Yadira miró al otro lado, y negó, -No me miró.
-Bah -Noela siguió-. Que no te miró, ¿acaso estaba mirando a mí?
-Puede ser -Yadira dijo indiferente.
Noela se quedó sin palabras.
Delfino echó un vistazo a la dirección de Yadira y continuó empujar a Horacio adelante.
Al ordenó unas palabras a Xulio, Delfino se sentó.
Xulio proclamó el inicio del banquete con unas palabras de cortesía. Y luego notó la presencia de Yadira.
-Señor, ha venido la señora -Xulio se volvió y le dijo a Delfino en voz baja.
-No me importa nada si está aquí -Delfino tomó un champán, bajaba la mirada y dijo sin emoción.
Con esto, Xulio era consciente de que su jefe era un hombre desobediente y terco.
Mientras tanto, se provocó otra agitación.
Aunque no pudo compararse con lo anterior, era bastante llamativa.
-¿Quién es?
-Dicen que es la esposa futura del Señor Delfino.
-Se leía en las noticias, pero el Señor Delfino no dio la respuesta formal ni celebró el festín de compromiso.
-Cómo puede ser falso, me dijeron que han tenido la hija…
-¿Quién te has dicho?¿Está seguro?
Las discusiones continuaron…
Yadira se inclinó un poco para oír de qué estaban hablando. Al enterarse de la conversación, rio fríamente.
Noela no oyó lo que discutieron las mujeres pero vio que Yadira tenía la cara mala, -¿Qué pasa?
-Ha venido Ximena -Yadira puso el champán, arregló el vestido-. Voy a recomponerme.
-Voy contigo.
-No, está bien.
Yadira fue al baño de sí misma. Se detuvo delante del espejo y se puso a recomponerse en detalle. Después de satisfacerse con el maquillaje, salió del baño con la bolsa.
Pero se encontró con Mariano Magrina al salir.
-¿Yadira?
Mariano la vio primero y la llamó.
Yadira giró la cabeza y se quedó suspendida por un instante, -¿Has llegado ahora?
No confiaría en Mariano a ciegas. Como lo que dijeron Xulio y los demás, Mariano tenía el origen borroso. Aunque había salvado a ella, era un hombre de secreto, no se podía confundir y Yadira lo sabía muy bien.
Mariano dio una sonrisa ligera, no había nada avergonzada por revelarse en la cara, -Pues no te gusta, no lo haré.
Y diciendo esto, miró hacia Delfino, y dijo de curiosidad, -¿Qué pasó entre Delfino y tú?
Yadira se volvió otra vez.
Delfino estaba sentado, y Ximena Ibáñez habló con él de pie y le impidió el vistazo de Yadira, quien no vio la expresión en la cara de Delfino. Yadira no sabía qué Ximena dijo a Delfino, pero le sorprendió por la paciencia de Delfino al oír a Ximena.
Durante los tres años, los medios proclamaba que Ximena era la prometida de Delfino y él no lo negaba.
-Pues como iba diciendo, siempre había la zorra apetecida la cama del jef… -Noela se acercó y antes de decir la palabra última, vio a Mariano que estaba juntos con Yadira y cerró la boca rápidamente.
Mariano vio a Noela y saludó a ella con una sonrisa educada.
Noela tenía que devolverle una sonrisa de cortesía, y se inclinó a Yadira, dijo en voz muy baja, -¿Qué ha sido eso? ¿Por qué viene Mariano?
-Delfino lo invitó -Yadira contestó con tono distraído y frío. Aunque estaba hablando con Noela, Yadira no posó los ojos a otra dirección excepto a la de Delfino.
Noela giró la cabeza y vio que Ximena se sentó al lado de Delfino. Ellos no tuvieron ningún contacto físico, pero lo que Delfino permitió a Ximena quedarse a su lado había sido una cosa de muchas significados.
Noela se retuvo por un buen rato y pronunció, -¡El adúltero y la adúltera!
-Hemos venido por mucho tiempo, es hora de saludarle -Yadira dijo y cogió el brazo de Mariano-. ¿Vamos?
Mariano miró el semblante de ella, y rio, -Vale.
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