Con un sonido del ascensor, la puerta del ascensor se abrió. Abrazando a Denis por la cintura, Joaquín salió muy rápidamente y llegó a su dormitorio. La puso en la cama grande y fue a quitarse la ropa mojada de ella.
Desató su ropa por potones uno tras otro con sus dedos delgados . La primera capa, la chaqueta; La segunda capa, la blusa; La tercera...El hombre frunció las cejas, ¿esta mujer se ponía tanta ropa por lo general en el tiempo caluroso?
Cuando su dedo índice tocó la ropa interior de manga larga de la tercera capa, no entendió mucho quién podía ponerse una ropa interior de manga larga de algodón que se ponía en el otoño bajo estas capas de ropa en el tiempo caluroso.
Pero, no podía dejarla dormir con ropa mojada.
Aceleró Joaquín el movimiento para quitarse la ropa mojada de ella. Desartó la última capa protectora de ella sin la menor vacilación con los ojos en el corpiño de estilo viejo y conservador. Al final, aparecía el pecho de ella que le hizo a él no saber qué hacer en este momento.
Muy pronto, dio la vuelta y encontró una camisa blanca del armario para ponérsela.
Todos los movimientos se hicieron muy rápidamente y naturalmente sin una pausa. Cambió la ropa con tanta precipitación que no prestó atención a la cicatriz escondida en la cintura de atrás de ella.
Después de ponérsela la camisa a ella, en el momento en que Joaquín fue a quitarsela los pantalones mojados, la persona en la cama pateó con los pies inesperadamente como que se austó terriblemente.
Levantó Joaquín la cabeza para ver a la persona quien todavía dormir con los ojos cerrados. Solo que la cara que era blanca ahora muestraba la espresión del miedo durante el sueño como que estaba molesta por algo.
Cuando movió Joaquín un poco la mano, Denis estaba tranquila. Volvió a poner la mano en el cinturón de ella con duda, como se esperaba, la cara de ella volvió a aparecer el miedo.
Súbitamente, Joaquín estaba dado una patada en la barbilla realmente, así que estiró su brazo y sujetó sueltamente su tobillo con su mano grande logrando agarrar el pie que patea.
El hombre agarró el tobillo de ella y miró la cara de dormir con sus ojos negros pensando...¿Por qué estaba tan sensible a este movimento incluso estaba asustada?
Cuando el hombre estaba perdido en sus pensamientos, la persona en la cama volvió a caer en una pesadilla y emperzó a decir delirios
-Karin, Karin, me lleva, me lleva por favor...-
Joaquín escuchó mal las palabras de Denis, casi rompió el torbillo de ella con sus palmas grandes y volvió serio con los ojos negros...Llamaba a Julián, ¿estaba tan bueno de verdad?
Miró fijamente el hombre a la persona en la cama...Denis, no lo piensabas, ¿Quieres que la llevaba Julián? ¿Quieres salir juntos con Julián?
¡No es posible!
-Karin...-
La mujer siguió diciendo delirios.
Ahora Joaquín parecía más y más frío que poco a poco se aproximó a la temperatura del hielo por debajo de cero. Lo que miró fijamente era las lágrimas derramadas de la esquina del ojo de la mujer.
¡Derramó lágrimas!
No importa era ella de hace tres años o de ahora, ¡nunca ve llorar a ella por alguien en la memoria de Julián!
¡Por Julián!
No sabía por qué. Al pensar eso, ¡tenía un impulso de destruir a Julián y después estrangular a esa mujer con sus propias manos!
Miró fijamente las lágrimas de ella que cayeron en el almohada por su cara hasta que se convierte en un punto mojado...¡Era desagradable a la vista!
¡Era desagradable a la vista!
¡Todo era desagradable a la vista!
¡El almohada era desagradable a la vista!
¡La sábana era desagradable a la vista!
¡Sus lágrimas eran desagradables a la vista!
Denis sospechó que no oyó bien, por lo tanto levantó la cabeza lentamente-¿Qué dices?-
-¿Acaso no quieres el dinero? ¿Acaso no puedes arriesgar la vida por dos millones de euros? Duerme conmigo una noche. Dos millones, lo doy.-
No dijo nada Denis duranto mucho rato como que el movimiento estaba fijo. Solo abriendo los ojos, miró al hombre sin parpadear.
-No.-
Estrechó sus ojos Joaquín-¿Dices que...no?-
-Sí- miró a él -No, dije que no.-
¿Por Julián?...¡Por Julián!
¿Esta mujer que quería mucho el dinero rechazó dos millones de euros?
Julián...¿Era tan importante de verdad?
Agitó un idea malvada en el corazón, de pronto, bajó la cabeza y aprestó con fuerza a los labios de Denis con sus labios.
¡Eran los labios malditos con que dijo las palabras que le hizo enfadado!
¡Eran los labios malditos que le hicieron enojado una y otra vez!
Besó los labios de ella con fuerza. Aunque los labios eran groseros como tela de lino, sentía mucho dulce.
¡Parecía como los labios de ella pertenecían a él, Joaquín!
Él abreió los ojos...¡Esta mujer también pertenecía a él, Joaquín!
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