Miro el reloj de la entrada, justo ahora da las cinco en punto. Ahora dirijo mi cabeza hacia la sala, todo está preparando tengo snacks, dulces, refrescos, sándwichs, pastel...
Quizás es demasiado pero nunca he tenido una fiesta de cumpleaños y menos una invitada. Estoy demasiado nerviosa, mis manos sudan demásiado. Al fin ese sonido que tanto ansiaba esperar llega a mis oídos. El timbre de la puerta. Salgo disparada y abro precipitadamente.-
— Hola cumpleañera!— Dice Marcia sonriendo.
Yo sonrió y la invitó a pasar a la sala, veo mi regalo en la entrada, vaya lo había olvidado lo cojo y lo dejo al lado del pastel de cumpleaños.
— Tienes muchos invitados?— Pregunta Marcia divertida.
No, la verdad es que solo estaremos tu y yo, dudo que mis padres aparezcan.— Digo bajando la cabeza.
— Pues hoy cogeremos varios kilos. Jajajaja...— dice agarrándome del brazo y llevándome hasta una silla para después entregarme su regalo.
Es una cajita pequeña, su envoltorio es dorado. Lo descubro con mucho mimo y cuidado, tratando de no romper el bonito papel, abro la cajita y veo dos pulseras con una muñequita. Es muy linda no puedo evitar sonreír. Hasta que Marcia rompe en dos la muñeca, estoy a punto de gritar.
— Mira una parte la tienes que llevar tu y la otra yo, es una pulsera de la amistad. Solo se completa cuando estamos juntas.— Dice sonríendo y colocando la pulsera sobre mi muñeca para después hacer lo mismo con la otra
— Muchas gracias, nunca había tenido una pulsera de la amistad.— Bueno ni ninguna amiga, eso último no lo digo sólo lo pienso.
— Bueno cumpleañera que es lo que quieres hacer?—
— Te parece ver una peli o una serie? Nunca he ido a ningún cumpleaños no se qué se hace en ellos.—
— Cualquier cosa está bien. Vamos a ver The Magicians, te va encantar es una serie muy chula, estoy tan pillada por Eliot...—
Pues tenía razón, ya me he enganchado a esa serie, nos hemos visto una temporada entera. Es tardísimo y mis padres ni siquiera han aparecido.
— Marcia y si llamas a tus padres y te quedas a dormir? Mañana no hay clase, que opinas...—
— Claro que si, los llamo ahora mismo.—
Al final la dejan quedarse a sido decir el nombre de mis padres y no han dudado ni un momento, cuan de importante son ellos aquí? Pensaba que para ellos también era su primera vez aquí, veo que me equivoco.
— Y este regalo?— Dice Marcia curiosa.
— Es el de mis padres.— Digo molesta. Cambiaría un millón de regalos por pasar solo un día junto a ellos.
— Venga ábrelo, a ver qué te han regalado.— Dice de forma insistente.
Cojo el paquete y los desenvuelvo, dentro hay un libro. Y otra cajita.
Historia de la familia Philips
Esta escrito en letras doradas y parece antiguo, lo miraré más tarde... la cajita pequeña viene pegada a un sobre.
Este es un regalo de tu abuela para tu dieciocho cumpleaños. A ella le hubiera encantado dártelo en persona, pero sabía que no viviría tantos años.
Abro la cajita y veo un anillo con un gran zafiro azul. Inmediatamente lo coloco en mi dedo corazón me está perfecto. Es muy lindo, pero una pregunta ronda mi mente, porque entregármelo en mi cumpleaños número dieciocho y no antes?
Es hora de mi transformación y ellos ni siquiera se han dignado a aparecer, estoy realmente molesta, al menos no lo pasare sola.
Salgo al jardín de atrás con Marcia, observó hacia todos lados, no veo a nadie. Me despojo de toda mi ropa excepto de la interior.
** Vamos allá mi pequeña humana**
** Bru estoy nerviosa! Igual lo estropeó**
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