Te Quiero Como Eres romance Capítulo 288

Solo media hora después de que empezara el examen, Micaela se levantó y fue a recoger sus cosas. Se despidió de la examinadora y salió.

—¿Has visto? ¡Así es una estudiante sobresaliente! ¡Los periodistas aún no han llegado! —Alba dijo orgullosamente.

Apenas Micaela, Alba y Eric subían al coche, los periodistas afluyeron a la sala de examen con equipos.

El coche se fue hacia el hotel.

—Querida, ¿has terminado todas las preguntas? No tenemos prisa. Ni te preocupes, aunque llegan los periodistas. El sr. Sarmiento ha mandado 6 guardias para protegerte… —Eric preguntó con incredulidad.

Pues los vestidos de paisano ordenados por Carlos serían más…

—Eric, ella siempre es así. ¡Ahora solo necesitas esperar el resultado del examen! —Alba se rio halagada como si fuera ella quien se presentó al examen.

Micaela pensó que no había llamado tanta la atención puesto que no había tenido contacto con los periodistas. Sin embargo, ¡sus noticias todavía llenaron las grandes portadas de manera muy rápida!

—Micaela realmente es una estudiante excelente. ¡Termina el examen teórico de modelo AFIA en media hora!

—¡La primera que termina el examen en media hora!

—¡Vaya estudiante excelente! ¡Micaela es la primera que ha batido el récord!

…

Después de una hora, la examinadora ya se hizo popular.

—Es verdad, ¡Micaela es muy bonita y tiene un temperamento especialmente bueno! Lo más importante es que ella es muy inteligente. Una vez que encendieron el ordenador, ella empezó a contestar las preguntas muy rápido. ¡Y terminó todas en solo una media hora! Es realmente impresionante... —emocionada, la examinadora habló frente a las cámaras.

En el hotel, mirando las noticias, Eric se preocupó.

—Si no aprobaras el examen, sería una gran vergüenza. Micaela, te has precipitado demasiado. Deberías esperar hasta que acabara el tiempo…

Micaela y Alba se miraron con entendimiento tácito.

La empresa les ofrecía a cada una la mejor habitación.

Después de la cena, Micaela entró con Alba en su habitación. Y la maquilladora Candy se había ido a cenar con sus amigos de Rioslaider.

El móvil de Micaela sonó. Le enviaron un mensaje avisando que se presentara al segundo examen mañana.

—¡Vaya! ¡Micaela! —cuando Micaela quería reenviar el mensaje a Eric, de repente Alba saltó del sofá y exclamó.

Asustada, Micaela se apresuró a ver la noticia. Y Alba le dio el Ipad.

—¡Han publicado las notas del examen en internet! ¡Has obtenido las mejores notas! ¡La nota máxima! —Alba la aclamó.

Era normal que habían publicado las notas tan pronto porque se realizaban y corregían los exámenes a través del ordenador. Micaela ya supo que había contestado todas las preguntas correctamente cuando remitió el examen. Pero le sorprendió que publicaran las notas tan rápido.

Alguien llamó a la puerta.

Sin duda alguna, era Eric.

Al abrir la puerta, Eric se le arrojó excitadamente a Micaela. Ella lo esquivó y él casi se cayó.

—Querida, eres realmente muy sobresaliente. ¡Te admiro totalmente! Has remitido tu examen en media hora y todavía puedes lograr la nota máxima. ¡Increíble! ¡Me haces conocer de nuevo qué significa una estudiante excelente! —Eric se volvió y la miró muy emocionado.

—¿Antes también publicaban las notas por Internet? —Micaela sonrío con modestia.

De repente a ella se le ocurrió Carlos. ¿Él sabía eso?

Aunque solo estaba un día sin él, ella le echaba de menos mucho...

En este momento sonó una videollamada del móvil de Micaela. Alba le tiró un vistazo. Era Carlos. Entonces, ella se fue con Eric y cerró la puerta.

Micaela contestó la llamada y apareció la cara de Carlos en la pantalla.

—Chiquita, enhorabuenas —se oyó la voz atractiva de Carlos.

Al pensar en las palabras que le había dicho al oído esta mañana, Micaela se enrojeció.

—Has ordenado que publiquen las notas en Internet? —después de un rato, ella dijo.

—Qué inteligente eres —él sonrió.

—¿Por qué quieres llamar la atención? Si mañana yo no aprobara el examen, ¿qué pasaría? ¿Sabes?, una juez del examen de mañana se llama Adriana, a la que no le gusto. ¡Qué mala suerte! No me tratará bien —sabiendo que Carlos había mandado publicar las notas, ella se quejó a propósito.

—Bueno, entonces déjala —él la contestó ligeramente como si no le importara nada.

—No quiero que mis fans se decepcionen por mí —ella se fijó en él.

—No van a decepcionarse.

—¿Cómo lo sabes?...

Micaela notó el entorno de Carlos. Parecía que estaba en un ascensor. No era el del Barrio Fanslaño, pero a ella le parecía familiar…