Amor profundo: insaciable amante romance Capítulo 75

—¿Por qué?

Vanesa miró a Jack confusa a ver si estaba bromeando, pero su expresión era muy seria y algo disgustada. Y estos disgustos no venían por el proyecto, debería haber pasado algo que ella desconocía.

Vanesa apretó los puños, porque la cooperación con Jack era tan importante para el Grupo Cazalla, que tenían que aprovechar esta oportunidad sí o sí, a pesar de que había solucionado la crisis de financiación.

—Señor Jack, ¿puedes decirme qué está pasando? —preguntó Vanesa seriamente.

—Bueno, Vanesa, te cuento…

Jack se veía tan serio, como si fuera a contar algo muy grave y todos guardaron silencio.

—Un tercero nos acaba de proporcionar este proyecto ayer y después de nuestras revisiones, vemos que ese es el proyecto más perfecto. En ese momento, más del 90% propusieron aprobar el plan de inmediato, pero lo suprimí, porque ustedes se encargaban de este proyecto y no iba a reemplazarlos por otros sin haber visto su proyecto.

«¿Tercero? ¿Por qué apareció un tercero de repente en este momento?»

La razón por la que Jack canceló la cooperación con el Grupo Cazalla debería estar relacionada con este tercero. Luego, Vanesa se obligó a calmarse y escuchó las siguientes palabras de Jack.

—De modo que, lo descubrimos al leer su proyecto.

—¿Qué?

—Su proyecto tiene una similitud de 90% con el del tercero. Hemos revisado que la parte más similares son las partes más importantes y esenciales del plan. Pero en el proyecto del tercero venía más preciso que el suyo.

—¡No puede ser!

«¿Una similitud del 90%? Es casi la copia de todo, debería haber alguien que filtró todo el proyecto al tercero para que pudieran escribir algo similar al proyecto de Grupo Cazalla.»

—Vanesa, lo siento mucho. Esta es la situación e independientemente de qué parte ha plagiado, no vamos a seguir cooperando. Espero que comprendas nuestra decisión.

Vanesa comprendía a Jack y entendía la decisión de esta gran empresa. Por mucho que se moría de la ira, tuvo que controlar sus emociones y dijo:

—Es una lástima de verdad. Te deseo éxito en su proyecto.

—Gracias.

La proyector se apagó y toda la sala se quedó en un silencio sepulcral.

Nadie habló, porque ninguno quería reconocer que todo su trabajo había servido para nada. Se miraban unos a otros y todos estaban deprimidos y furiosos.

—¡¿Quién diablos filtró nuestro proyecto?!

—¡Hay que sacar a esa persona y mándala a la cárcel! ¡Maldita sea, maldita sea! Todo nuestro equipo estuvimos trabajando días y noches durante casi un mes para sacar este proyecto perfecto, pero resulta que… ¡Joder!

—Directora Vanesa, tenemos que investigarlo y hacer que pague el precio esa persona.

—Eso, directora Vanesa...

Todos estaban indignados y no paraban de maldecir. Vanesa guardó silencio hasta que todos se habían desahogado algo y observaba a todas las personas presentes en silencio.