¡Vuelve conmigo,mi cariño! romance Capítulo 158

El contenido era un intercambio de mensajes de texto entre Yaiza y Cynthia.

Y las fotos que Yaiza le envió a Cynthia.

El primer mensaje se envió cuando fue la pasarela de Diseños LEO, el contenido era: «¿Quieres saber quién fue el hombre de la noche de hace seis años?».

A Alain le temblaba levemente la mano, recordó que en ese momento se fue al segundo piso a llorar sola, ¿fue porque recibió ese mensaje de texto?

El segundo se envió por la noche.

Probablemente cuando fue a recogerla. Recordó que Cynthia había recibido un mensaje de texto mientras estaba sentada en el auto, tenía mala cara y le mintió diciéndole que Chloe le había enviado el mensaje.

Deslizó más hacia bajo.

«Vendiste tu cuerpo por dinero y te quedaste embarazada accidentalmente, no quieres saber quién es el padre de tu hijo, ¿verdad?».

«¿Quién eres? ¿Qué propósito tienes? ¿Por qué sabes de esto?».

«Soy uno de los involucrados».

«Cuando quieras verme, no dudes en contactarme. Oí hablar de que tu tienda hizo su apertura hoy, felicitaciones».

«Tus hijos son muy lindos, se parecen a ti y a su padre».

Después de leer los mensajes de texto, supo por qué Cynthia se fue repentinamente con una excusa.

Suposo que podría haber adivinado que era una trampa, pero se dejó engañar.

La otra parte la conocía bien y sabía que ella daba mucha importancia a los dos niños.

Entonces, cuando la otra parte mencionó a los dos niños, se puso nerviosa.

Sus manos no paraban de temblar.

Mauricio no se atrevió a hablar, se hizo a un lado para hacer una llamada.

—Agrega más personal para expandir el rango de búsqueda y encontrar la furgoneta lo más rápido posible.

—Sí.

Después de la respuesta del otro lado, Mauricio colgó y miró a Alain.

El cielo se estaba volviendo más luminoso, las luces de neón ya no brillaban, dejando que los callejones se envolvieran de una atmósfera sombría. Se acercó hacia Alain.

—¿Quieres volver primero? Ya envié personal adicional para que vayan a buscar. No has vuelto en toda la noche, me temo que tu familia se preocupará por ti.

A Mauricio le costaba decir que volviera a casa porque ya habían pasado toda la noche buscando, así que solo pudo decirlo con algo de rodeo:

—Los dos niños también están en casa, no han visto a su madre en toda la noche, ¿estarán preguntando por ella?

Pensando en Alessia y Álex, Alain inclinó la cintura, sintió que le faltaba aliento porque había un peso encima de su cuerpo que le impedía respirar.

Mauricio estaba preocupado.

—Alain…

Alain levantó la mano para indicarle que no siguiera, no levantó la cabeza, pero dijo con su voz baja y profunda:

—Lamento molestarte.

—No es ninguna molestia, somos amigos, haré todo lo posible para encontrar su paradero lo antes posible.

Alain bloqueó la pantalla del teléfono, lo guardó en el bolsillo y entró en el coche.

Álex era delicado y sensible, seguro que se preocuparía porque Cynthia no regresó en toda la noche, por lo que primero tenía que volver y arreglar a los dos niños.

En ese momento, la carretera todavía estaba muy tranquila y la tienda de desayunos al lado de la calle acababa de abrir las puertas.

El rocío de la mañana era fino y tenue con un toque de frescor.

Cuando el automóvil estaba a punto de llegar a la villa, cambió de sentido para dirigirse al hotel a darse una ducha, luego se puso ropa limpia para lucir animado antes de regresar a la villa.

Cuando el coche estaba aparcado en la villa, miró la hora, eran las 4:30 de la mañana.

Ahora deberían estar durmiendo todos. Caminó hacia el patio con ligereza y abrió la puerta alta y ancha.

La casa estaba muy silenciosa con una luz tenue, cuando entró y estaba a punto de empujar la puerta de la habitación para ver a los dos niños, se encontró con una pequeña figura tendida en el sofá.

Se acercó y descubrió que era Álex sin nada cubriendo su cuerpo, ese pequeño cuerpo estaba acurrucado en el sofá.

Se inclinó y trató de levantarlo, pero tan pronto como lo tocó, se despertó.

—¿Dónde está mi mamá?

La primera frase que dijo Álex al despertarse fue preguntarle por Cynthia.

Sus ojos aún no se habían abierto, su voz era suave y ronca.

Alain tragó saliva con nerviosismo.

—...Ella tomó un pedido de diseño urgente. Como la clienta lo quería con prisa, trabajó horas extras en la tienda. Me quedé con ella toda la noche, ahora se quedó dormida en la tienda y me ha dicho que volviera para veros.

Álex se frotó los ojos.

—¿De verdad?

—Claro.

Alain lo tomó en brazos.

—Te llevaré a la habitación a dormir.

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