¡SUÉLTAME, DIABLO! romance Capítulo 61

Los movimientos de José no fueron groseros. La besó y acarició suavemente su mejilla.

—Daniela, no digas nada.

En ese momento, José la consoló con un beso ardiente en su ojera.

Y el cuerpo de Daniela temblaba como si se hubiera electrocutado.

Ella entró en pánico y se agarró del pelo de José. Su cuerpo se tensó y ella abrió los ojos confusos y vio el aspecto de si misma en los ojos del hombre. Ella perdió su conciencia y lo que quedaba en su cabeza era la desesperación.

José levantó la vista, vio a su expresión impotente y se rio, se levantó y abrazó su cuerpo ya sin fuerza.

Tiernamente, la besó él en los labios.

—Di que me quieres.

—Señor González...

—¿No lo dijiste muchas veces anoche? Ahora estás sobria, ¿es tan difícil volver a decirlo?

Daniela se quedó en silencio durante un momento, no sabía por qué le gustaba escuchar estas palabras falsas. Sin embargo, ella no tenía opción.

José sonrió y la besó profundamente.

En el baño, hacía mucho calor.

Todo el cuerpo de Daniela estaba sumergido en el agua caliente, su largo pelo negro flotaba en la superficie del agua. Sus ojos cerrados y sus labios fruncidos mostraron sus sentimientos complicados.

José ya no estaba aquí.

Sin embargo, ella todavía podía sentir la presencia de José.

En ese momento, una voz sonó, haciendo que Daniela, que estaba perdido en sus pensamientos, se estremeciera.

En el siguiente instante, José entró en el baño y tiró de su brazo y sacó todo su cuerpo del agua. Mirando su cara de nerviosismo, frunció el ceño:

—¿Qué estás haciendo?

—Estoy tomando un baño...

Daniela no se atrevió a mirar los ojos de José.

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