EDWIN
Llegamos a un gimnasio deportivo olímpico, estacionó el carro, a pago el motor y bajo el carro lo más rápido posible, lo rodeo le abro la puerta.
Nikki - gracias, vamos
Mientras más avanzamos puedo ver bien este lugar y puedo leer un letrero incluso puedo ver algunas personas y chicas están saliendo con unos trajes de baño con su short como la Nikki, hay algo raro no están mojadas, huelen a sudor, hasta que una chica saluda a Nikki
(Sofía la hermana de Mateo, ella entrena gimnasia igual que yo, ella es de mí misma estatura, clara de color, rubia como sus hermanos, color de ojos verdes.)
Sofía - hola Nikki - ellas se ha sombra al verla, pero esta chica no es humana sino loba, pero su olor se me hace familiar.
Nikki - hola Sofía, tú también venciste con él? - me pregunto de quién están hablando.
Sofía - no ya estabas retirada desde la muerte de tu madre - Nikki al recordar la muerte de su madre cambia su cara a tristeza, pasó mi mano por su espalda.
Nikki - sí, pero mi padre me obligó, por una cosa que pasó después te contaré.
Sofía - Nikki quién este chico no me lo presentas?
Nikki - él es…. (la interrumpí)
Edwin - hola soy Edwin, pero dime Alpha - Nikki se ha sombra.
Sofía - perdón Alpha -- me hace una reverencia.
Nikki - espera tu como lo sabes Edwin
Edwin - la chica es una mujer lobo, pero su olor me resulta peculiar
Nikki - porque es hermana de Mateo, pero dime Sofía que haces en este gimnasio?
Sofía - vamos adentro platicamos, un gusto en conocerlo Alpha.
Edwin - es pero que no seas como tu hermano.
Nikki - no te preocupes Edwin ella es muy diferente a él.
Sigo a las chicas hasta entrar a al lugar, ya estando dentro vaya sorpresa que me llevo, parece un gimnasio, pero sin los aparatos para hacer ejercicio
Nunca había visto este lugar y he pasado un momento de veces, con la mirada recorro el lugar, en lo alto veo a unas personas sentados observando algunas chicas.
Nikki - espérame adentro Sofía.
Sofía - sí, date prisa quiero contarte algo - Nikki asiste con la cabeza y la chica se va
Nikki - era gimnasta hace muchos años, pero por un problema que metí el juez no metió a la cárcel a cambio de estará en un centro deportivo
Edwin - que tantos secretos guardas Nikki
Nikki - algunos, pero todavía no estoy lista para contártelos, anda a sentarte, haya dónde están todos los padres de familia.
Ella me señaló con el dedo el lugar, yo solo asistió con la cabeza, me disponía a ir cuando me llega un olor peculiar que ya se me hacía conocido , con la mirada busco hasta que mi vista se detiene en la puerta veo al estúpido de Mateo, él también se detiene al verme los dos gruñimos al mismo tiempo, en puño las manos estoy listo para pelear, cuando siento una mano en mi brazo, volteo a ver es Nikki, me tranquilizó un poco.
Edwin - hay una cosa que no saco de mi cabeza.
Nikki - que cosa
Edwin - cuando recién llegaste Judith te dijo algo como que tele hacías familiar a una persona, si sabes a que se refiere?
Nikki - sí, hace muchos años antes de que mi madre muriera todo el mundo conocía a Nikki Balvanera la mejor gimnasta del mundo, pero no sé lo digas a nadie
Edwin - está bien, pero se lo debes contar algún día
Nikki - sí, pero quiero que sea sorpresa
Edwin - está bien.
Llegamos a la casa de Nikki, el carro de su padre estaba en casa, al escuchar que llegamos abre la puerta.
Joseph - buenos noches Alpha
Edwin - buenas noches Joseph, le quería pedir permiso para que deje ir mañana a una fiesta a Nikki que será en mi casa
Joseph – Claro que si - Nikki se sacó de onda
Edwin - ok, pasó por ti Nikki a las 8, buenas noches Joseph, Nikki - los dos se despidieron, me subo a mi auto manejo hasta mi casa.
Comentarios
Los comentarios de los lectores sobre la novela: Una mate para el Alpha