Capítulo 57
“Oye, no te metas en esto, lo que tengo con Rosa es más que este problema, pero puedo manejarlo yo misma.”
David se giró y la miró profundamente, quedándose en silencio por un momento antes de que su voz grave comenzara a resonar lentamente.
“Bueno, puedes manejarlo tú misma, pero no puedo prometer que no intervendré. Haz lo que quieras, si hay problemas, te ayudaré a resolverlos.” Selena sonrió levemente, mirándolo desde abajo y susurrando,
“¿Hacer lo que quiera? ¿Estás seguro de que soy tan buena como crees?”
David también sonrió, se acercó a ella, se inclinó y sus ojos brillaron intensamente.
Con voz baja y elegante, dijo,
“Mi mujer no necesita ser tan buena.”
No necesita ser tan buena…
Antes, siempre había priorizado a Héctor, soportando ciertas cosas por miedo a causarle problemas innecesarios con sus impulsos.
Había sido cautelosa, pero al final fue traicionada.
Como mujer, nunca habia sentido preocupación por parte de Héctor.
Pero ahora, este hombre…
Si había problemas, él los resolvería…
No necesitaba ser tan buena…
¡Él siempre sabía cómo llegar a su corazón!
La puerta del apartamento sono de repente, interrumpiendo los pensamientos de Selena.
Recobrando el sentido, alisó su cabello por costumbre y soltó la mano de David.
“Voy a abrir la puerta.”
David la siguió, sin intención de quedarse mucho tiempo.
Cuando la puerta se abrió, un fuerte olor picante golpeó sus narices.
Selena frunció el ceño y miró a la persona en la puerta, algo desconcertada.
Comentarios
Los comentarios de los lectores sobre la novela: La Caída y el Rescate del Amor Novela