Mi dulce corazón romance Capítulo 98

Luego, Aurelio Clemente siguió trabajando, mientras Cordelia Vega se sentaba en el sofá y probaba el nuevo móvil que acababa de recibir.

Primero envió un mensaje a Chantal Oriol y luego abrió Facebook.

Como una profesional en relaciones públicas, era esencial tener actualizado todas las noticias de la industria del entretenimiento. Aparte de mandar espías, en la mayoría de los casos se conocía las últimas novedades de otros artistas por Internet.

En los hashtags más buscados de Facebook, estaba el tráiler de "Las historias de Elvira".

Cordelia echó un vistazo, porque esta obra había estado muy comentada en la red durante los últimos dos años, por lo que los internautas estaban muy emocionados de saber que se iba a rodar en breve.

Había publicado solo un simple tráiler de pósteres, donde estaban escritos el título de la película y el nombre del protagonista en un fondo histórico con paisajes magníficos.

Se estimaba publicar el póster de los actores en pocos días.

Los actores más importantes de la obra eran los protagonistas Briana Vega e Iker Monterero, que eran también los más comentados.

Luego, estaba en segundo lugar Alina García, que actuaba de un personaje de segunda importancia.

Sin embargo, Nieves como actriz del personaje terciario pareció poco visible y su nombre ni siquiera apareció en los comentarios. Pero eso no era sorprendente, porque Nieves no era muy conocida a pesar de que llevaba tiempo en la industria del entretenimiento.

Cordelia reenvió la publicación con su cuenta de trabajo mencionando a Nieves, con la siguiente frase: «El embarque de un viaje a la galaxia».

Después de cerrar la sesión de Facebook, Chantal respondió su mensaje.

Su nueva obra estaba a punto de finalizar en los próximos días y había muchas escenas que tenían que volver a grabar, así que estaba muy ocupada.

Chantal supo que Cordelia había sufrido un accidente por otras personas.

El círculo de la Ciudad J no era grande y era fácil para el Grupo Oriol saber lo que ocultaba detrás de los ataques que había sufrido la familia Alfaro.

Afortunadamente, no había pasado nada y Chantal también se sintió aliviada. Era solo que el móvil de Cordelia se había roto y no conseguía contactarla. De modo que, la respondió de inmediato preocupada al recibir su mensaje.

Cordelia sonrió y le dijo que estaba bien.

Chantal seguía muy enfadada y estuvo criticando brutalmente a la idiota de Anastasia en el mensaje.

Si no fuera porque la familia Alfaro ya había tomado la iniciativa de mandarla al extranjero, ella tendría que darle una buena paliza para calmar su ira.

Las dos charlaron un rato y Chantal tuvo que dejarlo porque estaba ocupada.

Tal vez por estar allí, Aurelio no trabajó por mucho tiempo, después de media hora terminó su trabajo.

De camino a casa, Cordelia recibió de repente una llamada de la señora Libertad Pozo.

Ella estaba un poco sorprendida, porque no se habían contactado desde que la señora Libertad se había enfadado con ella por su asunto con Bosco Alfaro en la fiesta de cumpleaños de Briana.

Cordelia no sabía si la señora Libertad se habría enterado de la verdad del asunto, pero ella no podía fingir como si no hubiera sucedido nada.

Si había admirado un poco a la señora Libertad por influencia de su madre, después de lo sucedido, ese sentimiento ligero se fue disipando gradualmente.

De todas maneras, ella era una persona de sangre fría, solo estaba dispuesta a querer a las pocas personas que realmente se preocupaban y creían en ella... No iba a esforzarse con los demás.

Cordelia contestó el teléfono y se escuchó a la señora Libertad hablar con su vieja y amable voz.

—Cordelia, ¿estás ocupada?

Cordelia dijo indiferentemente:

—No, ¿qué ocurre?

La sensación distante que mostraba Cordelia hizo que en el otro lado había unos segundos de silencio y la señora Libertad suspiró:

—Te culpé por lo que pasó la última vez, ¿todavía estás enfadada conmigo?

—No.

Al fin y al cabo, la Señora Libertad solía ser amable con su madre y la había cuidado mucho cuando era niña.

Era imposible culparla, pero estaba decepcionada porque alguien que había considerado de confianza no la había creído.

La señora Libertad dijo:

—He estado mucho tiempo avergonzada de llamarte, porque te había culpado aquella noche delante de todos y era muy indebido. Antes de ayer, escuché a tu tío mayor hablar sobre tu competición con Briana y supe que habías sido acusada. Hija mía, has sufrido durante tantos años.