¡No huyas, mi amor! romance Capítulo 353

-Laura, ¿de qué estás hablando? -

Antes de que Rosaría pudiera hablar, Eduardo ya no quería escuchar más.

Aunque a esta niña le gustaba Mateo, no podía protegerlo así, ¿verdad?

-No me equivoqué. La verdad es así -

Laura no sintió que hubiera dicho algo malo.

Eduardo miró a Mateo con desdén y dijo -Como un hombre adulto, tienes que ser protegido por una mujer, ¿qué ventajas tiene un hombre así? -

-Eduardo, no digas tonterías -

Rosaría temía que Eduardo provocara a Mateo. Obviamente, Mateo hoy no estaba de buen humor.

Los ojos de Mateo se entrecerraron.

-Mocoso, quieres pelear conmigo, ¿no? -

-Perdiste la cara afuera, ahora desahogas tu ira conmigo. Mateo, eres realmente descarado -

Eduardo no tenía ningún miedo de Mateo. Se burló de él, haciendo que Mateo estuviera súper enojado.

Mateo ya estaba bastante deprimido por esa foto, pero ahora incluso su propio hijo le atropelló, su expresión se puso hosca de inmediato.

-¡Soy descarado en muchos aspectos! -

Después de hablar estas palabras, él subió las escaleras directamente. Parecía que de veras estaba enojado.

Rosaría estaba aturdida.

Laura estaba a punto de llorar.

-Eduardo, ¿por qué hiciste así? ¿No puedes ser más educado con papá? ¡Ya no me gustas! -

Después de decir esto, ella corrió para perseguir a Mateo.

-Papá, papá -

Sin embargo, Mateo cerró la puerta con fuerza como si no hubiera oído nada.

Laura se detuvo allí y miró a la puerta cerrada. Se dio la vuelta y miró ferozmente a Eduardo y Rosaría, y dijo -¡Os odio! -

Después de decir estas palabras, volvió corriendo a su habitación. Ella también cerró la puerta con fuerza como Mateo.

Las personas más atónitas aquí eran Eduardo y Rosaría.

Mateo nunca se enojó con sus hijos. ¿Qué pasó hoy?

Eduardo tocó a Rosaría con el dedo y preguntó en voz baja -¿Qué le pasó a Mateo? -

Rosaría sacudió la cabeza con una expresión confundida.

-Tampoco lo sé. De repente peleó con Víctor afuera como un niño. Después de que yo le impedí, él ya se convirtió así -

Rosaría sentía que Mateo estaba muy torpe hoy, y se negó a decir nada.

Al oír las palabras de su madre, Eduardo inclinó la cabeza y preguntó con el ceño fruncido -¿Acaso está celoso? -

-¿Por qué está celoso? -

Rosaría preguntó a su hijo con muchas dudas.

Eduardo sentía que su madre era realmente inocente.

-Mamá, tú y Mateo estuvisteis bastante íntimos antes. Aunque Mateo parece indiferente, es una persona bastante celosa. Ni siquiera puede soportar que me acueste contigo, ni habla de un extraño como Víctor -

-¿Qué tonterías? Ahora ya no tenía muchos contactos con Víctor, tu papá no se sentiría celoso -

-¡Tienes razón! -

Eduardo sintió que Rosaría tenía sentido.

-Ay, lo sé -

-¿Qué? -

Rosaría miró la expresión de Eduardo, no pudo evitar tener mucha curiosidad.

Eduardo sonrió y dijo -¡Mateo debe haber alcanzado el climaterio! -

-Mocoso, ¿de qué tonterías estás hablando? -

Rosaría golpeó a Eduardo en la frente directamente.

-Ay, mamá, me duele. Si no fuera por el climaterio, ¿por qué él estaría tan enojado sin ninguna razón? -

Eduardo sintió que su suposición era correcta.

Pero Rosaría suspiró y dijo -Vete, deja de decir tonterías. Tu papá todavía es muy joven. Además, le llamas "Mateo" todos los días, ¿no puedes llamarle "papá"? -

-Ya veo. De hecho, cuando las mujeres tienen esposo, ya quieren a sus hijos -

Eduardo suspiró, y sacudió la cabeza con decepción como un anciano, lo que hizo reír a Rosaría.

-Travieso -

Ella sonrió y acarició la cabeza de Eduardo. Ella todavía estaba un poco desconcertada. Hoy, la pelea entre Mateo y Víctor era muy sorprendente, y ella no sabía por qué.

En este momento, Mariano regresó de afuera, y se quedó atónito cuando vio a Rosaría.

-Señora Rosaría, hola -

-Hola, ¿compraste comida para Lidia? -

Rosaría sentía que Mariano era una persona muy buena.

Si Lidia pudiera estar con él, sería un buen resultado.

Mariano asintió.

Lidia salió de la habitación. Cuando vio a Rosaría, parecía que quería decirle algo.

-¿Qué pasa? ¿Quieres decirme algo? -

Cuando Lidia estaba a punto de decir algo, Mariano sonrió y dijo -Lidia me dijo que le gustan los mangos, así que compré algunos para usted. Señora Rosaría, por favor tómelos -

Solo entonces Rosaría descubrió que Mariano estaba sosteniendo algunos mangos en su mano.

-¡Qué cariñosa es Lidia! A diferencia de Mateo, que está de mal humor hoy, no se sabía por qué peleó en las calles -

Rosaría miró a Mariano, intentando encontrar algo de su cara.

Mariano ya era una persona muy lista después de trabajar por Mateo por mucho tiempo. Por eso, sabía que Rosaría estaba preguntando sobre la situación anormal de Mateo hoy, pero, él no se atrevió a decir nada sobre este asunto. Él sonrió apresuradamente y dijo -Tal vez el señor Mateo no esté de buen humor en estos días, no lo sé. Hoy salí con Lidia, no estuve en casa. ¿Qué pasó? -

Al oír las palabras de Mariano, Lidia estaba un poco aturdida. Pero, ella no dijo nada y se calló sobre lo que quería decir.

Cuando Rosaría se enteró de que había salido con Lidia, se sintió un poco feliz por ellos.

-¿Os habéis reconciliado? -

Ella dio un codazo a Lidia.

Lidia sonrió con vergüenza.

-No tuvimos ningún problema -

-¿No tuvisteis ningún problema? Te encerraste en la habitación estos días, Mariano estaba muy preocupado por ti. Lidia, ¡no hagas esto en el futuro! ¡Nos has asustado mucho! -

Rosaría tenía una expresión muy preocupada, lo que hizo que Lidia se sintiera culpable.

-Lo sé. Estaré bien, y tú también. No importa lo que pase, tienes que cuidarte a ti misma bien, ¿sabes? -

-¿Qué problemas puedo tener? No necesitas preocuparte por mí. Tú y Mariano tenéis que estar bien -

Rosaría no se lo tomó en serio, tiró de Eduardo y llevó los mangos para sentarse en el sofá.

-¿Quieres comerlo? ¡Puedo darte uno! -

Rosaría sostuvo un mango y lo balanceó frente a Eduardo.

Eduardo respondió con una expresión impotente -Mamá, sabes que no puedo comer esto -

-¡Je je! -

Rosaría pensaba que era bastante interesante burlarse de su hijo de vez en cuando.

Al ver esto, Mariano tiró de la mano de Lidia y los dos regresaron a la habitación de Lidia.

Al llegar a su habitación, Lidia apartó su mano y se sentó a un lado. Ella dijo en voz baja -¿Podemos ocultar este asunto? -

-Tal vez. El señor Mateo ya me ha dado instrucciones, también salí y me comuniqué con todas las prensas hace tiempo. Las noticias que son perjudiciales para la familia Nieto y la señora Rosaría no aparecerán en los medios de comunicación. No te preocupes -

Al oír las palabras de Mariano, Lidia por fin se sintió aliviada.

-¿Qué idea tiene Mateo? ¿Creo que Víctor había tomado esa foto, y por eso fue a pelear con él? -

-No lo sé, pero debería ser así -

Mariano dijo esto cuidadosamente, temiendo de tocar la memoria triste de Lidia.

Al verlo así, recordando lo que Mariano había hecho por ella en los últimos días, Lidia no pudo evitar morderse el labio inferior -¿De verdad no te importa lo que me pasó en el club? -

-Si digo que no me importa, definitivamente no lo creerías. A decir verdad Eres la mujer que me gusta. Por supuesto me siento muy incómodo cuando mi mujer sufrió la violencia -

Cuando Mariano dijo esto, Lidia apartó la cabeza apresuradamente, su rostro su puso un poco pálido.

Él dio un paso adelante e ignoró la lucha de Lidia. Él sostuvo sus manos directamente y se arrodilló sobre una rodilla, diciendo -No quiero ocultarte que me importa eso, pero eso no fue tu culpa. No te protegí bien. No tengo la habilidad, no debería haberte dejado sufrir esto. No te preocupes, no importa cuál sea el resultado de este asunto, te daré una explicación. Pero en cuanto a ti, definitivamente me casaré contigo en esta vida. No importa que me aceptes o no ahora, no me rendiré. Soy una persona muy terca, no tengo mucho interés en otras personas y las cosas, pero cuando quiero alguna persona, no voy a dejarlo ir. Si no me aceptas, te esperaré. Si quieres buscar a otros hombres, entonces los golpearé uno por uno. Sea como sea, no serás capaz de alejarte de mí por el resto de tu vida -

-¿Por qué eres tan terco? -

Cuando Lidia oyó sus palabras, no sabía que decir.

Se veía modesta, no esperaba que tuviera un aspecto tan pícaro.

Mariano sonrió y dijo -Mientras no me rinda, nadie más tendrá la oportunidad. Te acompañaré por tantos años como quieras -

Lidia estaba muy conmovida. Después de sufrir tal cosa, ella realmente pensaba que se había acabado. Ahora vio la sinceridad de Mariano, no pudo evitar sentirse un poco tocada.

-¿Crees que Mateo también tiene la misma idea? ¿No malentendió a Rosaría cuando vio esa foto? -

-¡No! El amor del señor Mateo por su esposa es más profundo que el mío hacia ti. Por eso, no lo va a creer -

Lidia negó con la cabeza y dijo -Si de veras no lo cree, ¿cómo puede perder los estribos con Rosaría? ¿Cómo podría perder la cabeza y peleó con Víctor? ¡Era Mateo! Él ha sido famoso por su crueldad e indiferencia, ahora hizo caso omiso de su imagen debido a una foto. Se podía ver lo furiosa que estaba en su corazón. Tengo miedo de que los dos tengan algún problema. Rosaría ha experimentado muchas dificultades para tener la vida pacífica actual -

Mirando la expresión preocupada de Lidia, Mariano dijo en voz baja -El señor Mateo lo resolverá. No te preocupes -

-Espero que pueda ser así -

Lidia todavía estaba preocupada.

Sin embargo, Rosaría no sabía que todos estaban preocupados por ella. Estaba divirtiéndose con Eduardo en la sala de estar.

Mateo pensó que Rosaría vendría a consolarlo. No esperaba que nadie lo buscara después de que él subió por tanto tiempo. Estaba tan enojado que ya no podía quedarse quieto. Abrió la puerta del dormitorio y vio a Rosaría y Eduardo divirtiéndose con alegría en la sala de estar. Él se enfureció al instante.

-¡Rosaría! -

-¿Qué? -

Rosaría se quedó estupefacta por el grito de Mateo. Cuando se dio la vuelta, vio que mateo estaba de pie en las escaleras en el segundo piso mirándola con una expresión sombría.

¿Cuándo lo provocó?

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