El Hombre que Robó Mi Corazón romance Capítulo 172

La noche antes de la entrevista de Feng Cai, Tangning fue al estudio para filmar un adelanto. Al retirarse, afuera de la puerta principal había un montón de fanáticos.

Le dieron flores y le pidieron que tomarse fotos juntos. Tangning cortésmente asintió con la cabeza y estuvo de acuerdo. Después de todo, en un clima tan frío, habían esperado tanto tiempo afuera: debían de haberlo pasado mal.

Por supuesto, lo que los fanáticos tenían más curiosidad era el "hombre soñado visto de espaldas". Pero Tangning simplemente sonrió:

—Recuerden ver la transmisión en vivo de Feng Cai de mañana. Estoy segura de que todos estarán satisfechos con la respuesta que daré allí.

Los aficionados no pudieron evitar chillar de emoción. Especialmente cuando Tangning se quitó las gafas de sol para darles autógrafos.

—¡Te ves aún más hermosa de cerca!

—Tus piernas son tan largas...

—Hermana Tangning, no te preocupes... te protegeremos.

Tangning firmó autógrafos mientras caminaba. Después de escuchar estas palabras, ella obviamente se quedó estupefacta por un momento antes de revelar una sonrisa.

Tangning notó a una niña de unos quince o dieciséis años que llevaba un uniforme escolar sosteniendo una pancarta.

Esto le recordó a Lan Yu; ambas estaban en sus años más vibrantes. A ella le conmovió la energía proveniente de estos fanáticos. Todos parecían tener aproximadamente quince años de edad, pero se ofrecieron a protegerla.

Entonces, Tangning no pudo evitar darle una suave palmadita en la cabeza a la niña:

—Yo las protegeré, niñas, y ustedes deben protegerse a sí mismas.

De hecho, notó que anteriormente se había concentrado demasiado en hacer un contraataque. Ella nunca había considerado aumentar su interacción con los fanáticos.

De ahora en adelante, ella escucharía las voces de sus admiradores.

Al final, Tangning se despidió de sus fanáticos y An Zihao le ayudó a subir a la camioneta del agente.

—Eres excelente para obtener energía de los demás — observó An Zihao sobre las palabras que Tangning acababa de decir; salieron de su corazón.

—Por supuesto, incluso una niña de quince años es lo suficientemente valiente como para decir que me protegerá. Aunque a lo mejor no tenga el poder, tiene la valentía. Como adultos, ¿tenemos menos valor que una niña?

An Zihao se quedó sin habla, no tenía nada más que decir. Sin embargo, descubrió un nuevo rasgo de Tangning.

Ese rasgo era que ella siempre estaba reflexionando sobre sí misma. No era de extrañar que tuviera un suministro infinito de energía.

—Mañana, ¿realmente estás planeando revelar al 'hombre soñado visto de espaldas? —preguntó finalmente An Zihao después de bastante tiempo—. ¿No te arrepentirás?

Tangning sonrió misteriosamente. Ella no tenía la intención de dar respuesta ni siquiera a An Zihao. Sin embargo, ¿realmente sería capaz de ir al programa de entrevistas mañana?

Mientras tanto, Li Danni y su gerente se sentaron en la oficina majestuosamente amplia de Lan Xi. Lan Xi estaba de espaldas a las dos personas mientras tomaba un sorbo de su café. Su voz era tranquila pero tenía un poder innegable.

—Para el programa de mañana, dale un día de descanso a tu asistente. Te he preparado otra asistente.

—No entiendo muy bien la intención de la presidente Lan... —repuso Li Danni mientras se encogía de hombros.

Lan Xi se dio la vuelta y caminó hacia Li Danni. Colocó una mano en su hombro.

—Te voy a dar a la asistente de Tangning por un día. Puedes usarla de la forma que quieras.

Lo que quiso decir fue que Li Danni podía ordenarla, torturarla y liberar su ira sobre ella. Li Danni no entendía muy bien por qué Lan Xi estaba haciendo esto. Y Lan Xi no podría revelar sus verdaderas intenciones. Entonces, simplemente sonrió y regresó a su escritorio:

—Tangning es mi modelo. Tengo derecho a asignar cualquiera de sus recursos, ¡incluso a las personas!

Sin embargo, Li Danni no tenía idea de que Long Jie había sido contratada en privado por Tangning para ser su asistente personal: nadie tenía derecho a darle órdenes a Long Jie.

—Mañana será su asistente. Luego, será su representante.

Al escuchar la palabra "representante", los ojos de Li Danni se iluminaron porque esto significaba que la tolerancia de Lan Xi hacia Tangning ya había llegado a su límite. También significaba que estaba preparada para alejar a An Zihao de Tangning.

Lu Che dudó por un momento antes de contarle todo a Mo Ting.

Después de escuchar la explicación de Lu Che, Mo Ting lo miró con una expresión fría:

— Ya has estado a mi lado durante siete años. ¿No me digas que siete años no han sido suficientes para enseñarte cómo lidiar con las situaciones como ésta? ¿Pensaste que al usar los recursos de Hai Rui, podrías encontrar al abuelo Long de inmediato? ¡Estás siendo demasiado ingenuo! ¿Sabías que si la situación estalla, es una vida con lo que estás lidiando?

— Presidente... yo... — tartamudeó Lu Che. No pudo explicarse porque este incidente también involucraba a Tangning. Sabía de la importancia de Tangning para Mo Ting, por lo que no se atrevió a arrastrarla a la situación. Por supuesto... él también quería mantener la promesa que le hizo a Long Jie.

Un asunto como este, ¡debería haberle dicho a Mo Ting hace siglos! No podía entender por qué no lo hizo...

Mo Ting respiró hondo; parecía que estaba tratando de calmar su ira. Sin embargo, justo cuando estaba a punto de tomar acción, recibió una llamada telefónica de Tangning

—Ting... ¿Lu Che está cerca?

—¿Por qué?

—Lo he pensado cuidadosamente y siento que hay algo que no está del todo bien con Long Jie. ¿Por qué Lu Che le dijo a Zihao que se asegurara de que no lleváramos nuestros teléfonos a Feng Caí? —observó Tangning.

Después de un momento de silencio, Mo Ting reveló todo el incidente a Tangning. Él sabía, incluso si no le decía, ella estaría tan preocupada, que buscaría a Long Jie ella misma.

—En ese caso, ¿dónde está Long Jie en este momento? — después de escuchar todo de Mo Ting, la voz de Tangning era un poco temblorosa.

—En el Centro Hai Yi.

—Ting... déjame manejar este asunto. Pero, déjame advertirte, es posible que necesite hacer uso de tu identidad.

Mo Ting no pudo evitar soltar una risita.

— Adelante...