-Directora Lin, ahora me encuentro yo a cargo del proyecto y debo disculparme con usted —Yu Wei sonaba muy sincero por el teléfono—. Xu Ruyun dejó salir sus emociones en el trabajo y le dijo todas esas cosas horribles. Eso ya fue reportado a la empresa y tomaremos las medidas necesarias, espero que no se quede con un mal sabor de boca. El Grupo Hesheng estaría muy contento de poder trabajar con el Grupo Lin y ayudarlos a entrar al mercado en Shengcheng. ¿Por qué no nos juntamos para cenar y hablar al respecto? ¿Qué opina, directora?
Lin Yuzhen tardó unos momentos considerando la oportunidad y al final aceptó con un «Ok». Ella quería decirle que, si iban a hablar de negocios, el mejor lugar para hablar de negocios era la oficina. Pero cenar sería más relajado y así discutirían los negocios de una manera más tranquila, entonces no era una mala idea.
Colgó y le dijo a Jiang Ning:
-Ve conmigo.
—Yo voy a donde tú vayas —le contestó.
Lin Yuzhen se sonrojó. Ya se había acostumbrado a que Jiang Ning estuviera a su lado. Eso la asustaba un poco porque ni siquiera lo conocía desde hace tanto.
Yu Wei escogió el lugar para ir a cenar: el Hotel Aegean Sea, cuyo nombre sonaba romántico por sí solo.
Lin Yuzhen estaba sorprendida. Era un lugar donde las parejas iban a citas, entonces, ¿por qué Yu Wei escogió un lugar así para hablar de negocios?
—Parece que el señor Yu es muy sincero — dijo Jiang Ning con sus ojos brillando.
-No divagues -respondió tajante-. Es de otra ciudad, entonces de seguro no sabe sobre estas cosas.
Jiang Ning rio un poco. Sólo entre hombres saben lo que uno trama.
Entraron y el mesero los llevó a una mesa apartada en una esquina. Cuando Yu Wei vio que Jiang Ning se había unido a la cena, se congeló por un momento, pero finalmente se levantó y le estrechó la mano.
-¡Hola, directora Lin!
—Hola, señor Yu.
Lin Yuzhen le estrechó la mano gentilmente y luego la retiró. Notó que Yu Wei se encontraba solo.
-¿Dónde están sus compañeros de la empresa?
-Jiang Ning -se presentó mientras le daba la mano.
—¿Eres el que se casó con ella, el yerno adoptado?
El rostro de Yu Wei se llenó de desdén. No quería estrechar la mano de Jiang Ning y sólo lo miraba de arriba abajo.
-Escuché el rumor de que usted era un vago y estaba loco.
Con razón Jiang Ning expuso todo sobre Xu Ruyun frente a tanta gente. ¡Estaba loco!
La expresión del esposo no cambió, pero Lin Yuzhen ahora estaba muy molesta. Odiaba que le dijeran cosas así de Jiang Ning. Sin importar nada, Jiang Ning era su esposo.
-Vete. No es digno de la directora Lin y sin lugar a duda no eres digno de sentarte conmigo. —Yu Wei continuó sin dejar que Lin Yuzhen hablara más—. ¿Un hombre que fue adoptado como yerno quiere estrechar mi mano? Es una burla. Sólo eres el perro de la directora Lin. Con mover un poco tu cola te da un hueso para comer, pero si intentas sentarte con tu dueño, entonces ¡eso es cruzar la raya!
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