Quizás fue sin intención o quizás porque recordaba que ese día era su cumpleaños. Estefanía lloró en silencio todo el camino, mientras él la miraba sin parar, y casi al llegar a casa le preguntó: "¿Sabes qué significa la flor de campanilla?"
Estefanía no le gustaban las flores, así que no tenía ni idea.
"Significa que eres única. Cada persona en este mundo es única, tú también", le dijo Carlos.
Desde entonces, Estefanía nunca olvidó esa flor que de alguna manera encajaba perfectamente con su nombre.
Desde ese momento, en cada cumpleaños, siempre había alguien que le ponía un ramo de campanillas en su habitación.
No le gustaban las flores, pero las campanillas eran la excepción.
Y así había seguido siendo, hasta el día de hoy.
...
"¿Y? ¿Encontraste a esa persona cuando regresaste?" preguntó Adriana de repente antes de dormir.
Estefanía, sentada en su escritorio, se quedó helada y cruzó miradas con Adriana.
Luego se levantó y se acercó a la cama, abrazó a Adriana y le dio un beso en su cabello suave y fragante, susurrando: "Ya sea que lo haya encontrado o no, con tenerme a mí es suficiente, ¿verdad?"
"Sí…", respondió Adriana en voz baja después de un momento.
Estefanía podía decir que Adriana estaba fingiendo que no le importaba. Pero no había otra opción, habían dependido la una de la otra durante tanto tiempo, que estar solas también estaba bien.
Adriana era mucho más madura emocionalmente e intelectualmente que otros niños de su edad. King le había hecho un test una vez, y el desarrollo mental de Adriana ya estaba al nivel de un niño normal de unos diez años.
"Claro", dijo Estefanía, y empezó a cantar una canción suave que estaba de moda.
A mitad de la canción, Adriana ya se había quedado dormida. Estefanía la acomodó con cuidado en la cama y volvió a su computadora.
Mientras ingresaba la contraseña, las letras de la canción seguían en su mente.
Había sido fan de ese cantante durante años, desde antes de que fuera famoso hasta que se hizo conocido en los últimos años.
Siempre se aprendía sus canciones sin prestar mucha atención a las letras.
Pero esta nueva canción tenía un significado interesante. Es una historia que al héroe no le importa, pero que la heroína nunca olvida.
Miró las dos campanillas en el jarrón de la esquina de su escritorio, y su mente volvió a Carlos.
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