EL CEO Y LA HUÉRFANA romance Capítulo 129

Después de esas peleas Sara estaba más que frustrada por todo y decidió ir a la casa de Luisa a la hora de la comida como todos lo días, pero en esta ocasión vio por la ventanilla a Gonzalo salir de una tienda y caminar por la calle sin dudarlo se bajó para hablar con él.

-Gonzalo que bueno encontrarte, estaba pensando en ti- comento al acercarse a él.

-dígame señora Lemus ya tiene los papeles para que le firme, dígame donde me presento y ahí estaré-  indico muy frio.

-no es eso, necesito que tomes posesión de lo heredado por mi padre y que ese rancho lo eches a andar o lo vendas porque hoy me recordaron que debe de estar muy descuidado- dijo muy fría. –Gonzalo quiero pedirte un favor me puedes acompañar a comer algo ¿si tienes tiempo?-

-señora Lemus usted puede hacerse cargo de su rancho no me importa- dijo con desesperación

-bien puedo hacerlo pero necesito dos o tres favores tuyos y lo hare, pero lo podemos platicar en la comida-

-  está bien puedo invitarla a comer si gusta, el restaurant de mi madre será muy sencillo pero podemos ir ahí le prepare un platillo especial- dijo con ironía en su voz.

-claro que quiero ir a conocer el restaurant de mi hermano – contesto con el mismo tono de voz, ella sabía muy bien que la quería hacer sentir mal pero no le iba a dar el gusto.

Llegaron al restaurante y como prometió Gonzalo se metió a la cocina y él le preparo personalmente su comida a Sara y salió a comer con ella.

-Gonzalo eres un muy buen chef, ¿no te gustaría hacer más grande tu restaurant o hacer una cadena de ellos?- comento Sara

-Claro que me gustaría, y espero hacerlo tarde o temprano con mi propio esfuerzo no necesito ayuda económica- dijo muy frio

-Gonzalo sé que mi padre no fue el mejor de todos pero creo que lo hizo por tu propio bien creciste a lado de tu madre, como escuchaste en la plática de mi padre nuestro abuelo mando a matar a mis hijos, afortunadamente no fue tan cruel después de todo, no los mato pero si los separo de mi, hasta hace poco me entere de eso y encontré a mi hija, ella creció llena de carencias en un orfanato y ahora solo me puedo acercar a ella como una amiga afortunadamente para ella encontró a gente que la ayudo en su camino- dijo muy triste.

-entiendo Sara pero- ella lo interrumpió y puso su mano sobre la de el -tu creciste bajo la protección de tu madre y me alegra porque te convierto en un gran hombre y mi abuelo nunca supo de ti, fue lo mejor créeme y ahora solo te está dando algo de la fortuna de los Lemus, créeme no te está dando nada que no merezcas además con ese dinero puedes llegar muy lejos, con tu propio esfuerzo- el solo la miro

-que gana con esto- pregunto muy desconcentrado.

-Me gustaría ganar al hermano que nunca supe que tenía- comentó con una sonrisa.

-me encantaría que conocieras a mi hija ella no sabe quién soy, pero te puedo presentar a mis nietos ellos me dicen abuela no saben que los soy de sangre, para ser completamente feliz en la vida, me gustaría encontrar a mi hijo, ¿te puedo presentar como a un amigo si eso te parece?-  

El acepto la invitación iría en calidad de amigo de Sara, ella pasaría por el al restaurante para ir por la tarde a casa de Luisa.

En casa de Esteban

-buenas tardes señora, soy Estela Conti y busco al señor Esteban Loaiza ¿se encontrara en casa?- Estela llegaba a la casa de Esteban y se presentaba con Roció.

-claro que si señorita pase le avisaré al joven Esteban que está usted aquí- se retiró a su recámara.

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