¡Jefe, pronto seremos tres! romance Capítulo 116

Los días pasaron volando, He tomado las tabletas pre natales al pie de la letra, hoy se llevará a cabo uno de los acontecimientos más importante para mí y para Owen, a primera hora de la mañana veremos cómo va el embarazo y escucharemos por primera vez el corazón de nuestro bebé. Estamos ansiosos por oírlo.

Las náuseas no han dejado de mostrarse, solo con sorbos de la bebida que me prepara mi querido jefecito, es que puedo levantar cabeza y poner mi cuerpo en marcha, me veo en el espejo, ya las manchas debajo de mis ojos empiezan a desaparecer, estamos listos para ir a la consulta, todo ha sido tan rápido, en tan solo seis semanas estamos a punto de dar el paso final. Ha sido una locura, pero una locura inigualable, que volvería a cometer.

–Hola, buenos días, Angie – saludo al llegar, a la asistente de la doctora.

–Hola, buenos días, Olivia – me regresa el saludo – tomen asiento en un momento los atenderemos.

Me paso al cuarto para poder colocarme una bata para que sea más fácil el estudio. Saliendo me toma las medidas y me sube a una báscula, hace sus anotaciones, toma la presión, la temperatura y me hace pasar a la camilla, hay unos soporte donde se tienen que subir las piernas, pero están hacia los lados, por lo que me siento en el borde de la cama.

–Recuéstate por favor y levanta la bata hasta el vientre.

–Claro.

Me acuesto en la cama sin soltar la mano de Owen, siento el calor que me transmite a través de su contacto.

–Todo va normal por el momento – es un alivio – ahora echemos un vistazo con el ecógrafo, para ver que nos dice el ultrasonido, vas a sentir un poco de frío – pone un gel de color azul sobre el vientre y lo extiende alrededor – ahora vamos a poder documentar que tan avanzado está el bebé.

Siento cuando Owen aprieta mi mano, estamos a las expectativas, nos miramos y reflejamos el amor que nos tenemos, nuestro bebé tiene que estar bien, tiene que ir creciendo como se debe. Es una de las preocupaciones de Owen, al ver que no como lo suficiente, insiste en que los nutrientes deben ser los adecuados tanto para mí como para el bebé. Pero con las náuseas se me quita el poco apetito, que tengo durante la mañana, así que opto por solo comer trozos de fruta.

La doctora pasa el aparato transductor por el vientre y se acomoda los lentes, es un gesto imperceptible, como si tuviera alguna duda, yo solo veo unas rayas blancas que emiten un rápido sonido. No puedo saber que denotan cada una de ellas, es como si me encontrara frente a un rompecabezas con muchas piezas, no soy experta en el tema, pero creo que la doctora refleja más dudas y hacen crecer las mías.

–Tenía la esperanza de que pudiéramos ver algo más con la exploración abdominal, pero todavía no hay resolución para detallar, tendremos que efectuar una ecografía endovaginal.

Veo la duda en el rostro de mi futuro esposo, al escuchar la palabra endovaginal, cualquier cosa lo pone sobre alerta, piensa que algo malo le puede suceder a su hijo. Es comprensible, yo también me siento igual. Aprieto su mano que no ha dejado la mía en ningún momento.

–Todo va a estar bien, amor.

La doctora se da cuenta de la negativa de Owen por la realización de la prueba. Es algo que se tiene que hacer, pero su miedo es normal.

–Los ultrasonidos endovaginal son muy común hoy en día, no vamos a dañar ni a Olivia, ni al bebé, este procedimiento es confiable y nos permitirá ver con más claridad lo que estamos esperando.

Beso su mano y le digo que sí con un movimiento de cabeza, no hemos llegado hasta aquí para irnos sin saber nada más. Así que tomamos la decisión los dos. Estoy consciente de lo que pueda llegar a sentir, me he documentado respecto al tema.

–Está bien, doctora – dice Owen.

–Olivia, relájate y sube las piernas – me dice la doctora – vas a sentir un poco de presión, solo si te tensas puede llegar a ser molesto.

Hice tal cual lo que dijo la doctora y en cuanto tomé una larga respiración, un aparato largo entró en mí. Se siente algo raro en mi interior, pero todo sea por el bien del bebé y de que por fin vamos a poder verlo.

–Esta mancha negra que ven aquí, es el útero, esta expandido, ya pronto el feto se ira acomodando en el espacio que este le permita.

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