Esposa falsa de Simón romance Capítulo 507

¿Por qué has vuelto?

No era la primera vez que a Xenia le hacían esa pregunta.

Muchas personas parecían preguntarle eso después de saber lo que había pasado antes.

¿Por qué has vuelto?

Este fue el lugar donde nació y creció. Hacía cinco años lo dejó tristemente y se cambió el nombre.

¿Estuvo mal que volviera ahora cuando sentía que tenía el valor de enfrentarse a todo?

Le dirigió a Bianca una mirada silenciosa, -¿Tiene esto algo que ver contigo?-

¿Por qué tanta gente tenía que preguntar eso? Xenia quería volver, así que lo hizo.

-¿Has vuelto por Simón?- Bianca preguntó un poco a regañadientes, -Fuiste tan fría con él que no volviste por él, ¿verdad?-

Los labios de Xenia se crisparon, -¿Qué tiene que ver eso contigo?-

-Por supuesto que tiene algo que ver conmigo.- Bianca aún no se rindió, -Si no te gusta Simón, entonces él y yo tenemos una oportunidad de estar juntos, pero si volviste por él, entonces no tengo ninguna oportunidad.-

-…-

Xenia realmente admiraba a Bianca, pero después de haber hecho algo malo, ahora sí pensaba en Simón. Xenia sonrió y habló, -Tu madre dice que ya te arrepientes y quieres pedirme disculpas sinceramente. ¿Es eso lo que te arrepientes?-

-Que me disculpe contigo y que me guste Simón son dos cosas diferentes. Fue mi culpa por causarte daño, pero pensé que me lo habías robado en ese momento y por eso hice todo eso. Realmente reflexioné sobre mí misma y quise disculparme contigo, pero…- 

-¿Pero no quieres renunciar a él todavía y crees que aún tienes una oportunidad?-

Se dijo lo que Bianca estaba pensando, y ésta no lo negó y sólo agachó la cabeza.

-Me gusta mucho Simón, y sé que eres su ex mujer, pero si ya no sientes nada por él, tienes que darle una oportunidad a otra, ¿no? Esta vez ha sido culpa mía y me arrepiento sinceramente, ¡lo siento!-

Dicho esto, Bianca se levantó y miró a Xenia con seriedad antes de inclinarse hacia ella en señal de disculpa.

Xenia se sorprendió, había esperado que Bianca se disculpara de mala manera, pero no había esperado que fuera tan amable, ¿acaso era porque sabía la verdad que aceptaba la realidad tan fácilmente?

¿En qué demonios estaba pensando esta persona?

Sin embargo, ahora que Bianca estaba dispuesta a disculparse así, era algo bueno para Xenia.

Al menos, ya no se sentiría avergonzada.

-No harás nada que me haga daño de nuevo, ¿verdad?- preguntó Xenia.

Al oír eso, Bianca se apresuró a sacudir la cabeza.

-Por mucho que te odie, también soy una persona razonable. Antes pensaba que lo habías hecho a propósito, por eso quería darte una lección, y esa concentración de ácido sulfúrico no era especialmente alta, estaba diluida, por lo demás…-

Al oír esto, Xenia percibió un atisbo de peligro, -¿Acaso crees que no has hecho algo malo?-

Bianca se agravó, -No, ya lo he comprobado en internet, el ácido sulfúrico diluido no es muy dañino, así que…-

-…-

Xenia sintió que no podía razonar con esta persona, y cerró los ojos, -Aunque te perdono, al fin y al cabo, hiciste que Simón saliera herido, hay que darte una lección.-

Así lo pensaba, pero era evidente que Simón era aún más difícil de tratar de lo que ella creía, así que no estaba segura de si debía volver a la empresa ahora.

Xenia pensó un momento y dijo amablemente, -No es eso, es que tengo muchas cosas en marcha en mi empresa. Ya he gastado bastante tiempo por ocuparme de ti, y hay un montón de asuntos de la empresa sin atender. Tengo que volver al trabajo ahora que tus heridas están mejor.-

-¿Y cuando termines de trabajar?-

Xenia no contestó, pero estaba claro que Simón no iba a rendirse y siguió presionándola.

Xenia no sabía cómo responder a una pregunta tan punzante.

Sonrió, -Hay muchas cosas en la empresa y no puedo ocuparme de todo en poco tiempo.-

Simón parecía enfadado, y Xenia no pudo evitar dar un paso atrás y toser para ocultar su falta de naturalidad, -Iré a verte regularmente.-

Apenas sus palabras salieron de sus labios, Simón dijo, -¿Es cierto que no me dejarás mientras mis heridas sean malas?-

Xenia dijo, -¿Qué?-

-¿Es eso?- Simón volvió a repetir como para confirmar, -¿Es eso cierto?-

-…-

Xenia respiró hondo y miró a Simón con seriedad, -Lo he dejado muy claro, ¿qué más quieres? ¿Me estás amenazando al interrogarme así porque quieres hacerte daño? ¡Simón, si realmente haces eso, aunque te mueras, no te visitaré!-

Xenia dijo lo que pensaba por adelantado para que Simón no se hiciera daño de verdad. La mirada de él y su expresión le produjeron una sensación inquietante.

En realidad, Simón sólo le preguntaba y no tenía intención de hacerse daño, pero al verla tan preocupada por sí misma, no pudo evitar sonreír de nuevo.

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