Matrimonio de primera romance Capítulo 1193

—Delfino... —Yadira estaba pensando en qué decir, pero fue interrumpida por Fidelio.

—Yadira, no tienes que consolarme. Me lo merezco—. Fidelio suspiró, y no estaba tan alegre como antes.

Yadira respiró hondamente y cambió de tema: —¿Cómo te sientes? ¿Quieres comer algo? Iré a casa y te lo prepararé.

Fidelio negó con la cabeza: —Gracias. No tengo ningún apetito, y no quiero comer nada.

Al verlo así, Yadira se sintió triste.

—Todo va bien.

En un momento tan difícil, ella no podía hacer nada que consolarlo.

—Lo sé—. Dijo Fidelio, ahogándose en lágrimas.

—Cuando era joven, siempre me pareció que Delfino era un hombre extraño con mal carácter. Cuando crecí, me enteré de que había sido secuestrado con su madre cuando era niño, y poco a poco lo entendí. Pero...

Fidelio frunció las comisuras de los labios y añadió: —No sabía que había tantas cosas sucias detrás del secuestro. Lo siento por Delfino. Llevaba una vida más dura que cualquier otra persona. Si tuviera una oportunidad más, sin duda confiaría en él.

—Eres demasiado joven para asumir la culpa—. Yadira sabía que Fidelio era demasiado simpático y se vio obligado a seguir la orden de Franco.

—No, es mi culpa. Delfino me trató muy bien. Incluso si tuviera alguna duda, debería preguntarlo a él primero. Y aunque peleara con él cara a cara, este estaría bien. Al menos debía confiar en él, en lugar de Franco.

—Fidelio.

Delfino se sentó fuera y se levantó cuando vio salir a Yadira.

Cuando Yadira oyó los pasos, se apresuró a secarse las lágrimas.

Delfino la agarró de la muñeca y la detuvo. Por supuesto, vio sus ojos rojos. Tras un momento de silencio, frunció ligeramente el ceño: —Si lo hubiera sabido antes, habría entrado contigo.

Yadira resopló: —Estoy bien.

Delfino no dijo nada y extendió la mano para secar sus lágrimas en silencio.

Yadira lo miró.

Historial de lectura

No history.

Comentarios

Los comentarios de los lectores sobre la novela: Matrimonio de primera