La Dama de los Sueños Dorados romance Capítulo 145

Ella estaba decidida a aprovechar aquella oportunidad para golpear duramente a Ariana, por lo que se dio la vuelta y con sus ojos llenos de rencor caminó hacia la puerta principal del orfanato y la abrió de un empujón, mientras decía: "¡Ariana, el doctor ha vuelto! ¿No quieres saber los resultados?"

Verónica en realidad deseaba llamarla de peor manera, pero había mucha gente alrededor y tenía que mantener las apariencias. Sin embargo, Ariana ya conocía su verdadera cara y después de que el director también descubriera la verdad, no mostró cortesía alguna.

"Verónica, realmente no quiero saber los resultados, pero si verdaderamente eres de los Moore, será interesante cuando te encuentres con Aarón."

Un atisbo de lástima cruzó la mirada de Verónica, ya que al parecer Ariana aún no sabía con quién exactamente habían hecho la prueba de paternidad.

¡Y no eran los Moore!

Ella ya no tenía interés en los Moore, pues lo que quería era la identidad de la hija de una gran familia internacional.

Miró a Ariana con compasión y como si viera a una pobre criatura, dijo: "No sabes nada, qué triste."

Ariana no pudo evitar reírse, especialmente al ver a Verónica con esa expresión de lástima.

"Lo que quiero decir es que, sin importar de quién sea hija, seguiré siendo yo y nada cambiará." Esa actitud altiva de Ariana era exactamente lo que más detestaba Verónica.

"Si estás tan segura ahora, mejor sal y escuchemos los resultados juntas."

Ella resopló, pero al cruzarse con la mirada de César, se sintió incómoda y apartó la vista.

César suspiró y apoyado en Ariana, ambos salieron al exterior.

El médico ya había bajado del auto y estaba listo para dar los resultados sin demora, sin embargo, al mirar el informe en sus manos, se quedó sin palabras.

Su expresión aumentó la tensión en el aire y Verónica tragó saliva nerviosa mientras cuestionaba: "¿Qué pasa? ¿Soy o no soy...?"

No pudo terminar la frase, pues estaba demasiado nerviosa y solo esperaba la respuesta del médico, el cual frunció el ceño, negó con la cabeza y luego asintió.

Verónica quería arrebatarle el informe y leerlo detenidamente.

Ariana era la única que permanecía tranquila y a pesar de verse desaliñada y con la cara hinchada, su mirada era firme y serena.

Los demás mostraban nerviosismo en sus caras, incluidos Roberta y Luis.

Bruno y Ruth también estaban expectantes, aunque probablemente el que tenía la expresión más compleja era Aarón.

El médico suspiró y dijo: "Señorita Verónica, tengo que felicitarte, de ahora en adelante tendrás padres."

Tan pronto como terminó de hablar, Verónica emitió un grito agudo y sus mejillas se tiñeron de rojo por la emoción.

¡Lo era! ¡Realmente lo era! Quería reírse en voz alta.

Verónica no pudo seguir fingiendo y mirando a Ariana, se burló sin dudarlo: "Mira, realmente eres una cualquiera, ¡una cualquiera a la que ni siquiera Dios quiere!"

Ella estaba tan orgullosa en ese momento que incluso levantó la mano, deseando abofetear la cara de Ariana, pero apenas había levantado la mano cuando Ariana la adelantó con una bofetada sin piedad.

Verónica se quedó atónita y retrocedió un paso.

Todos los demás también estaban atónitos, pues nadie esperaba que Ariana hiciera algo así.

Ariana sonrió hacia ellos y dijo: "Felicidades, esta bofetada es mi regalo de boda para ti y Bruno. De ahora en adelante, que cada quien siga su camino y no tengamos nada que ver el uno con el otro."

Dios sabía cuánto se alegraba en ese momento, estaba tan feliz que sus ojos se enrojecieron de emoción.

Todos sus agravios de años habían desaparecido; ¡nunca había sido parte de los Moore!

¡Qué derecho tenían los Moore de hacerla sufrir! Ya no tendría que soportarlos más.

No pudo evitar levantar la cabeza orgullosamente y su sonrisa era deslumbrante, como si se hubiera liberado de alguna basura.

Aquella reacción hizo que los Moore se sintieran muy incómodos, como si se hubieran tragado una mosca.

Solo César estaba confundido, ¿qué estaba pasando exactamente en ese momento?

¿No era Verónica la que había hecho la prueba de paternidad con aquellos de allá? Pero parecía como si Verónica hubiera hecho la prueba con Luis.

De repente él recordó que no le había explicado las cosas claramente a Ariana y dijo: "Ariana, creo que hubo un malentendido."

Pero en ese momento, todos estaban tan impactados con la noticia que nadie tenía tiempo para escuchar las divagaciones de un viejo.

Roberta fue la primera en reaccionar y abrazando a Verónica emocionada, exclamó: "¡Vero, yo sabía! ¡Yo sabía que eras la más parecida a mi hija!"

Ruth también estaba muy contenta, ya que actualmente podían decirle al mundo que había sido Ariana quien había alterado los documentos, usurpado el lugar que no le correspondía y las acusaciones caerían sobre ella.

Nunca imaginó que Verónica, esa joven, resultara ser la verdadera señorita de la familia Moore.

A Ruth se le iluminó la cara de felicidad, pensando en cómo limpiar la reputación de su hijo y su tono se tornó urgente cuando dijo: "Vero, antes en la casa de los Moore hablé de más, pero ahora que sabemos que tú eres la auténtica señorita Moore, la que tiene el compromiso con Bruno eres tú. En cuanto a Ariana, estoy segura de que el señor Moore ya debe tener otro plan para ella, ¿verdad?"

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