Más que un trato romance Capítulo 21

Me doy cuenta que esperamos turno para bajar, así que miro por la ventana pero no veo nada así que doy un suspiro- no es como las alfombras rojas del Oscar o Gramy -dice William y me siento más tranquila hasta qué vuelve a hablar- pero si hay prensa, si no te apetece no digas nada sólo sonríe y mantente a mi lado -asiento con la cabeza- ¿lista? -niego con la cabeza y el ríe un poco y antes de decir algo más la puerta se abre y el murmullo de gente hablando al mismo tiempo invade la silenciosa limo, William baja y me extiende la mano creo qué por esto ese afán de abrir el la puerta. Tomo su mano y bajo con cuidado, flashes se disparan al mismo tiempo que casi quedo siega no suelto la mano de William hasta que la pone en su brazo y lo aprieto, tantas cámaras me ponen nerviosa pero camino y empezamos a subir unos cuantos escalones hasta que le llaman a William por su nombre.

- William Strelnikov ¿quien es tu acompañante?

- Ella es mi novia -voltea a verme y yo sonrió como si fuéramos novios verdaderos sin varios contratos de por medio.

- Y que nombre tiene -William sólo sonríe se nota la malicia en esa sonrisa.

- Aún no puedo revelar su nombre, pero esta noche todos sabrán -posamos para unas cuantas fotos ya que William ya no contesta ninguna pregunta sobre su familia o de él- en el último escalón voltea hacia atrás como si te hubieran hablado sonríe y continúa caminando -me dice al oído, subimos los escalones y hago lo que me pide, muchos reporteros y también veo a Jonathan bajar y los flashes se van hacia el solo y unos pocos se enviaron en nosotros.

- Jonathan viene detrás.

- Esperemosle entonces -nos quedamos en el recibidor pasan unas personas y después Jonathan.

- Mi pareja favorita -dice tomando mi mano- prima te vez hermosa haces honor a tu segundo nombre y más por esos ojos, serás la envidia de muchas -sólo le sonrió y se saludan entre ellos, entramos los tres, admiro la estructura del edificio no me fijo en cuantas mesas hay sólo se que son muchas y hay mucha gente, el salón es blanco con dorado, los vestidos hay de todos y todos colores y tipos, mujeres hermosas y algunas de edad avanzada, la crema y nata de la sociedad está aquí junto con estrellas de tv, cine y música, me fijo arriba en el escenario hay varias pancartas de modelos con joyas que tal vez serán las que se subastarán, pero falta él juego que llevo yo.

- señorita Arismendy -escucho en algún lugar la voz del señor Smith- qué bueno que pudo venir y le queda muy bien el juego.

- Muchas gracias señor Smith, pero debo agradecer la invitación aunque, no que me hiciera ponerme este costoso juego.

- Mi esposa me pidió que ese juego no lo llevará una modelo si no usted, puede preguntarle si quiere.

- Lo are señor Smith, no dejó ni que mi novio escoja lo que me pongo - el señor Smith rie divertido mirando a William.

- Lo dice enserio, casi me termina cuando se le dije.

- No soy una muñequita que puedan vestir a su antojo -digo sería- espero que sea la ultima vez que me usa como una muñeca que pueden vestir a su antojo señor Smith

- Cariño aquí estas.... ¡oh cielos es ella! -dice una mujer mayor pero no creo que llegue a los 50.

- Sí es ella cariño, y dice que la trataste como una muñequita -dice besando su mejilla y ella me mira.

- Sí lo dije, y a William se lo perdone porque lo amo -agradecí al cielo que no me dieran náuseas al decirlo- he hizo méritos y aún está en la línea roja.

- Lo siento mucho, pensé que te gustaría este honor de llevar ese juego, si yo fuera más joven o mejor dicho veinte kilos menos lo llevaría puesto.

- Se equivocó conmigo y le suplicaria que la próxima vez lo vea conmigo directamente, no soy una muñequita puedan vestir a su manera, soy una persona que tiene opinión y gusto propio.

- La señora Smith ya lo entendió amor -besa mi mano William- no lo volverá a hacer, yo no lo prometo porque te verías increíblemente sexy como policía o enfermera -lo dice y me sonrojo.

- William -digo casi en un susurro.

- Dime Afrodita -quería salir de este momento incómodo y sobre todo bien.

- Sólo usaremos el de Afrodita haciendo honor a mi nombre -me acerco y lo beso sus labios- solo si te portas bien.

- ¿Se llama Afrodita?

- Sí es mi segundo nombre pero a William le gusta más llamarme así -sonrió comos si realmente me gustará que me llame así, sin importar que nombre use siempre me molesta.

- ¡Hermanito! -lo besa Susan en la mejilla y al verme se queda mirándome igual que el día que la conocí, incomodidad, Inseguridad se instalan en mi y esto me hace sentir intimidada y doy un paso a un lado para esconderme de ella tratando de ponerme detrás de William al sentir las miradas de todos, este se da cuenta e intenta cubrirme.

- Tienes dos para dejarla de mirar así Susan, sabes como se pone cuando la miran así -susan despabila.

- Lo siento es inevitable cada que miro ese hermoso color de ojos y hoy le resaltan más -ahora si William me cubre por completo y me agarró de su sacó estaba empezando a temblar susan siempre sacaba mi lado vulnerable al verme fijamente y ahora le agregamos la multitud de gente, esto me va llevando a cuando era niña.

- Jona llevate a Afrodita tengo que hablar con susan y papá.

- Vamos Isa te llevaré a tomar aire fresco -toma mi mano y hace que suelte a William y me lleva a un balcón dónde ni el aire frío comienza a sacarme de ese estado.

•William•

- Lo siento señores Smith, como verán aunque es de carácter fuerte mi novia, tiene un punto débil que la desequilibra -tomo a Susan por el brazo y la llevo a donde vi a mi padre.

- William suelta mi brazo me haces daño -dice mi hermana aunque es mayor que yo estoy molesto, sólo he visto una vez como se pone la bella Afrodita cuando se le quedan mirando pero no se compara a lo que le pasó ahora con mi hermana.

- ¿Daño? viste como dejaste a la probé Isabela.

- ¿Hora es Isabela?

- William ¿porqué traes así a tu hermana?

- Dejo en shok a la pobre Afrodita, no dejó de hacer lo que hace.