¡Vuelve conmigo,mi cariño! romance Capítulo 741

Esta habitación estaba al lado de la habitación donde Estefania quería calumniar a Alain.

Mauricio no cerró bien la puerta cuando salió a observar si había venido Estefania, por la que ella la empujó directamente.

Estaba serena. Ni tenía ninguna expresión.

Entendía clara que Cristián la traicionó. Le había dicho todo su plan a Alain.

Tal vez aquí hubiera una gran trampa que la esperaba.

Henry colocó el móvil. Quería llamar a Estefania para informarle de que ya había emborrachado a Alain y preguntarle en qué momento llevaría mujer aquí cuando ella entró de repente.

La miró sorprendente, —¿Cómo llegas aquí?

Estefania rió, —Henry, ¿todavía no quiere confesar tu acción?

Mauricio se volvió a mirar a Henry preguntándole qué fue eso con la mirada.

A pesar de la expresión pálida de Henry, Estefania se dirijo a alain, —¿No te has dado cuenta de que todo lo que te ha dicho es mentira? La verdad es que he colaborado con él para engañarte. Ya lo comprendes todo ahora, que se ocupa de reteneros, mientras que yo fui al hospital a fin de visitar a Cynthia.

—Qué hiciste? —Alain le echó una mirada cruel.

—Como el plan, él te contuvo, y yo, naturalmente, fui a hacer lo que no esperas. Pero me arrepiento. Si lo hago, ¿cuándo terminará la venganza? He decidido no vengarme —ella dio una ojeada a Henry, se volvió riendo y agitó la mano, —¿Cómo te sientes cuando te traiciona el hombre en el que más confías?

Alain no le creyó completamente.

Henry también no se apresuró a explicarse, porque en este momento, lo entendió todo.

Había enterado de su plan a Alain, y ella lo sabía todo incluso había una trampa aquí, por eso no vino con la mujer con la que iba a difamar a Alain. Para hacer todo razonable, inventó la mentira para provocar disensiones entre Alain y él.

¿Se informó de eso cuando llamé a Alain? —pensó Henry.

—Nuestra colaboración ha terminado. Adiós. —Estefania rio, levanta la mano agitando y se fue.

—¿De verdad os cooperáis? —Mauricio le preguntó.

Henry dio una mirada a Mauricio y dijo a Alain, —No le prometí.

Alain no le culpó pero lo miró fríamente, —Eres perjudicado por una mujer. ¡Qué vergüenza!

Obviamente, Estefania había advertido su intención. Pensó que Henry estaba seguro que ella le confiaba sin falta, por lo tanto hizo esta trampa.

Nunca había pensado que Henry fue manipulado.

Incluso fue manipulado por una mujer. No era solo una vez, sino dos veces. Alain quería investigar su cociente intelectual.

—Lo siento.

Henry también no había pensado que Estefania no le creía. Se descuidó.

—Os encargáis aquí. Me voy —Alain se preocupaba de Cynthia. Quería a regresar a verla.

No podía creer las palabras de Estefania.

Mauricio le contestó, —De acuerdo. Nos encargamos.

Hasta este momento, ya lo entendía todo.

Fue que Henry pensó que había engañado a Estefania, por el contrario, ella lo aprovechó.

Mauricio le dio una palmadita en el hombro en señal de consuelo.

Ella se reflexionó y le respondió riendo, —Solo quiero reírme de ti.

—¡Estefania!

Henry se quedó furioso.

Oyó su voz enojada, rio otra vez, —Adiós, Henry.

Colgó el teléfono, apagó el móvil y entró en la puerta de embarque sin pensar.

Adiós a Henry. Adiós a todo.

Era hora de terminar todo esto. Como lo que había dicho Henry, Estefania debía vivir su propia vida.

Así que dejó todo, incluido Henry.

Henry volvió a llamarla inmediatamente, sin embargo, solo oyó una voz femenina, —Lo siento, el usuario al que llama apaga el móvil. Por favor, llame más tarde. Sorry...

Colgó el teléfono. ¿Esta apagó el móvil? —pensó.

Tuvo que ir a buscarla.

—Te encargas. Me voy —Henry salió corriendo.

Mauricio se detuvo dos segundos. Ufff, tuvo que hacer todo solo.

En el hospital.

Alain regresó al hospital y vio un ramo de flores en la mesilla. Frunció el ceño, —¿Por qué hay flores?