El Invitado de La Boda romance Capítulo 9

—Ahora si puedo responderte.— Comenta cuando el mesero se retira.

—¿De verdad me quieres responder?— Pregunto con un hilo de voz y ella asiente.

—Claro…No le veo ningún problema a decir que mi primer mes de casada no ha sido exactamente como lo soñaba.— Me dice y bebe un sorbo de agua el cual el mesero ha dejado servido en nuestros vasos mientras trae la bebida.

—En realidad pregunte si le amas, pero me interesa lo que has dicho… ¿Qué es lo que esperabas de tu primer mes de casada que no ha ocurrido? — Pregunto y ahora soy yo quien bebe agua y creo que es por el calor que me ha dado al hacer la pregunta.

—Mis amigas las cuales estaban casadas ya, me han contado lo increíble que fue su primer mes de casadas… en realidad, el primer año. Comentaban lo mucho que les costaba salir de la casa ya que no podían salir de la cama… ya sabes…— Me dice más bajito y ríe nerviosa mientras que yo comienzo a imaginarme más cosas de las que debería.

—¿Y qué? ¿Acaso eso no ha ocurrido? — Pregunto con mi voz un poco más ronca de lo habitual.

—Pues, honestamente al llegar a casa le ha importado más su trabajo que yo. Se despierta más temprano de lo necesario, llega a casa demasiado tarde, y hasta me ha dejado cenando sola más de una vez. Honestamente no es nada parecido a lo que me imaginaba que sería. — Se queja.

No sé porque rayos me lo cuenta a mi… Ah sí, porque yo le he preguntado me recuerda mi subconsciente.

—¿Y no lo has hablado con él?— Pregunto y hacemos un corto silencio cuando el mesero llega con la botella del vino y el aperitivo que hemos ordenado. Rápidamente él toma la orden de nuestros platos y se retira nuevamente.

—¿Tú le dirías a tu esposa oye cariño, creo que no estamos teniendo el suficiente sexo que deberíamos?— Me pregunta y casi me ahogo con el agua.

No puedo evitar reír de su respuesta y me toma varios minutos recomponerme –Entonces, ¿el problema pasa por simplemente sexo?— Pregunto y de verdad que comienzo a imaginarme como seria pasar una noche con ella.

Ella toma la copa en sus manos y me mira –Obviamente es un problema, pero no es el principal… no sé; algo ha cambiado después de la boda y no sé qué es exactamente. A veces tengo la sensación de que me he equivocado. — Confiesa y por algún motivo mi corazón comienza a acelerarse.

Comentarios

Los comentarios de los lectores sobre la novela: El Invitado de La Boda