El Hombre que Robó Mi Corazón romance Capítulo 22

—¿Sabes algo sobre el evento que Han Yufan arregló para mí?— preguntó Tangning mientras se volteaba para mirar a Long Jie inquisitivamente, pensando que debía haberle contado algo a Mo Ting. Sin embargo, Long Jie rápidamente agitó sus manos, indicando que eso no tenía nada que ver con ella.

—Mientras quiera averiguar algo en esta industria, puedo descubrir cualquier cosa.

A estas alturas, Tangning ya no estaba sorprendida. ¿De qué otra manera habría logradoMo Ting subir a la cima? Entonces, ella le sonrió.

—No te preocupes, ya me has dado la espada para matar a mis enemigos. Ahora, en definitiva, terminaré mi obra satisfactoriamente.

Mo Ting no respondió, sencillamente extendió su mano para tocar el cabello de Tangning.

Al verlos actuar, a Long Jie se le puso la piel de gallina por todas partes. Estos dos se habían casado hace muy poco, pero ¿cómo era que se parecían a una pareja que ha estado casada por años?

Al terminar la filmación, los tres regresaron a Beijing. Durante el vuelo, Tangning y Mo Ting se apoyaron cariñosamente entre sí, pero tan pronto como el avión aterrizó, se separaron como extraños.

Han Yufan había enviado a la nueva representante,Lin Wei, para recogerlas del área de llegadas. En la puerta, la representante esperaba. No sólo lucía un vestido de gasa púrpura claro, con tacones altos de veinte centímetros y anteojos de sol, sino que también miraba continuamente el reloj en su muñeca. Todo su cuerpo irradiaba una sensación de impaciencia, como si los papeles se hubieran invertido y ella fuera una superestrella internacional esperando a que la recogieran.

Tangning notó un letrero con su nombre colocado al lado junto a los pies de Lin Wei. Decidió ignorarlo y salió directamente del aeropuerto con Long Jie.

Long Jie soltó una risa ahogada. Tangning estaba desarrollando lentamente su propio carácter. En mitad del viaje, Tangning recibió una llamada telefónica de Lin Wei:

—Tangning, ¿dónde estás? ¿No se suponía que tu vuelo llegara a las 12?

— Ya estoy en camino a la oficina —respondió Tangning con calma.

—¿Que no me has visto cuando llegaste?

—Sí, te he visto, —contestó Tangning sin demostrar la más mínima emoción.

—Entonces, ¿por qué no viniste junto a mí? —replicó Lin Wei, furiosa.

—Llevabas anteojos de sol, por eso pensé que estabas en el aeropuerto para realizar un espectáculo... —respondió Tangning sarcásticamente.

La cara de Lin Wei se puso roja de ira mientras colgaba el teléfono y corría de regreso a la oficina.

Había empezado pronto en la industria, pero era extremadamente estrecha de miras. A pesar de haber ayudado a hacer famosos a algunos artistas, estos siempre terminaban ofendiendo a los poderosos o siendo enviados a rehabilitación. Entonces, como representante, no tenía una muy buena reputación en la industria. Esta vez, Mo Yurou pidió por Lin Wei porque obviamente quería que manejara a Tangning como ella quería. Pero, quién lo hubiera esperado, que sin siquiera alcanzar a ver a Tangning, ya la hiciera quedar como una tonta.

Estaba decidida a no darse por vencida. Después de todo, Tangning era, a lo sumo, una modelo obsoleta. ¿Cómo se atrevía a no mostrarle ningún respeto?

Veinte minutos después, Tangning llegó a la oficina primero. Al cruzar la entrada principal de Tianyi Entertainment, se dirigió directamente a la oficina de Han Tufan y abrió la puerta de par en par.

—Estoy esperando tu explicación —exclamó Tangning mientras golpeaba con ambas manos sobre la mesa. — Entonces, ¿de verdad está pasando algo entre tú y Mo Yurou?

Han Yufan detuvo lo que estaba haciendo, vaciló por un momento y luego cambió discretamente el tema.

—Acabas de aterrizar, ¿cómo es que llegaste tan rápido?

—¿Hace cuánto tiempo de esto?—insistió Tangning con el mismo tema —¿Cuánto tiempo llevan juntos tú y Mo Yurou?

—¡Tangning! —gritó súbitamente Han Yufan. — Ya he tenido suficiente de ti, ¿sabes lo molesta que eres? ¿No

puedes hacer cosas que les gustan a los hombres, como Yurou? ¿Qué otra mujer se pasa el día quejándose como tú?

Tangning lentamente retiró sus manos y miró a Han Yufan inquisitivamente. —¿Qué es lo que ustedes dos creen que soy? ¿Un juguete?

—Tangning, vamos a terminar... En efecto, estoy con Yurou... y estamos realmente enamorados.

Han Yufan le habló a Tangning como si estuviera hablando con un extraño que no tenía ninguna relación con él.

— No deberías culparme. No hay explicación para el amor. De ahora en adelante, simplemente tenemos una relación de subordinada y superior, yo soy tu jefe y tú eres mi empleada.

Tangning hizo una mueca mientras levantaba una comisura del labio; estaba más tranquila de lo que Han Yufan esperaba.

—Tengo muchas fotos indecentes como ésta en mi teléfono. Debido a las cuatro palabras que me acabas de decir, he decidido enviárselas a las cuatro mayores compañías de medios.

Lin Wei se congeló por un momento, sin comprender qué quería decir Tangning. Hasta que bajó la mirada a la pantalla para ver una foto de ella seduciendo a un director. Su mente se había quedado en blanco.

Esto no podía ser, ¿cómo podría Tangning tener estas fotos? Ella era muy cuidadosa... esto era imposible, tenía que ser falso.

—Sé que Mo Yurou está detrás de todo esto. Si no te hubieras pasado de la raya, no me hubiera molestado en tratar con una simple representante como tú, pero... parece que no sabes con quién te estás metiendo. ..

Lin Wei comenzó a asustarse, mientras sus manos comenzaban a temblar. Si hubiera sabido que Tangning tenía esta información en su contra, jamás habría aceptado la petición de Mo Yurou de complicarle las cosas a Tangning.

Entonces, su cara cambió de inmediato cuando se arrodilló.

—Tangning, no quise tratarte así, por favor no publiques las fotos, terminaré con esto si tú también lo haces...

Tangning bajó la mirada hacia Lin Wei.

—Sólo diré estas palabras una vez: no atacaré a quienes no me ataquen primero, pero si alguien me ataca... les haré imposible regresar de las profundidades del infierno. A partir de hoy, haz bien tu trabajo y yo haré el mío. Si quieres hacer planes y jugar juegos... estaré feliz de seguir a tu ritmo,pero las consecuencias no serán tan inocuas como la publicación de estas pocas fotos...

En ese momento Tangningera cruel y dominante. Lin Wei no sabía cómo reaccionar, ¿acaso no le habían dicho que Tangning era fácil de dominar?

—Entiendo. Sé lo que debo y no debo hacer —musitó. Lin Wei quedó completamente intimidada por la expresión de Tangning.

Luego de desahogar su enojo, las emociones de Tangning volvieron a su calma natural y su tono de voz fue una vez más indiferente mientras interrogaba a Lin Wei.

—¿Cuándo tengo que aparecer en el escenario en el evento?

—¿I... irás? —barbotó. Lin Wei no podía entender lo que Tangning estaba pensando.

—Sólo di me cuándo —repitió Tangning.