Amante peligroso romance Capítulo 41

Las orejas de Denis se calentaron al instante. ¡Qué Claro! El respiro de esa persona fue tan cercano a su óido que no podía ignorarlo.

-Señor, suelte ahora mismo.- ella dijo.

Lo que no esperaba era que en vez de soltarse, el hombre se comportó frívolo intencionadamente. Chupó su aurícula y le dijo ambiguamente-No hay problema.-

El hombre soltó su mano, pero siguió chupando su aurícula con frivolidad.

Denis estaba atónito. Nunca había encontrado a una personar que era tan difícil para tratar.

Fue cierto que soltara su mano.

Pero ... sus labios todavía quedaron en la oreja de Denis.

Y esta voz fue demasiada ajena.

Denis se sintió aún más extraño... Estaba segura de que no conocía a este hombre.

Recordé lo que Renzo le había dicho en la puerta de la habitación, aunque estaba muy descontento, todavía lo aguantó.

Inclinó la cabeza con cautela, intentó mirar a la persona frente a ella por el rabillo del ojo.

En ese momento, ese hombre retrocedió un poco, -Si quieres mirarme, hazlo abiertamente.-

¡Oh!

La cara de Denis se puso rojo ... Porque ella miró hurtadillas a los demás y esa persona lo reveló cara a cara.

Aunque estaba avergonzada, vio la apariencia de esta persona, la cual le dio una sorpresa por un momento. Pero en el siguiente segundo, Denis se calmaron.

Las pupilas marrones de los ojos de Venancio brillaron con interés, y todavía quedó un poco sangre por la excitación excesiva cuando cazaba.

Apareció una sonrisa en su cara, cualquiera que lo conociera sabría que estaba muy interesado en este momento.

Cuántas personas han visto su apariencia, tendría una impresión inolvidable seguramente. Sin importar un hombre o una mujer, siempre estaba fascinado por su rostro hermoso... Pensó en esto, un disgusto imperceptible apareció en la cara de Venancio. ¡Era probable que no hubiera una persona en este mundo que odiara su rostro fascinante más que él mismo!

Denis levantó la mano y limpió lentamente las orejas para borrar el sentimiento de toque. No le gustaba el toque de los demás.

Los ojos de Venancio se entrecerraron y creyó que esta mujer era muy interesante.

Ella estaba en contradicción.

Hasta ahora, nunca había visto a una mujer más humilde que ella. Pero ella no supo que se comportara más humilde, la expondrían las pequeñas acciones accidentales.

Esta era una mujer a quien no era fácil someter, pero también una buena presa ... interesante.

-¿Beber?- preguntó Venancio.

Denis ni siquiera lo pensó, -Señor, no sé por qué me llamó, pero creo que debo decirle que excepto de beber, puedo hacer cualquier cosa.-

-¿Sí ? ¿Cualquier cosa?-

Venancio se rió -Vale, quiero que te quedes conmigo esta noche.-

Al terminar de hablar Venancio, la expresión de Denis fue muy asombrosa.

Todavía había un zumbido en su mente, y miró al hombre con la cara coqueta frente a ella tontamente ... Nunca había pensado que hubiera un hombre que se interesaría por ella.

Esta mujer se comportó tonto y poco interesante desde que entró en la habitación. Ahora tuvo una expresión complejo y los ojos sorprendidos e incrédulos. Venancio estaba de buen humor, sacó un cheque de su bolsillo y un bolígrafo. Escribió rápidamente una serie de números y firmó su nombre. Tomando el cheque con sus dedos delgados, y lo entregó a Denis.

-Tómalo, tengo que irme hoy. Vendré a ti la próxima vez.-

Denis no recibió el cheque. Dio un vistazo al número del cheque ... ¡Cien mil!

Ella no hizo nada, desde que entró hasta ahora. ¿Solo pasó un cuarto de hora, esta persona la dio cien mil?

Denis levantó la cabeza en el acto y miró a ese hombre, pensando de un lado a otro... ¿Lo que acaba de decir ese hombre fue cierto, no la bromeó intencionalmente?

Acaso ese hombre quería...

-No lo pienses mal. Tengo una cita esta noche, no pasaré la noche contigo.-

Denis soltó un suspiro de alivio-No necesito tanto.- Se refería a la gran cantidad del cheque de Venancio.

Se rió levemente, dijo con una voz magnética-Esto es lo que te mereces, me haces sentir feliz. Crees que este es demasiado, pero considero que es insuficiente para comprarme un buen humor".

...

-Tómalo. ¿No te enseña tu jefe que debes escuchar al cliente y satisfacer sus necesidades?- Venancio sonrió, tomando la mano de Denis y le metió el cheque en su mano.

La mano de Denis se calentó y obtuvo el dinero de forma inexplicable. Quería negarlo, pero de repente pensó que todavía le debía a Joaquín seiscientos mil euros. ¿ Dinero no era lo que más le faltaba en este momento?

Su palma todavía estaba caliente, agarrando el cheque, como si agarrara una estufa. Estaba muy caliente, pero su cara palideció gradualmente.

En el pasado, adquirió la propina de los clientes con humildad, pero ella lo mereció.

En cuanto a los sesenta mil euros de Julián, podía considerarlo que ella era similar a la mujer que amaba Julián. Por eso, cuando Julián viera a Denis, pensaría en esa mujer. Solo amaba a ella y también atendía a Denis.

Pero este hombre que apareció de repente ... ella no hizo nada, ¿No?

Venancio medía 187 centímetros. Cuando estaba frente a Denis, una cabeza y media más alto que ella. Bajó los ojos con una sonrisa en los labios, admirando la expresión mínima de la mujer frente a él. Parecía que a través de estos cambios sutiles de expresión, podía ver la lucha de la mente de Denis.

Para él, disfrutaba mucho de esta escena.

Con solo cien mil, podía contemplar una lucha interior tan extraordinario. Este fue el negocio más rentable que había hecho desde que llegó a China.

El rostro de Denis se volvió cada vez más pálido, sus ojos mostraron la lucha en su mente. Por un lado, pensó que este dinero podría causar problema, pero por otro lado, lo necesitaba urgentemente.

De repente, Denis levantó lentamente la cabeza. Desde su vista, solo podía ver la barbilla guapa de Venancio y la sonrisa de sus labios. Ella preguntó-Señor, ¿necesita que haga algo por usted?-

Los ojos de Venancio brillaron con sorpresa ... pensó que subestimó a esta mujer otra vez. Ella siempre fue capaz de sorprenderlo una y otra vez, y refrescar la impresión sobre ella.

Mujer indefensa, mujer humilde ... ¡Venancio era tan orgullosa que debía conocer de nuevo a esa mujer!

No cavía duda que ella necesitaba dinero. Según la conversación entre ella y otra mujer en el hospital, no fue difícil para saber, la mujer frente a él necesitaba una gran suma de dinero urgentemente.

De lo contrario, ¿Cómo pudo soportar toda la humillación y hizo las cosas que casi todas las mujeres no las harían para siempre?

¿Acaso habían algunas personas que fueran humildes desde nacimiento?

Kane se rió entre sí.

Entonces, él le dio dinero a esa mujer. Por supuesto, no para simpatizar con ella, solo para ver su expresión de lucha y la apreció como deseaba. Sin embargo, él acertó con el comienzo, no pronosticó el final. Ella quería dinero, pero no lo adiquiriría por nada. Esta era su principio.

¡Cazar!

¡Conquistar!

Estas dos palabras aparecieron claramente en la mente de Venancio. Su dedo índice delgado se levantó y lo puso en sus labios finos, mirando a Denis, -Bésame.-

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