Jefe Atrevido: Amor Retardado romance Capítulo 176

Acercándosele, Erick dijo,

—Vengo por parte del señor Ricardo Covarrubis, podrás confirmarlo con él.

Apenas escuchó sus palabras, la recepcionista marcó una llamada y poco después, colgó el teléfono. Les dijo que esperaran un poco aquí.

Vanesa los miró al uno tras el otro, con un rostro confundido.

«¿Erick nunca se había asomado por aquí antes?»

—¿Cuánto tiempo llevas trabajando aquí? —se dirigió Vanesa a la recepcionista.

—Casi cinco años ya —dijo la recepcionista nerviosa.

«¿Cinco años trabajando aquí pero no conoce a Erick de nada? ¿No es él el hijo importante para su padre?»

Poco después, salió del ascensor un hombre que era mucho mayor que Erick.

—Ya llegaste —dijo el hombre tranquilo, pero se quedó de pronto sorprendido apneas la miró a Vanesa.

Vanesa lo miró suspirando en silencio.

«¿Así será como se trata a la famosa?»

—Este es Ricardo, mi hermano mayor —dijo Erick.

Vanesa lo miró con una sonrisa tranquila,

—Hola, Ricardo, encantada.

—Hola, señora Icaza, encantado —dijo Ricardo.

Vanesa echó a reír,

—Llámame Vanesa, no hace falta ser tan formal.

Ricardo sonrió pero no dijo nada. Luego los tres subieron al ascensor.

«La disposición de la empresa es casi misma que la del resto de las empresas, nada especial».

Llegaron después a la oficina de los recursos humanos para pasar por los papeles. Ricardo dijo al personal que le encargara a Erick el puesto de vicepresidente y que le acomodara al lado de la oficina del señor Jonathan Campos quien lo guiaría después.

El personal lo miró con los ojos asombrados, luego dijo,

—Vale.

Erick sonrió suavemente sin que nadie se diera cuenta, mientras Vanesa se quedó distraída observando su alrededor.

Rellenado el formulario, los llevaron a Erick y a Vanesa a una sala de reunión. Apenas se sentaron, entró un hombre que era casi de misma edad que la de Erick. Le clavó los ojos y dijo en un tono lleno de disgusto,

—¿Qué estás haciendo por aquí?

Ni siquiera lo miró Erick ni le respondió.

—Resulta que has encontrado a un protector, por eso te ofrecieron de repente un puesto tan alto. Erick, tengo que confesar que te había subestimado. Deberías haber dedicado muchos esfuerzos para lidiar con la familia Icaza, ¿cierto?

Vanesa echó a reír y se dirigió a Erick,

—Erick, de verdad creo que esta empresa tampoco es tan cualificada como me imaginaba. Que cualquier tipo podrá conseguir un puesto.

El hombre la miró con un visible enojo, callado. Poco después, entró una mujer que se apoyó contra la puerta y se dirigió al hombre,

—Facundo, ¿qué estás haciendo por aquí? Ocúpate con lo tuyo, no gastes el tiempo en las personas menos importantes.

El hombre volvió la cabeza para dirigirse a ella,

—Elisa, ¿sabes que Erick va a trabajar aquí de vicepresidente?

Ni siquiera lo miró a Erick, la mujer dijo tranquila,

—Vámonos.

Facundo se marchó enojado después de mirar a Erick por un buen rato. Cuando se cerró la puerta, Vanesa se dirigió a Erick,

—¿Quienes son?

Erick sonrió,

—Son mis hermanos.

Historial de lectura

No history.

Comentarios

Los comentarios de los lectores sobre la novela: Jefe Atrevido: Amor Retardado