¡Vuelve conmigo,mi cariño! romance Capítulo 210

La cara de Alejandro no cambió mucho, pero en sus ojos se veía aún menos esperanza.

Él se casó con Fernanda sin ningún sentimiento, se habían estado respetando durante más de un año desde su matrimonio, nunca pasó el límite del otro.

Hasta el día de la boda habían dormido separados, ella decía que tenía miedo.

¿Cómo no podría saber Alejandro que ella estaba enamorada de otro y no quería dormir con él?

A él tampoco le gustaba, pero tenía que decir que ella era una buena mujer, era amable y dulce, él sentía algo por ella, pero este sentimiento lo escondía en su corazón.

Porque él sabía que había alguien en el corazón de esa mujer, ella parecía gentil, pero en realidad era muy fuerte y terco, podría aguantar su límite por su amor.

¿Eso no era muy conmovedor?

Era ridículo que él nunca la obligó a hacer nada.

Eran la envidia de los demás, porque pensaban que hacían una buena pareja, los dos tenían una familia grande, eran guapos y listos y estaban muy enamorados.

Pero nadie sabía que este «enamoramiento» era falso.

Él sabía lo que hizo su esposa, lo invitó tan repente, entonces la que estaba esperando en la habitación probablemente no sería ella…

Pero él volvió igualmente.

Aunque sabía que no era su esposa, abrió la puerta.

Carmen lo escuchó, apretó más la sábana, estaba temblando todo el cuerpo.

Alejandro miró la cama desde la puerta, había una persona temblando debajo de la sábana.

Él no sabía si era feliz o triste.

En esta época de monogamia, la sensibilidad de las mujeres, las sospechas de las mujeres y la manía de las mujeres de que solo permitía a sus maridos hacer el amor con ellas eran muy normales.

Pero en lugar de su esposa, ella era diferente a todas, estaba dispuesta a ofrecerle a todas las mujeres.

Él entró y cerró la puerta.

Carmen, que se escondía debajo de la sábana cuando oyó el ruido de cierre, tembló otra vez.

Ella agarró la sábana con fuerza, tenía miedo de que él viniera.

Alejandro se quedó al lado de la cama mirando, sabía que no era Fernanda, la llamó aposta:

—Fernanda.

Carmen no pudo evitar que cayesen las lágrimas, estaba gritando desde el corazón que ella no era Fernanda, no era su esposa, ¡ella era Carmen!

Pero no podía.

Le había prometido a Fernanda, pero ahora se arrepintió, sabiendo lo impulsiva que era su decisión, aunque había salvado a su hermano y a la familia Carpio, ella misma estaba destruida.

Alejandro podía notar que la mujer tenía mucho miedo, pero él no quería irse de esta manera, hoy, le daba igual si la mujer fuera fea o guapa, tonta o lista, iba a hacerlo con ella sí o sí.

Desabrochó los botones de su traje, uno por uno, su acción era lenta y rítmica, habló en voz baja:

—Ya que estás de acuerdo con ella, ¿por qué te ofendes tanto?

Carmen se quedó muy confundida, ¿Qué quería decir?

¿Sabía que no era su esposa quien estaba dentro de la sábana?

—Si tú has aceptado sus ventajas y sus peticiones, no te sientas agraviada, todo lo has hecho voluntariamente.

Ella se sentía agraviada, ¿y él no?

De repente, Carmen quitó la sábana.

—Tú…

Aún no había empezado a preguntar, estaba abrumado, volvió a caerse de la cama, no le dio tiempo ni para reaccionar, le quitó la ropa violentamente.

Carmen estaba intentando escapar.

—No soy tu esposa, no soy…

El hombre no quería escuchar estas cosas en absoluto, presionó su cabeza, no la miró ni quería escuchar su voz, le tapó la cara con la sábana.

—De esta manera no vamos a sufrir tanto por esta humillación.

Esa noche, Carmen estaba llorando hasta que su voz se había ido.

Cuando ella estaba saliendo con Santino, nunca habían hecho el amor, Santino muchas veces dijo que quería hacer algo con ella, pero ella siempre solo le dio un beso y le dijo que solo lo podrían hacer en el día de la boda.

Pero, hoy, ella lo había hecho con un hombre que solo lo había visto desde una foto, ni siquiera sabía su verdadera cara.

El cielo empezó a iluminar, el hombre estaba de pie vistiéndose, de espaldas a la mujer de la cama.

—Ahora ya le puedes rendir el resultado, y yo también.

Fernanda hizo eso porque se sentía culpable, por eso estaba buscando mujeres por todos lados.

Si ella quería estar más tranquila, él la cumplirá.

Para que estuviera tranquila.