Mi pretendiente es mi EX-MARIDO romance Capítulo 120

Después de decir esto, las manos de Briana sobre su regazo se juntaron, y se podía notar claramente que estaba nerviosa.

Aunque ella había analizado la situación actual detalladamente, no sabía exactamente qué era lo que estaba pensando Édgar.

Édgar había conseguido pasar de ser un hijo ilegítimo no reconocido a ser el presidente de Grupo Santángel al que todos temían, así que se podía imaginar lo ladino y lo mañoso que era.

Aunque Édgar parecía estar en el lado perdedor de esta lucha interna de la familia Santángel, Briana no estaba segura de poder convencerle con las condiciones que le ofrecía.

Al final, Édgar esbozó una sonrisa ligera y con una actitud fría y desatenta, preguntó, -¿Casarme contigo?

Briana se tomó un respiro y replicó, -Exacto. Si todo hubiera ido bien, nosotros ya habríamos casado hace tres años. Por no mencionar que ambas familias habían consentido este matrimonio durante mucho tiempo…

-Entonces puede que lo hayas entendido mal -Édgar la interrumpió, -Ellos querían que te casaras con Israel, no conmigo.

Briana se quedó atónita por un momento, -No puede ser, siempre he tratado a Israel como un hermano mayor…

-Por eso nadie te ha dicho nada.

***

A Agustina le caía muy bien Briana, pero si el novio seleccionado para Briana fuera Édgar, teniendo en cuenta el odio que tenía Agustina hacia Édgar, sería imposible que ella tratara amablemente a Briana.

Había dos razones por las que el matrimonio entre Briana y Israel no se había mencionado a lo largo de los años.

Una tenía que ver con Israel. No importaba lo que dijera Agustina, Israel se resistía a casarse con Briana y su actitud era dura, por lo que Agustina no tenía más remedio que rendirse.

La otra razón era que la familia Collazo era una familia prestigiosa, y Briana era la única hija y era muy mimada por su padre, por lo que era imposible que la familia Collazo aceptara que Briana se casase con un parapléjico.

La combinación de estos dos factores formaban la razón fundamental por la que nadie había mencionado el matrimonio entre la familia Collazo y la familia Santángel.

En cuanto a Édgar, Agustina deseaba que él se quedara sin nada, así que ¿cómo iba a dejar que Briana se casara con él?

Saúl temía que Édgar se volviera desobediente, así que cuando apareció Doria, quería que Édgar se casara con Doria lo antes posible.

Briana se calmó y dijo, -Si es cierto lo que dices, entonces es una razón más para que te cases conmigo. Eso les hará sentirse impotentes y también se podrá vengarse de ellos.

Édgar no dijo nada, estaba golpeando sus dedos sobre la mesa, sin saber qué estaba pensando.

Briana continuó diciendo, -Édgar, que yo me case contigo es lo mismo que Aitana se case con Abraham, las dos partes salen ganando. Como sabes, soy la hija única y a mí no se me da bien dirigir una empresa, así que un futuro matrimonio de negocios es inevitable. En lugar de casarme con un hombre al que no conozco bien, creo que tú eres la mejor opción para mí.

Unos segundos después, Édgar dijo, -Pero tú no eres mi mejor opción.

Briana frunció los labios, -Estás enamorado de tu ex-exposa, ¿verdad?

El rostro de Édgar se volvió hosco, -¿Qué tiene que ver eso contigo?

-Édgar, de verdad que no entiendo qué estás haciendo, por qué estás obsesionado por esa mujer, y no olvides quién te ha dejado en esta situación. Decías que nadie podía influenciarte, pero hiciste lo que tu padre quería y te casaste con ella.

Briana continuó, -Y supongo que tu padre no se ha enterado de que esa mujer está embarazada, ¿verdad?

Al oír sus palabras, la temperatura en la oficina bajó abruptamente.

Los ojos de Édgar se llenaron de frialdad y las palabras que salieron de su boca fueron tan escalofriantes como el hielo, -¿Quién te lo ha dicho?