Esposa falsa de Simón romance Capítulo 317

Melina se quedó atónita, luego se giró para no impedir la mirada de Óliver. Después explicó suavemente, -Frida se despertó antes. Ya había tomado sopa y no se siente incómoda.-

Aunque todavía estaba un poco pálida, pudo ver que su estado mental era mucho mejor de lo que había sido anoche cuando tenía fiebre alta.

Óliver sonrió con sus labios muy secos, -Está bien.-

-Óliver, tome agua primero.-

No se movía, y solo miraba a Frida.

Frida también lo estaba mirando. Al inicio ella solo quería ver si estaba bien, pero sus ojos ardientes la hacían sentirse embarazada. Ahora Melina sostenía un vaso de agua frente a él, pero él no lo recogía, sino la miraba fijamente.

-...- Frida tosió embarazada, luego se bajó de la cama.

Se acercó a Melina, quien sonrió y le entregó el vaso de agua. Frida la miró y se encontró con los ojos de Melina, quien le gruñó, luego se levantó y dijo, -Voy a comprar algo. Volveré pronto.-

Tras decir eso, Melina se fue con zapatos de tacones altos rápidamente.

Cuando Melina se fue, apareció una sonrisa en los ojos de Óliver. Le gustaba mucho esta secretaria cuando llegó al momento importante.

-Acabas de despertarte, entonces bebe un poco de agua.- Frida le entregó el vaso y le pidió que bebiera.

Óliver no dijo nada ni recogió el vaso, sino la miró en silencio.

-¿No, no tienes sed?- Frida sostenía el vaso y no sabía qué hacer.

-No tengo fuerza.- Óliver dijo ligeramente.

Al oír eso, Frida no entendió lo que quería decir al principio, pero luego reaccionó. Óliver dijo que no tenía la fuerza para sostener el vaso y eso significó pedirle a ella que le alimentara con agua, ¿no?

La cara de Frida de repente se volvió roja, y bajo la atenta mirada de Óliver, estaba tan avergonzada que nerviosamente puso el vaso sobre la mesa.

Al ver su acción, los ojos de Óliver se oscurecieron un poco, y momentos después sus delgados labios se movieron, pero no dijo nada.

La atmósfera en la sala era muy embarazada. Era imposible para ella alimentarlo con agua por la relación entre ellos. Ella solo pudo darle el vaso y lo dejó beber.

-¡Pido entrar una enfermera!-

Después de decir eso, Frida de repente se volvió para salir a llamar una enfermera. Óliver miró su espalda sin remedios. Por un vaso de agua podría pensar en pedir entrar una enfermera.

-Vuelve.- Óliver dijo débilmente.

Ella tuvo que detenerse y lo miró mordiéndole el labio inferior.

Parecía patética como si Óliver hubiera hecho una petición particularmente difícil, pero él sabía que de hecho era difícil para ella.

Pensando en eso, Óliver sonrió débilmente, -Solo es una broma, ¿y vas a pedir entrar una enfermera?-

-Yo...-

-Acabo de hacer una broma contigo, y ahora no lo haré... Lo siento.-

Al oír eso, Frida lo miró y vio la disculpa en sus ojos, entonces bajó los ojos avergonzada, -Debo decir que lo siento. Me salvaste y has hecho tanto por mí, pero yo...-

Ni siquiera quería alimentarlo con agua.

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