Xenia, -¿Qué pasa?-
Naomí se sentó a su lado con su teléfono celular, -Xenia, ves, tanta gente te añade. ¿Quiénes son? ¿Tenemos tantos clientes en una noche?-
-No es probable.- Xenia parpadeó, -Ayer antes de herirme, no había tanta gente que me añadía.-
-¿Es una broma?- Naomí hizo una pregunta y luego seleccionó aleatoriamente una cuenta para mirar. Encontró que su círculo de amigos estaba en blanco.
-¿Qué estaba pasando? Estas cuentas parecían nuevas. ¿Realmente era una broma?-
Xenia no lo entendió, así que se acercó para mirar.
-También he encontrado un punto clave. Los identificadores de estas cuentas parecen ser similares...-
Xenia, -...-
-Bueno, ahora puedo estar segura de que es una broma.-
Tras decir eso, Naomí añadió esos números uno por uno a la lista negra, -Tal vez querían espiar nuestro trabajo... Esta última cuenta tiene un identificador diferente. No sé si será un cliente.-
-Miro la cuenta.-
Naomí le dio el teléfono a Xenia.
Xenia miró y sintió que la cuenta parecía un poco familiar.
Parecía que había visto...
Cuando vio el último número, Xenia se quedó atónita y ella miró la información de la cuenta.
-Es recomendado por Bianca, parece que es amigo de señora Bianca. Acéptalo.-
Los dedos blancos de Naomí querían presionar el botón de añadir, pero Xenia dijo repentinamente, -¡No lo aceptes!-
Su voz se volvió abruptamente muy dura y alta, lo que asustó a Naomí, así que presionó el botón accidentalmente.
Xenia cambió de color y mordió los dientes, -¡Añádelo rápido a la lista negra!-
Naomí se sorprendió por sus palabras, así que no hizo nada.
-Xenia, ¿qué dices? Este es el cliente recomendado por señora Bianca...-
-Añádelo a la lista negra.-
-¿Cómo?- Naomí se sorprendió, -¿Por qué quieres eso?-
-Haz lo que te digo, y no preguntes demasiado.- La voz de Xenia se volvió baja, y su cara no se veía muy bien, así que Naomí no se atrevió a decir nada, sino solo pudo asentir con la cabeza.
-Bueno, lo sé.-
Luego movió los dedos y envió al hombre a la lista negra.
Xenia respiró aliviada al ver esta escena.
-Trabaja hoy en la empresa, y yo voy a ver los diseños esta tarde.-
-¡Vale!- Naomí le devolvió el teléfono, -No hay nada más. Si pasa algo, dejarás que Bernabé me llame y volveré pronto.-
-Bueno.-
Después de que Naomí salió, Bernabé se acercó y preguntó con dudas.
-Mamá, ¿alguien te está acosando?-
-¿Cómo? ¿Por qué preguntas eso?-
-Porque Naomí ha dicho que alguien te añadió por el Whatsapp.-
Xenia se rio, -Nada, él se equivocó del número.-
Tras decir eso, su sonrisa rápidamente desapareció y había preocupación en sus ojos.
Ella conocía los últimos números de esa cuenta...
Y se añadió a través de la recomendación de Bianca. Por supuesto que ella sabía con quién se encontró ayer…
Xenia se inclinó hacia atrás y cerró los ojos.
Simón, ¿qué querías hacer?
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