Pero… ¿¡Eres un Millonario!? romance Capítulo 249

El rostro de Anselmo era serio, bloqueando a Natalia: "¿De verdad has decidido enfrentarte a nosotros?"

"Señorita Torres, ¡no dejaré que este caso llegue a la corte!"

Natalia captó su advertencia, apretó los dedos y miró hacia atrás a Anselmo: "Tampoco dejaré que la causa de la muerte de mi abuela sea un misterio. O aceptas mis términos, o nos vemos en la corte".

Natalia sintió que ya no era necesario seguir hablando con él. Detrás de ella, la voz insatisfecha del Director se hizo presente: "Señorita Torres, no quiero complicar las cosas. Después de todo, Rosalía era una mujer muy respetada, puedo manejar a aquellas personas irresponsables, pero no voy a pedir disculpas. Si no estás dispuesta a aceptar mi propuesta, entonces tendré que lidiar contigo".

Anselmo observó a Natalia, no en vano era la niña que Rosalía había criado. A pesar de su pobreza actual, seguía siendo orgullosa.

Si no fuera porque estaba en contra de él, tampoco querría tener a Natalia como enemiga.

Natalia estaba algo indecisa, Anselmo no era fácil de manejar, ¡pero no podía dejar que su abuela Rosalía hubiese sufrido en vano!

"Nos vemos en la corte".

Eso significaba que no estaba dispuesta a aceptar el dinero.

Después de que Natalia se marchó, él rápidamente marcó un número: "Investiga bien el pasado de Natalia, cuanto más detallado, mejor".

Si ella no estaba dispuesta a llegar a un acuerdo, entonces él tendría que lidiar con ella.

Natalia dejó el lugar y tomó un taxi a casa.

Entró y la casa estaba vacía.

Graciela había regresado hacía días, Ricardo aún no había regresado, solo quedaba Natalia.

Se cambió a su pijama, no tenía hambre, así que se acurrucó en el sofá. La tele estaba encendida, mostrando un programa muy popular en ese momento.

No estaba de humor para verlo, se cubrió con una manta delgada, adormecida.

Ricardo terminó su trabajo y regresó a casa, abrió la puerta.

La escena ante sus ojos le resultó muy familiar, un programa de televisión se estaba transmitiendo, Natalia estaba enroscada en el sofá, durmiendo profundamente.

Le daba una sensación hogareña.

Ricardo caminó suavemente, con cuidado levantó a Natalia, pero para su sorpresa, ella estaba durmiendo ligeramente, abrió los ojos y lo abrazó por el cuello: "Has vuelto".

"¿Por qué estás durmiendo en el sofá, has comido?"

Ricardo comprendió más o menos, extendió la mano y acarició su rostro, su tono era cariñoso y suave: "¿Sancho te ha hecho enojar?"

Natalia no quería hablar de eso, se abrazó a su cintura, se recostó en su pecho y cerró los ojos: "Ricardo, solo te tengo a ti".

Su abuela había fallecido.

La familia Torres estaba en bancarrota.

Solo le quedaba él.

Ricardo la abrazó fuertemente por la cintura, su aliento rozando su frente: "Siempre voy a estar a tu lado."

Natalia sintió un escalofrío en su corazón, no podía imaginarse qué haría si Ricardo la abandonara... Ella lo abrazó fuertemente por la cintura, respondiendo en voz baja.

Después de que se durmió, Ricardo contactó a Nacho. Al enterarse de que Anselmo había estado buscando a Natalia, frunció el ceño.

"¿Anselmo?"

"Sí, él quiere que la señorita Torres retire los cargos."