-Vale.- pronto o tarde tuvo que dejar a sus padres y los familiares de Isidro a conocerse, por eso ella quería preguntarle algo sobre sus padres a su hermano menor.
Alejandro dijo -Vale, luego te enviaré la dirección.-
-Vale.-
Fernanda se tumbaba en la cama, y puso su móvil al lado. Isidro no le permitió a jugar el móvil cuando él estaba a su lado, por eso, poco a poco ella estaba acostumbrada a acompañarlo sin jugar el móvil.
Apoyando en el almohada, oyó que su móvil sonó. Se levantó apresuradamente y cogió su móvil.
Su acción llamó la atención de Isidro.
Isidro la miró -¿Quién te envía este mensaje?-
Fernanda vio que era la dirección que le envió Alejandro. Aquel sitio no estaba muy lejos desde aquí.
-Es de mi hermano. Estos días viene aquí a participar en una competencia, y me pide a invitarle a cenar.-Fernanda miró a Isidro, -¿Puedo salir un rato?-
Para no preocupó a él, cada vez que ella salía le decía a dónde iba.
Isidro miró su cara, y asintió con su cabeza-Vale.-
-También quiero preguntar algo a mis padres-
Cuando vino a la Ciudad Santa Domingo, su madre quiso entrevistar con la familia Sánchez, para organizar la cita a ciega. Sus padres le llamó muchas veces. Tras ponerlos en la lista negra, ella se sintió un poco tranquila.
Pero en realidad no sabía las ideas de sus padres, así que estaba muy nerviosa.
Isidro tocó su cabeza -Vale, si hay algún problema, llámame.-
Fernanda rio -Bueno.-
Alejandro dijo, -Hermana, deja de enfadarte con madre. Estos días mamá está buscando la oportunidad de verte, pero no respondes su llamada, así que no le queda otra manera.-
Su madre, Juana Valverde vio a Fernanda, dijo amorosamente -Fernanda, cometí un error. No debería criticarte ni golpearte. ¿Puedes regresar a casa conmigo? Estos días tu padre y yo no podemos dormirnos bien por preocupación. Tememos que seas engañada por algún malo.-
En aquel entonces, salió con Pedro.
Una hija que crió salió con un hombre. ¿Cómo era posible que señora Melleza no se la preocupaba?
Ya había pasado media mes, viendo la cara sincera de su madre, y pensando que era su madre y que le había criando muchos años, Fernanda se ablandó.
Fernanda se sentó, y notó que su madre y Alejandro eligieron una mesa grande.
Ella cogió el menú, encontró que el precio de los platos era altos.
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