Jacob percibió que Sasha pensaba que era su hijo, sabía que debía explicarse antes de que esto se saliera de sus manos y Sasha saliera lastimada y tuviera una recaída peor:
—Es de Jaime, lo tuvo con una de las muchas de servicio hace años, creo que....
Sasha se puso ansiosa al escuchar a Jacob:
—Por ese entonces éramos novios... ¿pero...
—Cálmate, amor, te contaré, ¿recuerdas las llamadas que recibí?
Sasha asintió, ¿cómo podría ella olvidar que se alejaba cada que recibía esas llamadas?, y Jacob continuó:
—Me dijo el abogado de Jaime, quería hablar conmigo, por supuesto al principio me negué, pero al final terminé accediendo por la insistencia de mamá Carolina, al ir a visitarlo al penal sólo le dije que dijera lo que tenía que decir, y me habló sobre la madre del niño, ella tuvo un accidente no hace mucho y el pronóstico de vida es sólo días, el niño no fue reconocido por él, pero sabía que era suyo.... pero como sabes, no está en condiciones de hacerse cargo, también me dijo que recordó que él ayudó en tu secuestro e indirectamente en la muerte de nuestro hijo.
A Sasha se le llenaron de lágrimas los ojos al recordar su primer bebé no nato, y cómo sufrió para poder quedar de nuevo embarazada y al final terminar perdiéndolo, había sufrido tanto estos meses desde la pérdida de ese último bebé, tocó su vientre, Jacob dio un suspiro pensando en cómo decirle lo siguiente, ya que Sasha había estado tan frágil desde que perdió al último bebé.
—Al final me dijo que quería compensarte y su propio hijo sería una forma de hacerlo, sabe que eres una buena persona y lo podrías criar muy bien y asegurarte que no fuera como él.... amor, sé que es difícil para ti.... yo...
Sasha miró al niño y miró a Jacob, si no fuera por la abuela, quizá ella jamás habría conocido a Jacob cuando niña o sería una persona diferente.
—¿Qué dice la madre del niño? —preguntó limpiándose las lágrimas.
—Si aceptas, nos dará la adopción legal del niño, siendo yo su único familiar de sangre no habrá problema, sólo pide que le hablemos de ella.
Sasha asintió, miró al niño y comenzó a llorar un poco, un niño no reemplaza a otro, pero ella tenía tanto amor que no le pudo dar a sus hijos no natos, y allí estaba ese pequeño que necesitaría amor de una familia, pese a todo lo que ella vivió la vida al final la estaba recompensando y ella no podía dejar al desamparo a un niño tan pequeño, y mucho menos porque se parecía a su amado esposo el amor de su vida, más que al idiota de Jaime, miró a Jacob.
—¿Tú le darás, cariño? —esa era la única duda en el corazón de Sasha, ya que sabía que Jacob podía guardar bastante rencor después de lo sucedido.
—Puedo amarlo como si fuera nuestro propio hijo.
Sasha le acarició la mejilla y le dio un beso en los labios.
—No puedo dejarlo desamparado, es tan pequeño.... será nuestro hijo.
Jacob la abrazó de lado, ya sabía que Sasha tenía un corazón de pollo y no se negaría, por lo que ya había hablado y visto todos los procedimientos para que Alex estuviera con ellos.
Los tres pasaron la tarde juntos aunque Sasha no estaba muy bien, aun así le gustaba la sensación de que al fin tenía una familia completa en este matrimonio, por la noche llevaron a Alex a dormir, fue la habitación de Sasha, pero cuando estaban a punto de dormir, se escuchó que tocaron la puerta y esta se abrió, Jacob se incorporó y miró la pequeña figura en la puerta.
—¿Qué sucede, pequeño? —preguntó Jacob a Alex.
—¿Puedo dormir aquí? —dijo tímidamente el niño, Sasha le palmeó la mano a Jacob y este dio un suspiro.
—Claro, ven aquí, campeón.
Alex corrió para ir del lado de Jacob, este lo subió a la cama y lo puso en medio de los dos, Sasha le acarició la mejilla a Alex.
—¿Le tienes miedo a la oscuridad? —le preguntó Sasha a Alex.
—Mami siempre me ponía una luz para dormir.
—Aquí no hay nada que temer, toda la casa tiene seguridad y Jacob fue militar, estamos seguros en casa, pero compraremos unas lámparas para ti ¿sí?
—Gracias.
Jacob dio un suspiro, ya que Sasha parecía estar de más ánimo, al final los tres se quedaron dormidos, Sasha despertó primero que los dos varones en su cama, al frente de ella había una cara pequeña y enseguida Jacob dormía boca arriba, Sasha sonrió al imaginar que durmió en esa posición, ya que debió de tener miedo de aplastar al pequeño Alex, se le llenaron los ojos de lágrimas, pasó sus dedos por el pequeño rostro de Alex, era como un mini Jacob, sólo le faltaba el lunar.
—Me pondré celoso si lo miras tanto —dijo Jacob quien había despertado, y al voltear la miró embelesada con el niño, pero también estaba llorando.
—Buenos días. Guapo —Sasha se incorporó un poco solo para alcanzar a darle un beso a Jacob.
—Buenos días, pequeña, ¿cómo amaneciste?
—Mejor, ¿nos bañamos antes de que despierte?
Jacob sonrió y acarició la mejilla de Sasha:
—Claro pequeña.
Al salir del baño después de la ducha y se estaban alistando, el pequeño Alex despertó, al principio estaba desorientado, pero al incorporarse y ver a Sasha y Jacob terminando de vestirse, supo dónde estaba.
—Buenos días.
—Buenos días, Alex —dijeron los dos al mismo mientras, lo miraban con cariño y le sonreían, cuando estuvo más despierto, Sasha revisó la mochila de Alex donde llevaba ropa, sacó un conjunto de ropa y lo llevó a bañarse, Jacob la miraba sólo para asegurarse de que Sasha realmente se sentía bien, pero nada sucedió.
Naomi estaba inquieta por Alex, pero Jacob le ordenó que no dijera nada a la familia sobre el niño.
—Alex, ve por tu mochila para irnos.
Alex fue por la mochila que había llevado y Sasha miró ansiosa a Jacob:
—¿No se quedará?
—Debo llevarlo a ver a su mamá, ya que conseguí que le dieran un pase especial y después ir por sus cosas.
—Quiero ir.
Jacob miró con impotencia a Sasha, ya que no quería que fuera al hospital y se sintiera mal, pero al verla tan ansiosa:
—Está bien, pero debes decirme si te sientes mal enseguida o si quieres volver a casa.
—Lo prometo.
Alex regresó con ellos y miró que irían los tres a ver a su mamá, los tres salieron de la casa y Jacob había puesto un asiento para niños, Sasha pensó que Jacob era muy protector, así que las dudas que pudiera tener sobre Jacob se habían disipado, fueron en silencio al hospital, Jacob tomó la mano de Alex y abrazó a Sasha con la otra, eran el retrato de una bella familia, Jacob dejó a Sasha sentada a un lado de la puerta del dormitorio de la habitación en lo que Alex entraban a ver a la paciente.
—¡MAMI! —gritó con alegría Alex y corrió a la cama de hospital donde estaba su madre, se subió a una silla y miró a su madre quien estaba conectada a varias máquinas.
—Cariño, ¿viste a la señora?
El niño asintió:
—Sí mami, la miré.
—Ven, Alex, siéntate en mis piernas, debes de estar cansado.
—Estoy bien, tía Sasha
—Vamos, mira, así me das un poco de calor ¿sí? —insistió Sasha y Alex la obedeció, pero sólo se quedó un momento despierto, ya que después se acomodó y terminó por quedarse dormido, Jacob miró la escena de los dos dormidos en la silla abrazados, no quería despertar a Sasha, pero tenía que hacerlo.
—Cariño, despierta, hay que ir a casa, ya es hora de que cierren el velatorio —dijo Jacob y Sasha despertó despacio—, déjame al niño.
—Sí, está bien —Sasha dejó de abrazar a Alex cuando Jacob lo estaba tomando en brazos, y luego la ayudó a levantarse, salieron del velatorio, y al subir al auto Sánchez arrancó rumbo a la casa, en la casa Jacob dejó a Alex en la cama y él se metió a dar una baño, cuando salió, Sasha y Alex estaban abrazados y bien dormidos, era una buena imagen, así que les tomó una foto, Jacob se acostó y abrazó a ambos, ahora esta era su familia, debía de acostumbrarse a compartir a su pequeña Sasha.
A la mañana siguiente, Jacob despertó primero que ambos y fue a pedirle el desayuno a Naomi, Alex se despertó y se desconcertó al estar en la habitación de Sasha y Jacob, pero cuando se dio la vuelta y miró a Sasha dormir, le tocó la mejilla con la manita, se hacía a la idea que ella sería ahora su nueva mamá, Sasha despertó y miró a esa pequeña carita mirándola.
—Buenos días Alex.
—Buenos días mami —a Sasha se le cristalización los ojos y a Alex también—, ¿iremos a ver a mi mami?
—Claro, cariño, ayer regresamos porque cerraron el lugar....
—Ya despertaron.... buenos días pequeña —le dio un beso a Sasha y luego acarició la cabeza de Alex—, buenos días, Alex.
—Buenos días, papi.
—Buenos días, hermoso...
—¿Cómo amaneciste? —le preguntó Jacob a Sasha.
—Bien, así que puedo acompañarlos al entierro —dijo Sasha aunque se le veía un poco pálida.
—No te esfuerces mucho, cualquier cosa me dices.
—Lo haré... ¿trajiste el desayuno?
—Sí, quería consentirlos.
Les puso la charola en la cama y los tres desayunaron como una familia en la cama, después fueron al velatorio, después de un rosario se llevaron el ataúd a donde sería enterrada la madre de Alex, Jacob arregló para que estuviera cerca de las criptas familiar, la tumba quedó llenas de flores y el cementerio era llenado por el llanto del pequeño niño, y no dejó de llorar hasta que se quedó dormido, regresaron a casa y después de Sasha se empezó a sentir mal, así que Jacob llamó a José quien la revisó y sólo la mandó a descansar, cuando Alex despertó, miró a Jacob trabajando en el sillón junto a la ventana.
—No te muevas mucho, o despertarás a tu madre y no se sintió bien cuando regresamos del cementerio.
El niño sintió culpa y se acurrucó en los brazos de Sasha, ella lo había acompañado a pesar de que no estaba bien de salud, Jacob miró lo que hizo y dejó lo que estaba haciendo, porque intuía lo que pensaba Alex y se acercó.
—Alex hijo, mamá no se enfermó por tu culpa, ella está delicada de salud últimamente, así que esto es frecuente que suceda, si ella se siente mal o tiene sueño, sólo la dejamos descansar ¿sí?
—Sí papi —dijo Alex volteando con Jacob.
—Vamos a dejar a mamá descansar y vamos al jardín.
Alex dejó de abrazar a Sasha y fue con Jacob, Jacob lo cargó y bajó con él en brazos, al llegar al jardín se sentó con él en el quiosco.
—Sabes, yo tengo tres mamás, mi madre Jazmín quien me dio la vida, Carolina mi madrastra y Luisa la mujer que me adoptó por petición de mi madre biológica, a todas las quiero, pero a mi mamá biológica tiene un lugar especial aunque no la recuerdo muy bien, así tu mamá Olivia que te cuida desde el cielo, y ahora tendrás más familia, abuelos, tíos y primos, sabes, todos estarán felices de que formes parte de nuestra familia.
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