Matilda asintió y dijo: “100 millones no es tan caro, pero no lo entiendo del todo, ¿cómo podría Jacob pagar la villa aquí en base a su situación actual?”.
Paul sonrió y dijo: “Bueno, entonces debes preguntárselo tú misma”.
Matilda también sonrió. “Hmm, tal vez esconda sus propios talentos”.
Paul reflexionó un rato y dijo: “Honestamente hablando, el Tío Wilson es un buen hombre, pero no puedo decir que tenga talentos que esconder”.
Matilda preguntó con curiosidad: “¿Qué quieres decir con eso?”.
Paul respondió: “Nada, me siento un poco raro, eso es todo”.
Matilda se rio levemente y respondió: “Está bien, basta con eso. Debería estar feliz por mi viejo amigo que puede vivir en una villa tan cara. En cuanto a las otras cosas, no es asunto nuestro”.
Paul asintió con seriedad. “Sí, mamá, tienes razón”.
En ese momento, Jacob abrió la puerta y dijo emocionado tan pronto como vio a Matilda y Paul: “Ey, Matilda, Paul, están aquí. ¡Vengan, por favor entren!”.
Matilda sonrió y dijo: “Vaya, Jacob, tu casa es tan hermosa, no sabía que te quedas en un complejo tan lujoso. Ya sentí la majestuosidad y la magnificencia de este lugar cuando entré por la puerta. Estas deberían ser la mejor villa en Colina Aurous, ¿verdad?”.
Jacob respondió humildemente: “No estoy seguro de si es la mejor o no, en realidad, me mudé hace dos días”.
Un sentimiento peculiar floreció lentamente en la mente de Paul. Normalmente, incluso el maestro de feng shui más experimentado y concienzudo no cobraría entre 100 y 200 millones de dólares por trabajo.
Charlie obtuvo una villa tan bonita junto con la delicada renovación de un trabajo de feng shui, lo que indica que debe haber otras razones además del valor de la villa en sí.
¡A simple vista, parecía que Charlie no era una persona común!
Él soltó: “En realidad, también creo en el feng shui, pero nunca he conocido a un maestro de feng shui muy bueno y capaz. Según tu comentario, espero que Charlie pueda ayudarme a revisar el feng shui en mi nueva compañía más adelante”.
Jacob se rio entre dientes. “Entonces, dile tu intención. Charlie es un buen chico, ¡no rechazará tu solicitud!”.
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