Linda la levantó rápidamente y ayudó a ordenar el vestido de novia
Catherine reprimió la angustia y sonrió: "Vamos allí también". Una luz arenosa brotó de sus ojos.
"¿Qué?" Linda se sorprendió. Su mente se quedó en blanco durante unos segundos.
Catherine contuvo las lágrimas. Pensando en cómo los coches de la boda se dirigían al lugar de celebración, intentó calmarse.
Decidió tomárselo como una crisis de relaciones públicas.
"Sra. Collins... no creo que esto sea una buena idea..." Linda estaba muy disgustada, pensando que como Iván había hecho esto, nada le haría cambiar de opinión, e ir allí sólo les avergonzaría.
"Ve". Catherine apretó los dientes y se levantó el vestido, caminando hacia la puerta. "Sé que no se casará conmigo, y no espero que lo haga".
"Entonces, ¿por qué vamos allí?" Linda estaba ansiosa, "¡Despierta!"
"Para enviar nuestras bendiciones. Lo he amado durante tantos años, tengo que despedirme, ¿verdad?"
Linda no se lo creía, "Entonces cámbiate el vestido de novia antes".
"¿Por qué iba a hacerlo? Voy a hacer que su boda sea inolvidable". Catherine levantó la voz, ya había luz de odio en sus ojos. Ella quería destruir a Jennifer con sus propias manos.
¿Por qué Iván se enamoró de Jennifer incluso después de perder la memoria?
¿Por qué no podía verla a ella, que había permanecido a su lado durante tantos años?
"¿Te vas?" Catherine se paró en la puerta y puso los ojos en blanco: "¿O me voy sola?".
"Sra. Collins, cálmese..."
"Estoy calmada". Con eso, Catherine levantó el dobladillo de su vestido y dio un paso hacia afuera.
Linda tuvo que seguir su ritmo.
"Se llama Volvo. Cuesta millones de dólares. Probablemente sea la única vez que nos sentemos en un coche así".
"¡No, si echas de menos la sensación, díselo a Jennifer!"
"Oh, Dios mío, esta boda es tan grande. ¿Estoy en un sueño? ¡Jennifer es tan afortunada de casarse con un hombre tan rico!"
"¡Sí! Su marido es el presidente del Grupo Marsh. Tiene tanto dinero como poder. Es como un rey de la ciudad de Arkpool".
"Siempre he sentido que Alfie y Diana son extraordinarios, mucho más inteligentes que otros niños. Resulta que es genético".
En los coches, la gente charlaba animadamente. Era fácil llevarse bien con Jennifer, y la gente se sentía relajada.
En el coche principal de la boda en la parte delantera.
Jennifer se sentó junto a Iván. Le cogió la mano, compartiendo su calor. Estaban cada vez más cerca de la felicidad...
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