Mi Ex-esposa Misteriosa Es Multimillonaria romance Capítulo 423

Capítulo423

El audio, de principio a fin, era un lamento apesadumbrado de Joaquín hacia ella, revelando cómo

lo había seducido y manipulado para robar los planes del Hotel KS en estos últimos tiempos, ¡todo

estaba allí!

El móvil cayó al suelo.

Rosalía sintió que sus piernas se debilitaban, se sentó en el suelo, sintiendo que su mundo se

derrumbaba por completo.

En plena noche, Leona se tomó un baño de burbujas y se sentó frente al tocador para hacer su

rutina de cuidado de la piel.

Desde aquel día en que Rodrigo le dio un ultimátum por Noa, su corazón estaba abrumado, ni

siquiera podía dormir bien.

¿Qué tiene Noa de especial? ¿Por qué Clara la ayuda y ahora Rodrigo la está apoyando?

-Noa es una mujer malvada que finge ser tonta-Leona tomó el lápiz labial y escribió el nombre de Noa en el espejo, luego lo borró con enojo, -ahora no tengo tiempo para tratar contigo. Espérame hasta que me convierta en la directora general del Hotel grupo Hernández, luego vendré a ajustar

cuentas contigo.

En ese momento, su móvil sonó.

Leona vio que era Jimena quien llamaba, frunció el ceño con disgusto, pero cambió su expresión a una sonrisa hipócrita al contestar, -¿Qué pasa, Jimena? ¿Por qué llamas tan tar de?

-¡Hay un gran problema!

Jimena hablaba en un tono serio, bajando la voz, -Acabo de recibir noticias. Clara descubrió al infiltrado que estaba en el equipo de planificación, ¡la policía ya lo arrestó! –

-¿Qué? ¡Cómo pudo pasar esto!

Leona exclamó, nerviosa, sin poder quedarse quieta, -¿Y Rosalía?

-¿No sabes nada de la transmisión en vivo de su affaire esta noche? Rosalía y su jefe fueron atrapados in fraganti en una habitación de hotel, y transmitieron en vivo su exposición, ambos ni siquiera tuvieron tiempo de colocarse la ropa, ¡fue muy vergonzoso!

Un zumbido resonó en la mente de Leona.

Solo fue a tomar un baño, ¿cómo pudo haber ocurrido tantas cosas en tan poco tiempo?

-Debes eliminar todos los registros de chat que tengas con Rosalía, ¡quién sabe si la policía podría

rastrearte! -advirtió Jimena con voz sombría.

-¡Entendido!

Justo en ese momento, otro llamado entró a el móvil de Leona, era su secretaria.

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