¡Jefe, Mis Gemelos, Tu Problema! romance Capítulo 25

"Señor Galindo, para mí, él es solo un amigo. Soy libre, tengo derecho a hacer amigos, cualquier problema que tengas con tu hermano no me incumbe. Espero que respetes nuestro acuerdo y no te entrometas en mi vida privada".

Cada palabra de Abril era como echar sal en las heridas de Filemón, este apretaba los dientes, las venas de su frente palpitaban. Un frío intenso emanaba de su cuerpo, enfriando casi el aire circundante hasta el punto de congelación.

"¿Estás desafiando mi paciencia?".

"No hago más que seguir el acuerdo, ¿no fuiste tú quien redactó cada cláusula?". Abril había perdido la razón, el orgullo herido la hizo olvidar el miedo, solo quería luchar contra la injusta dominación de él.

Filemón inhaló aire entre los dientes. Maldita sea, había descuidado, debería haber incluido cien reglas, prohibiendo cualquier contacto con hombres, ¡incluso al hablar debía mantenerse a tres metros de distancia!

"Cláusula cinco del acuerdo, no debes hacer nada que pueda dañar al niño, tu relación con Lionel puede poner al niño en peligro en cualquier momento".

Abril se sobresaltó. ¿Lionel podría dañar al niño? ¡Imposible! No creía que él pudiera hacer eso.

Una vez, durante un viaje, encontraron un conejito atrapado en una trampa, él arriesgó su vida para salvarlo. Fue tan amable con el pequeño conejo, ¿cómo podría dañar a su propio sobrino?

"No sé qué malentendidos tienes con tu hermano, pero creo que él no dañaría al niño, y no le diré sobre el embarazo". Hizo una pausa, cambió su tono: "Desde mi punto de vista, la mayor amenaza para el niño es tu prometida Sabina, siempre sospecha que no aborté, me ha perjudicado más de una vez. ¿Cómo puedes esperar que sea amable con los niños si no puede soportarlos ahora? ¿Por qué no rompes el compromiso con ella?". Lo dijo a propósito, ‘trata a los demás como te gustaría ser tratado’.

Como un jefe, debería liderar con el ejemplo, no podía tener dobles estándares, ser estricto con los demás y consentirse a sí mismo. Un nervio en el corazón de Filemón se tensó, nunca pensó en casarse con Sabina, siempre había pensado en romper el compromiso, pero ese no era el momento.

"¿Estás tratando de negociar conmigo?".

"Sí, la condición para que deje de ver a Lionel es que rompas tu compromiso con Sabina, así eliminamos los peligros del bebé, todos felices, por favor considéralo, Señor Galindo". Después de decir eso, soltó con fuerza la mano de Filemón y se fue. Estaba segura, él definitivamente no podría hacerlo, entonces, no tenía derecho a exigirle nada.

La ira de Filemón ya no podía ser contenida, golpeó violentamente contra la pared. Luego, corrió hacia la nevera, sacó una botella de agua fría y se la vertió sobre la cabeza para calmarse.

¿Cómo se atrevía a negociar con él? ¿Era porque había encontrado demasiados obstáculos con él y decidió retroceder, entonces se dirigió a Lionel? ¿O lo hizo a propósito para provocarlo, forzarlo a romper el compromiso para que ella pudiera tomar su lugar?

Él creía que era lo último. ¿Cómo podría él ser menos que Lionel? Pensando en eso, una sonrisa fría y siniestra se formó en las comisuras de su boca.

¡Buena estrategia, casi cayó en su trampa!

...

Cuando Abril regresó a casa, Olivia ya había preparado la cena. Tomó un sorbo de sopa y dijo con indiferencia: "Hoy Lionel vino a la empresa para encargar un collar, parece que su relación con el Señor Galindo no es muy buena, ¿ha pasado algo entre ellos?".

Ya que ella preguntó, Olivia decidió no esconder nada, debería contarle un poco sobre los asuntos de la familia Galindo, para que pudiera planificar algo para ella y su hijo en el futuro.

"Entre los hermanos de diferentes madres, hay más competencia que amor fraternal. El viejo señor Fabio era un mujeriego, tenía muchas mujeres. Su esposa dio a luz a cuatro hijas seguidas, pero no pudo tener un hijo, así que el señor tenía aún más razones para buscar amantes. Sin embargo, sus infidelidades no afectaban el estatus de su esposa, hasta que conoció a la madre de Lionel".