Héroe Retrasado romance Capítulo 80

Al principio, Lin Xiao todavía podía comer solo, pero una vez ensució por accidente la ropa de Lin Qiang y él le dio dos bofetadas. Lin Xiao no podía creerlo. Lin Qiang era el hijo que siempre le tuvo tanto respecto y hasta se arrodillaba frente a él. ¡Él era su padre, por el amor de Dios!

-Ah, casi se me olvida que ahora eres inservible. -Lin Qiang le echó una mirada de desprecio-. Deberías haber muerto hace mucho y haberme heredado el negocio familiar. ¿A qué te aterras tanto?

»Y para colmo, te dio un ataque, no te moriste y ahora necesitas gente que te atienda.

Sacudió la cabeza y no fue necesario que escondiera la repugnancia de su rostro. A Lin Xiao le temblaron los labios al mirar a Lin Qiang. No podía esperar para estrangular a este hijo malagradecido. Ahora, de repente, se daba cuenta de que, de sus tres hijos, Lin Wen y su familia eran los que más lealtad le tenían. ¿Y cómo lo había tratado? Se arrepentía. ¡Ahora se arrepentía!

RIIIIIING...

El teléfono de Lin Qiang sonó. Era uno de los directivos de la compañía. Parece que las buenas noticias no cesaban.

-¿Qué pasa? -Lin Qiang esbozó una amplia sonrisa al contestar. Sin embargo, de inmediato palideció—. ¿Qué dices? ¿El director L¡ se niega a trabajar con nosotros? ¿Qué está pasando? ¿Qué? ¿El director Zhang nos pagó la indemnización y quiere rescindir el contrato?

El rostro de Lin Qiang se ensombreció. ¿Qué clase de noticias de mierda eran estas? Acababa de firmar los contratos de estos dos proyectos. ¿Por qué fracasaron? Estaba tan molesto que casi azota el teléfono.

Después de colgar, sonó de nuevo. Cuando vio que quien llamaba era el gerente de un banco del cual eran socios, Lin Qiang suprimió el enojo que sentía y al instante puso una sonrisa en el rostro.

-Gerente Luo... Espere, ¿qué? ¿No habíamos acordado este préstamo hace dos días? Dijo que no habría problema, ¿por qué no está aprobado? ¿Hola? ¿Hola?

¿Gerente Luo?

Su respiración comenzó a agitarse. ¿Qué carajo estaba sucediendo? Después de colgar, otro banco que era su socio le llamó para apresurarlo a pagar el préstamo anterior junto con las penalizaciones de pagos atrasados, o si no, el banco haría que un tribunal congelara sus activos. A Lin Qiang se le saltaron las venas del cuello. No tenía ¡dea de lo que había ocurrido.

Lin Qiang estaba tan enojado que se había vuelto loco y ya no le importaba. Golpeó a Lin Xiao varias veces, hasta que este empezó a sangrar.

-¿Cómo te atreves a mirarme así! ¿Estás pidiendo morir?

Cuando notó que la furia en la mirada de Lin Xiao se convertía en miedo, dejó de golpearlo, pero aún parecía

que iba a tragárselo entero.

—!Lin Wen, Lin Yuzhen, quiero verlos muertos!