Héroe Retrasado romance Capítulo 216

—¿Puedes hacerte a un lado? —Su Yun frunció el ceño—. Eres muy maleducado.

—Ja, ja, ja. ¿Maleducado? —Uno de los vándalos rio en voz alta—. Permíteme ser todavía más maleducado. —Rio de manera maliciosa y continuó hablando en un tono de voz lascivo—. ¿Puedo invitarte a dormir conmigo? Ja, ja, ja.

—¡Piérdanse! —El rostro de Su Yun estaba rojo del enojo—. ¡Sin vergüenzas!

—¿A quién demonios crees que le estás gritando? —El pandillero se molestó al instante—. ¿Cómo te atreves a gritarme? Te daré una oportunidad, sal a tomar un trago conmigo o de lo contrario…

—O de lo contrario, ¿qué? —El hermano Gou entrecerró los ojos y se acercó con las bebidas en la mano, no les dio mucha importancia a esos pandilleros de tercera. Incluso antes de que tomara el entrenamiento de Jiang Ning podría haber peleado con diez como ellos por si solo en Donghai.

—Vaya, alguien llegó. —Los pandilleros caminaron hacia él—. Esta perra me ofendió, ¿y qué? ¿Acaso vas a defenderla?

El hermano Gou rio, abrió una botella de agua y se la pasó a Su Yun.

—Toma un poco de agua, está un poco tibia, solo debemos esperar un poco más.

Jiang Ning ya estaba de camino.

—Maldita sea, ¿estas cansado de vivir? ¡Te hablo a ti!

El líder de los pandilleros se subió las mangas y se puso en posición de pelea. Su Yun retrocedió obediente, el hermano Gou por fin volteó a mirarlos. No era necesario que Jiang Ning se encargara de ellos.

—¡Tú lo pediste!

El hermano Gou le lanzó una mirada, tenía que quedarse ya que Jiang Ning le había pedido esperar allí. Ellos no le podían importar menos y actuaba como si esas basuras no existieran. De inmediato el líder sacó su teléfono, estaba tirado en el piso, pero lo miraba de manera amenazadora mientras gritaba:

—¡Eres hombre muerto!

Lo iba a hacer arrepentirse por querer portarse como un héroe en frente de la chica. Los pandilleros por fin lograron ponerse de pie y permanecieron a una distancia corta para esperar los refuerzos, cuando vieron que el hermano Gou y Su Yun seguían todavía parados allí con toda tranquilidad mientras bebían agua y comían algo, se enfadaron aún más que antes. En poco tiempo llegaron dos furgonetas que frenaron de golpe, una docena de hombres corpulentos y musculosos salieron de ellas. El líder de los pandilleros se emocionó enseguida.

—Hermano Si, son esos dos. Les dije tu nombre, pero no les importó e incluso se burlaron, ¿cómo podía permitirlo? —el líder continuó enojado—. Estaba molesto así que traté de golpearlo, pero ese tipo sabe cómo pelear y tuve que llamarlos.

Todos los hombres que llegaron eran muy agresivos y tenían un aire asesino, en el momento en que oyeron que esos dos habían sido tan arrogantes, sus expresiones se oscurecieron. El hermano Si sonrió con desprecio mientras se acercaba, sería una vergüenza si no les rompiera las piernas, pero al acercarse y ver el rostro de Su Yun so corazón casi se detuvo. ¿En dónde había visto esa cara antes? Su impresión era que tenía que correr si alguna vez veía esta cara y que nunca debía ofenderla, de lo contrario moriría, aunque se arrodillara y pidiera misericordia.