Vendiendo mi virginidad... AL CEO romance Capítulo 8

PDV Saint

­­—Llevame a mi casa —le digo al chofer, mientras me

subo en el auto.

—Si señor, ¿Disfruto su estadia en el club? —me

pregunto el chofer.

—Para nada, tuve una gran decepcion —le digo al

chofer, mientras este pone en marcha el auto.

—¿Una decepcion? ¿Y eso por que?

—Una chica que se hizo la dificil.

—Ya veo.

—Esta noche le compre la virginidad a una mujer, pero

termino por dejarme plantado.

—Ya veo, es una pena.

—Quiero que llames a los encargados del club, quiero

que averiguas toda la informacion que puedas sobre la chica que me dejo

plantado el dia de hoy.

—Como usted diga señor.

—Hazme un informe y me lo pasas despues, esto no se

queda asi.

Pocas habian sido las mujeres que lo habian rechazado,

era guapo y rico, por lo que las mujeres lo perseguian, pero el dia de hoy

habia sufrido algo que nunca habia sufrido antes, habia sido plantado.

No solo habia sido plantado por una mujer, sino que

ademas de eso habia sido plantado por una mujer a la cual le pago por

acompañarlo, eso fue mas de lo que puso soportar normalmente.

No le gustaba ser despreciado, y menos de esta forma,

por lo que tenia planeado una venganza en su contra.

—No fuiste mia a pesar de que pague por ti… como no

quisiste mi dinero, entonces te hare mia… gratis —murmuro mientras veo la vida

nocturna de la ciudad a traves de la ventana.

PDV Teresa

Cuando senti la primera embestida, senti un agudo

dolor en mi trasero, quise gritar, pero me contuve al colocar mi boca contra la

almohada.

Antes de que lograra recuperarme de la primera

embestida, vino otra, y despues de esa otra, y antes de que me diera cuenta ya

habia recibido numerosas embestidas alli abajo por parte de ese hombre.

No esperaba tener mi primera vez por alli.

Él habia usado un lubricante de la habitacion, los del

club tenian por lo general todo preparado para noches como esta, pero a pesar

de lubricante, aun me dolio, la sensacion era dificil de describir, pero se

podia decir que era “abrasadora”.

Quise decirle que parara, pero el uso una de sus manos

y me tomo por la parte posterior de mi cabeza y acto seguido estampo mi cara

contra almohada, ahogando mi voz.

No podia describir muy bien lo que sentia, no estaba acostumbrada

a eso, me habia “autocomplacido” a mi misma antes, pero solo por delante, nunca

por atrás, por lo que mi trasero no estaba acostumbrado a todo eso que sentia.

Finalmente llego un momento en que se detuvo, podia

sentir la mitad de su miembro aun dentro de mi, la otra mitad estaba fuera,

tuve por fin un momento de descanso, pero no duro mucho.

El hombre a continuacion, me tomo con sus brazos, él

se habia sentado en la cama con las piernas abiertas, y usando sus brazos me

levanto y me sento encima de él, no sabia que queria hacer.

—¿Quizas quiera hacerlo por delante? —penso en un

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