CEO: Matrimonio arreglado romance Capítulo 21

Narra Katherine.

Liam llevaba a ambos niños en sus brazos mientras yo sujetaba a Rocky nuestro perro labrador por la correa. Mis hijos querían a su padre como locos y siempre querían que él los abrazara cuando estaba en casa. Tenía que trabajar mucho, por lo que era natural que buscaran su cercanía cada vez que tenían la oportunidad, y él trataba de hacer tiempo para ellos con la mayor frecuencia posible.  Nombramos a nuestros hijos: Alec y Ethan. Nuestros pequeños tenían tres años de edad.

Ambos  me dieron una gran sonrisa desde el brazo de su padre. Eran la viva imagen de Liam. Mí Madre abrió la puerta antes de que pudiéramos tocar el timbre, sonriéndonos. Como de costumbre, estaba estilizada a la perfección con un elegante peinado, una falda de tubo de lana y una blusa de seda fluida. Al menos no llevaba pendientes largos ni collares delgados. A pesar de su estilo perfecto, me dio un fuerte abrazo antes de arrancar a Alec del abrazo de Liam para luego  presionarlo contra su pecho, sin importarle si su blusa se arrugaba.

Mí esposo se rio entre dientes

—Buen día para ti también Madeline —le dijo.

—Liam — respondió ella  riendo y le dio un rápido beso en la mejilla antes de volverse hacia Alec.

—No creo que la abuela sea lo suficientemente fuerte como para cargarlos a los dos—dijo Ethan en un puchero, pero mí padre salvó el día, apareciendo en la puerta. Las rayas grises en su cabello oscuro eran ahora más dominantes y las arrugas alrededor de sus ojos se habían profundizado, pero para mí todavía se parecía al hombre que me había acompañado por el pasillo hasta el altar. Me abrazó con fuerza.

—Te ves hermosa como siempre—mencionó—. No sé cómo encuentras tiempo para ti, con estos dos terremotos—agregó mí padre  después.

—Algunos días no lo hago— dije con una risa exasperada. Había mejorado ahora que eran un poco mayores y podían entretenerse mutuamente. Pero dejarlos a su suerte siempre representó un riesgo para nuestros muebles. Había aprendido a no dejar a Rocky solo con ellos porque en una ocasión lo habían vuelto rojo y azul con acuarela. Fue  un momento sumamente divertido.

Mí padre  tomó a Ethan de los brazos de Liam y luego le estrechó la mano.

—Espero que tengan hambre. Hemos preparado una gran cena para esta noche—le dijo.