Esta vez, me toca quererte romance Capítulo 98

Como Adela había sido elogiada antes por Miguel, nadie quería actuar con demasiada humillación y todos sacaron a relucir su muchísima seriedad.

Aunque se filmó en el estudio, se construyó un pequeño montículo con tela verde.

Porque el final de la novela era que todos subían a la cima de una colina en las afueras de la ciudad y gritan sus sueños.

—¡Vamos, todos, prepárense! ¡Tengo prisa! ¡Vamos, vamos!

La rabieta final de Miguel no fue falsa, ya que instó con impaciencia.

Adela se puso inmediatamente de pie en la pequeña rampa cuando de repente oyó que alguien exclamaba detrás de ella.

Instintivamente, miró hacia arriba y vio que Felisa, delante de ella, se caía hacia atrás, porque perdió el equilibrio por sus tacones.

En ese momento, Adela no dudó en alargar la mano y rodear con sus brazos la cintura de Felisa.

—¿Estás bien?

A Felisa le sorprendió que hubiera caídp en los brazos de Adela, un rastro de conmoción y vergüenza apareció en su rostro.

—Estoy bien, gracias.

Se levantó apresuradamente y volvió a su posición, y Adela no dijo nada más mientras seguía filmando.

—¡Qué lástima! Si solo hubiera sostenido a la señorita Felisa justo ahora, qué dulce interacción entre los protagonistas masculino y femenina.

Fermín, que estaba al lado, bromeó a medias.

—Ni lo sueñes.

Probablemente, el aura alegre y la personalidad afable de Fermín contagiaron a Adela, que soltó una frase.

—¡Vale, todos miren a la cámara!

En este punto, Miguel instó de nuevo, y todos miraron fijamente a la cámara, tomándolo en todo serio.

Se realizaron algunas pequeñas tomas interactivas más de los personajes principales en la parte trasera, especialmente de los protagonistas masculinos y femeninos.

Adela se sentó en una silla en el borde del campo, con el guion en la mano, mirando en silencio a Felisa y Fermín.

Solo antes de que pudiera despejar su mente por un momento, Elisa se acercó.

—Adelita, hace un momento escuché algunos rumores negativos sobre ti, parece que son difundidos por gente que está en competencia contigo, ¿debo decirle a tía y hermanos para que te ayuden a aclararlo?

Elisa habló con lo que parecía una gran preocupación.

—No es necesario, los inocentes son siempre inocentes. Si tengo que contarle a mi familia este pequeño asunto, ¿cómo voy a entrar en el negocio del espectáculo?

Adela bajó la voz y dijo con indiferencia, en ese momento el micrófono en directo estaba grabando, no quería afectar a los protagonistas de la escena.

Elisa lanzó una mirada deliberada a Rosa, que estaba sentada a su lado, y continuó de propósito.

—De hecho, no deberías agraviarte, con el poder de tu familia..., es fácil conseguir la protagonista, ¿no?

Cuando dijo la segunda frase, Elisa levantó intencionadamente la voz para que Rosa pudiera oírla.

—Los recién llegados realmente se están volviendo inquietos hoy en día, ¡los verdaderos actores dependen de su fuerza! No creas que puedas entrar en el equipo y hacerte popular solo por tener unos cuantos dólares apestosos. Hay que saber que la fama es destinada, ¡los que llegan a la fuerza pero se esfumarán!

Rosa abrió la boca con sorna, y Elisa estaba tan emocionada que sus ojos brillaban. No podía esperar a que Adela y Rosa se pelearan en el acto. Acababa de leer las 100 reglas del director, si los actores se peleaban y afectaban al rodaje, el contrato se rescindiría si la situación era suficientemente grave.

—Efectivamente. Algunos deberían ver su lugar.

—Entrando en el equipo a través de dinero y aún queriendo el papel de la protagonista, ¡no es digno de merecerse ni a los talones de Felisa!

Cuando los otros jóvenes recién llegados vieron a Rosa hablar, se hicieron eco del sentimiento.

Si en el pasado, Adela habría estallado. Pero ahora era como una espectadora que observaba el drama, sin que se produjeran ondas en su corazón.

—Rosa sigue teniendo razón, prima, deberías dejar de pensar en usar las conexiones de la familia. Ten los pies en la tierra, seguro que recogerás las recompensas.

—Probablemente, es la primera vez que me ve él, después de todo, mi aspecto es realmente impresionante.

Adela dijo en un tono extremadamente tranquilo. Estas palabras salieron de su boca sin ninguna intención de alardear, al fin, era la verdad.

—Angelita, ¿por qué no te vas todavía? Date prisa y vuelve.

En ese momento, Héctor se acercó con cara de fastidio y agarró por la fuerza la muñeca de Ángela para llevársela.

—Vamos también, Adelita.

Nicolás caminaba por casualidad hacia Adela, echando una mirada a Ángela que no estaba lejos, giró la cabeza hacia Adela y le dijo:

—Nicolás, ¿qué piensas de la actuación de Ángela hoy?

Adela preguntó de repente con interés.

—Aparte de ti y de Felisa, es la más destacada entre estos recién llegados. Si su representante la pule bien, será aún más popular que Felisa en el futuro.

Nicolás comentó justamente.

—Sí, yo también creo que tiene mucho potencial, en nuestra empresa faltan artistas como ella, puedes prestarle más atención.

Adela habló con expresividad.

La sorpresa apareció en la cara de Nicolás, pero luego siguió rápidamente las palabras de Adela y dijo:

—Entiendo, investigaré a esta chica más tarde.

—Bueno, vamos.

Adela asintió. Esta sensación de ser como Dios y saber quién era la futura estrella del espectáculo, ¡fue tan excelente!

Era tarde cuando regresó a la Finca Victoria, Adela estaba acostada en la gran cama vacía, Criz aún no había enviado ni un mensaje hoy...

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