Porqué siempre que estás a gusto, siempre que lo pasas bien el tiempo corre tan deprisa? Eso es algo que me atormenta y saca lo peor de mi. En fin al menos me queda la tarde del domingo para distraerme con Marcia.
Acaba de llegar a buscarme, vamos a tomar un batido y después daremos un paseo con su prima y una amiga de ella, lo único que se de ellas es que son un año mayores que nosotras.-
La cafetería estaba abarrotada, menos mal que cuando ya nos íbamos quedo libre una mesa con dos sillas. Ideal es justo lo que necesitamos.
- Que desean tomar estas dos damas? Dice un hombre mayor y muy agradable.
- Yo un batido de chocolate con extra de nata y sirope de caramelo. Dice Marcia.
- Lo mismo para mí. Digo tímida. La verdad es que va a estar demasiado dulce pero en fin, esa a sido mi elección. Sentí verguenza y no me atreví a pedir otra cosa. Ya lo se soy rara y mucho! Pero aveces me pasa esto.
- A quién tenemos aquí! A la marciana y a la chica rara. Dice Mandy ríendose de nosotras.
Veo como Marcia va a responder, pero esta vez soy más rápida y le doy a probar el batido. Eso no parece haberle sentado muy bien a líder de la mini secta, se va enfada y refunfuñando. Marcia me mira con cara de pocos amigos.
- No ves que lo que quería era provocarte y montar una pelea? Duele más el no hacer aprecio, no te has dado cuenta de cómo se ha marchado molesta por no conseguir su propósito.
Marcia asiente con la cabeza, mientras seguimos degustando nuestro batido. Un olor a narcisos y a rosas llena mis fosas nasales.
** Mate, mate.. búscalo! **
No escucho a Bru, más bien prefiero no escucharla, salgo corriendo de la cafetería dejando a Marcia sola.
Corro tanto como puedo, hasta que estoy segura de no oler ese aroma. Bru esta muy enfadada conmigo se ha pasado toda la carrera insultandome. Desconocía que existieran tantos insultos. Estoy recuperando el aliento sentada en un banco de parque, nunca en toda mi vida había corrido tanto..
Mi móvil comienza a sonar, miró la pantalla y veo que es Marcia. Descuelgo y atiendo la llamada.
- Porque has salido corriendo, no veas la que se ha liado Ethan Miller estaba como loco, buscando a alguien, creí que me iba a matar cuando llegó a nuestro sitio. Me pregunto qué quien estaba conmigo, me inventé una excusa no le dije que eras tú, pero no se fue muy convencido. Que has hecho?
- Nada, me fui porque recibí un mensaje de papá pero ya está todo solucionado, te espero en el parque? Vale?
- Vale, pero no te muevas voy para allá.
Madre mía, qué voy a hacer? Esto no me puede estar pasando y si se trata de él y si es mi mate? No, eso no puede ser, me va rechazar y sino fuera poco tener que soportar su rechazo, todos me humillaran él es el futuro Alfa!
No se si las leyendas son ciertas, he leído que se puede morir por el rechazo, tu loba se debilita poco a poco y al final muere y te quedas vacía y muerta en vida, al haber perdido una parte de ti.
Estoy aterrada no quiero perder a Bru! No me importa si me rechazan de nuevo, el dolor y la humillación las puedo soportar, en cuanto me gradué me marcharé de aquí, sino es antes pero me niego a hacerlo sin Bru conmigo.
- Madre mía lo que te has perdido, solo espero que no sea lo que estoy imaginando.. No hace falta que contestes, no podrás evitarlo siempre. Dice una Marcia en un tono de reproche.
Quizás estuvo mal lo de huir, pero que otra cosa podría hacer si estaba aterrada. Hay gente que se muere son encontrar a su mate o pasan muchos años hasta que lo consiguen y voy yo y en tan solo un día lo encuentro.
Comentarios
Los comentarios de los lectores sobre la novela: Eternamente rechazada