El hombre con la máscara de zorro romance Capítulo 247

Entonces, Oscar recordó su propósito de venir tan temprano.

Inmediatamente hizo un gesto con la mano a Emma, indicándole, -No, prepararé el desayuno de Laura.-

-¿Qué?-

Los ojos de Emma se agrandaron, le pareció increíble, -Pero, señor Oscar...-

Oscar hizo un gesto con la mano y detuvo las palabras de Emma,

-No pasa nada, solo voy a cocinar algo sencillo.-

Aunque nunca había cocinado, había visto a otros cocinar. Era encender el fuego, poner los ingredientes y luego sazonar. No parecía muy complicado siguiendo la receta paso a paso.

Sin embargo, existía una brecha entre el ideal y la realidad.

Oscar pensaba que no había muchos pasos para cocinar y no era difícil. Pero cuando realmente comenzó, se dio cuenta de que las cosas eran completamente diferentes de lo que había pensado.

Emma estaba preocupada del nivel de cocción del señor Oscar y siguió a Oscar a ver si necesita su ayuda.

Como esperaba, Oscar no sabía ni cómo encender el gas.

Frunció el ceño mirando fijamente a la estufa sin llama. Levantó y dejó su mano grande, parecía que no sabía dónde tocar.

La realidad era que Oscar echó algún vistazo cuando cocinaba Emma, pero nunca había visto todo el proceso, ni siquiera sabía cómo encender el gas.

Pero su orgullo no le permitió pedir ayuda a Emma.

Emma estuvo mirando unos dos minutos a su lado y finalmente no pudo contenerse. Cuidando la autoestima de Oscar, pulsó un botón en la estufa y luego le sonrió disculpándose.

-¡Ay! Lo siento, señor Oscar. Sin querer he tocado el interruptor. ¿Los ingredientes aún no están listos? Apago ahora mismo el fuego.-

Después de hablar, Emma volvió a encender los botones para ajustar la potencia y luego se dijo a sí misma.

-Anda, ¿dónde está el botón para apagar el gas? De los años, no recuerdo ni algo tan sencillo. ¿Es este? Vaya, este aumenta la potencia, y ese otro baja la potencia. Ay, ya lo recuerdo, qué memoria, es este para apagar.-

Emma terminó de hablar, conscientemente dio un paso atrás y le sonrió a Oscar.

-Disculpe, señor Oscar. Me estoy haciendo mayor, así que hay algunas cosas que no consigo recordar. Y tomé su tiempo de cocción para la señora Laura. Lo siento mucho.-

Oscar no era idiota, entendía la intención de Emma. No dijo nada y admitió su favor silenciosamente.

Acababa de leer la receta y no se podía preparar comida muy grasienta para el desayuno. Pero Laura había estado muy cansada ayer y también era muy importante nutrirse.

Entonces, para el desayuno, Oscar planeaba cocinar arroz congee de carne picada con huevo en conserva, freír huevos con tocino, preparar dos rebanadas de pan tostado y hacer una ensalada de verduras.

-Emma, parece que no hay condimento en el arroz congee. ¿Vistes a papá poner sal?-

Además…

Aunque Iker tampoco había cocinado antes, tenía sensación de que la carne y el arroz no deberían ponerse a cocer juntos sin pasar por procesamientos anteriores.

Después del recordatorio de Iker, Emma se dio una fuerte palmada en la frente, recordó qué era lo que había olvidado.

“Debería avisarle al señor Oscar poner condimentos en el arroz congee.”

Pero los huevos en conserva tenían sabor de por sí, por lo que no debería ser un gran problema.

En ese momento, en el dormitorio del segundo piso.

Laura abrió los ojos con dolor en todo el cuerpo, se sentó difícilmente y miró a su alrededor. Parecía como si hubiese sufrido un accidente, le dolía por todas partes, sus piernas no tenían fuerza en absoluto. Además, su cuerpo estaba lleno de chupetones y marcas de anoche.

Laura se mordía los dientes y se enfadó más todavía porque el cabrón que le hizo todo eso no estaba.

Ella no iba a perdonar más a Oscar, el hombre lo había hecho aposta y siempre fue así. En nombre del amor, terminaba siempre llevándola a la cama.

Las mejillas de Laura se sonrojan y luchaba por levantarse, pero tan pronto como sus pies tocaron el suelo, sintió dolor en los muslos.

Historial de lectura

No history.

Comentarios

Los comentarios de los lectores sobre la novela: El hombre con la máscara de zorro