Al ver que no quería decir más, Giuliana se dio por vencida.
-Si no quieres decírmelo, no pasa nada, pero ¿recuerdas lo que te dije antes?
Xenia asintió con la cabeza, -Sí.
-¿Conoces a la familia Espinar? ¿Sabes qué tipo de familia es? A decir verdad, el abuelo Jorge ya me ha mandado a que busque un puesto en nuestra empresa para la hija de la familia Espinar, y no importa qué trabajo, quiere que le den un puesto con el que podrá tener contacto con Señor Simón.
Después de hablar, Giuliana pensó duranto un rato y dijo, -Estabas en la oficina cuando hablaba con el Señor Simón por teléfono, si quieres, puedo contarte todo, pero ¿entiendes lo que está pasando?
Antes de que Xenia respondiera, Giuliana volvió a explicar, -Al Señor Jorge le cae muy bien Zoe, por lo que quiere que ellos puedan estar juntos, así que tú...
En ese momento, frunció el ceño y suspiró, -El amor que no cuenta con el apoyo de los viejos va a durar poco.
Lo que Giuliana dijo fue un consejo sincero, Xenia lo sabía, por lo que cogió su mano y dijo en voz baja.
-Muchas gracias, Giuliana, gracias por contármelo, pero no te preocupes, he pensado en estas cosas antes, ya sé qué voy a hacer de ahora en adelante. Aunque he estado en esta empresa durante poco tiempo, la relación va tan rápido con él, en lugar de creer que soy una mujer indecente, confías mucho en mí, gracias, de verdad.
Porque todos definitivamente pensarían que ella era una cazafortunas que quería engatusar al Señor Simón.
Pero Giuliana no pensaba que lo fuera, sino que le dijo muchas palabras dulces.
-Piénsatelo bien y yo sé que eres una buena chica.
Giuliana entendía que ella trabajaba en esta empresa por el Señor Simón, pero que no parecía una trepadora, al contrario, se veía miserable, a veces Giuliana sentía que estaba pensando demasiado.
Pero había tantas personas en la empresa, solamente Xenia le dio esta impresión muy rara.
-Está bien, ya que has tomado la decisión por tu cuenta, entonces no tengo nada que decir, de todos modos ... no quiero entrometerme en vuestros asuntos-.
De repente Giuliana se puso de pie, pensó en algo y tocó la mejilla de Xenia sonriendo.
-Si al final podéis estar juntos, recordad invitarme a la boda, y también os voy a preparar un sobre rojo porque fui yo la que te ha recomendado encarecidamente que trabajaras en esta empresa.
La atmósfera entre los dos se relajó repentinamente y Xenia sonrió, -Está bien, ojalá así sea.
Después de que los dos llegaron a un consenso, se fueron a trabajar.
Más tarde, Zoe llegó a la empresa después de recibir una llamada de Jorge Carlos, quien dijo que todo estaba listo para ella, por lo que ella podría ir directamente a la empresa para preguntarle a la secretaria de Jorge, y ella se encargaría del trabajo.
Así que Zoe fue directamente al Grupo Espinar después de que volvió a arreglarse y eligió su pintalabios y sombra de ojos favoritos.
Las chicas siempre querían mostrar su mejor lado a los hombres que les gustaban, y a Zoe también le pasaba lo mismo.
Una vez que llegó a la empresa, la recepcionista la vio y la dejó subir.
Sin embargo, después de verle entrar en el ascensor, suspiró hacia la chica que estaba a su lado -Dios mío, ¿por qué algunas personas tienen una vida tan buena y afortunada? no solo son bien nacidos, sino tienen las caras bonitas, ¿incluso las personas con las que están también son tan buenas?
Otra chica la miró y dijo de manera extraña, -las personas mejores son destinadas a estar juntas, ¿no crees? si una persona particularmente buena estuviera con un inútil que no sabe nada y no sirve de nada, creo que eso sería muy raro.
No importaba cómo se le mirara, era una mujer muy normal.
Pero, ¿por qué una mujer así le había enamorado a Simón? ¿Qué magia tenía ella?
Se miró a sí misma y sintió que lo que vestía y usaba era lo mejor.
En cuanto a la belleza, ella pensaba que era más guapa que Xenia, pero ¿por qué el Simón no quiso mirarle?
Cuanto más pensaba en ello, más se enfadaba y las manos que colgaba de ambos lados se apretaron con fuerza.
En este momento, Xenia levantó la cabeza e inconscientemente miró a este lado, luego bajó la cabeza, pero pronto se dio cuenta de algo y volvió a levantarla.
Las miradas de las dos se encontraron.
“¿Zoe?” se sentía muy sorprendida
Al ver que Zoe apareció aquí, Xenia se asombró, pero reaccionó rápidamente y recordó todas las palabras que Giuliana le dijo antes.
No esperaba que Zoe llegara hoy, e incluso estaba bien maquillada.
De esta manera mirándose en silencio durante un buen rato, Zoe entró en tono de burla.
-De verdad te subestimé antes, no esperaba que estuvieras en esta empresa y te quedaras a su lado como asistente. Él ya te había olvidado, pero aún no querías irte de aquí, ¡qué descarada eres!
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