar a Moscú para la sesión fotográfica de Her Vision, An Zihao habló por teléfono con Tangning:
—Mañana tendremos una reunión rápida en Cheng Tian para confirmar todos tus próximos planes. ¿Estás segura de que no vendrás conmigo al aeropuerto para el vuelo de la una de la tarde a Moscú? ¿Qué pasará si te sucede algo?
Tangning estaba empacando su equipaje y el de Mo Ting. Se giró para mirar la expresión ocupada en el rostro de su hombre mientras sonreía: —Lo manejaré.
—Si algo sale mal, de ahora en adelante, cuando programemos un evento público, tendrás que escucharme.
—Nada irá mal —insistió Tangning tranquilizadoramente.
—Recuerda lo que has dicho.
En comparación con otros artistas, la autodisciplina de Tangning definitivamente lo tranquilizaba, entonces, An Zihao no la presionó más. Después de todo, Tangning ya había estado en la industria durante ocho o nueve años y era muy consciente de cómo funcionaban las cosas.
Tangning colgó el teléfono cuando Mo Ting también dejó los documentos en sus manos y se acercó a ella por detrás. Él respiró su aroma mientras la envolvía en su abrazo.
—Aún no me he duchado —dijo Tangning, resistiéndose.
—No me importa —respondió con una voz profunda antes de extender su mano para acariciar delicadamente su suave cabello—. He examinado los trabajos que An Zihao ha aceptado para ti. De hecho, son muy útiles cuando estás en ascenso. Por lo que veo, parece tener un buen control de los fanáticos y tiene un equipo de ayudantes con mucha experiencia. Nuestra pequeña Tangning ya no es una ovejita descarriada e ignorada.
Tangning volvió la cabeza y miró a los ojos de obsidiana de Mo Ting mientras se reía:
—¿Eso significa que el Gran Jefe finalmente puede relajarse?
—¿Estás aquí por una reunión?
—Sí—respondió Tangning. Obviamente, le resultaba difícil soportar su personalidad sociable.
—En ese caso, ¡a trabajar! He visto tus desfiles, ¡eres increíble!
Tangning sonrió sin dar más respuestas cuando An Zihao abrió la puerta de la sala de reuniones y dijo:
—Entremos, vamos a llegar tarde.
Li Danni observó cómo Tangning entraba en la sala de reuniones, tenía una mirada profunda en sus ojos. En este momento, su asistente soltó un gruñido de burla antes de hablar:
—Esta nueva modelo de grado A no sabe cómo medir su propia posición. De todos los modelos en Cheng Tian, Hua Yuan es la única que piensa que no tiene que postrarse ante ti. ¿Quién se cree que es Tangning?
—Cuida lo que dices —advirtió Li Danni a su asistente en voz baja.
—La renuncia de Yang Jing obviamente fue planeada por Tangning, An Zihao y la presidente Lan. En cuanto al vicepresidente, es un inútil, no tiene capacidad para aprovechar ningún buen recurso. ¡Tangning nos ha hecho perder a Yang Jing!
Li Danni no respondió. ¿Acaso Tangning no iría a Moscú para la sesión fotográfica de su revista? Ella estaba familiarizada con el equipo de fotografía que usaba la revista, ya habían filmado juntos un gran comercial.
Estaba bien que Tangning no se inclinara ante ella, pero no iba a dejar pasar aquel incidente con Yang Jing. Sobre todo porque desde el principio solo habían sido ella y Hua Yuan quienes luchaban por los recursos. ¿Cómo se atrevía a aparecer Tangning de la nada y llevarse al mejor representante? ¿Qué derecho tenía ella? ¿Y quién se
creía que era?
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