Mi Esposa Astuta romance Capítulo 291

Unos días después, en la Academia Eustace.

—Lorenzo, ¿de verdad vendrás a recogerme? De todos modos, muchas gracias por traerme a la ceremonia inaugural del nuevo año académico en lugar de mi padre.

Con cara tímida, Estela miró a Lorenzo que estaba sentado en el asiento del conductor, se inclinó un poco para besarlo, pero Lorenzo lo esquivó en silencio.

—De nada.

Lorenzo vestía como siempre un traje hecho a mano de alta definición, ocupó gel para peinar su cabello hacia atrás, sus rasgos faciales estaban completamente expuestos, lo que lo hizo lucir aún más frío y noble.

En seguida, Estela se sintió muy avergonzada, esta ya era la segunda vez...

Había muchos hombres que la perseguían, pero Lorenzo siempre la trataba sin ninguna emoción, pareciera que solo quería terminar sus tareas.

Ella ya había tomado la iniciativa de acercarse a él, ¿qué más podría hacer?

Aunque Estela no estaba contenta de las reacciones de Lorenzo, igual tenía que ocultarse de sus verdaderos sentimientos y mostrarle de su lado positivo.

La inauguración de la Academia Eustace fue muy animada, llegaron muchos estudiantes y muchos más sus padres que vinieron a dejar sus hijos. Todos los que pudieron a registrarse en esta academia eran personas muy agudas.

Había una marca en el coche de Lorenzo que había llamado la atención de muchas personas, se trataba de un dragón abstracto flotando en las nubes.

Cualquiera persona de buen criterio sabía que solo una de las cuatro familias de Fretston tenía esta marca especial.

La Familia Cambeiro usaba Dragón y la Familia Bailey ocupaba fénix.

Todos vieron con envidia a Estela bajarse del noble carro de Lorenzo, después de todo, la noticia del matrimonio entre los dos fue conocida por todo el mundo de Fretston, todos esperaban con ansiedad que Lorenzo lo anunciara oficialmente.

Pero muchos de ellos también se cuestionaron el acto simbólico o ritual de Lorenzo hacia Estela, no se mostró ninguna expresión emocional y todo lo que hacía era para cumplir los procesos que debiera seguir.

Cuando la multitud se dispersó gradualmente, Lorenzo se alejó con su exclusivo automóvil.

En ese momento, el coche de la Familia Amengual se cruzó con el de Lorenzo.

Camila reconoció en seguida el auto de Lorenzo que era fácil de identificar. Ella nunca se imaginó que aun cuando Lorenzo llegó a Fretston de Ameriart, continuaba ocupar este auto sin elegir un nuevo.

Sus ojos de repente se nublaron y no podía respirar bien por sus sentimientos dolorosos. La ventana del auto de Lorenzo estaba baja, por lo que Camila lo vio claramente.

Miles recuerdos aparecieron por solo un vistazo.

—Lo... ¡Detente el auto! ¡Date prisa!

Camila casi gritó el nombre de Lorenzo.

—Camila, ¿qué le pasa?

—¡Lorenzo！

—¡Sr. Lorenzo！

Sin saber nada, Rubén detuvo rápidamente el auto y volteó a mirar a Camila con sorpresa.

Camila bajó el auto y empezó a correr como loca hacia la dirección de la partida de Lorenzo, pero no podía correr con zapatos de tacones, así que los arrojó y continuó su seguimiento desesperadamente.

No importaba qué tan rápido corriera Camila, no podía competir con la velocidad del auto.

—¡Lorenzo!

—¡Señor Lorenzo!

—Lo... ¡Ah!

Camila estaba corriendo cuando de repente pisó una pequeña piedra en el pavimento y se cayó al suelo, en un instante se sintió mucho dolor por las heridas de las rodillas y los pies, quiso levantarse para seguir corriendo, pero ya no podría.

—¡Señorita Camila!...

Rubén y Violeta se asustaron mucho y se acercaron rápidamente a Camila.

—¡Dios mío! ¡Está sangrando! —exclamó Violeta muy preocupada.

—Descuide, con un poco de medicamento y estaré bien.

A Camila no le importó en absoluto sus heridas y solo se culpaba profundamente por no alcanzar al auto, ¿pero qué podría hacer si lo hubiera alcanzado?

Ahora que Lorenzo ya no la reconocía, aun si lo pudiera alcanzar, no la hablaría.

Lorenzo estaba sentado en el puesto de conducción, de repente le dolió el corazón, otra vez era este mismo sentimiento...

Parecía que alguien lo estaba llamando en ese momento.

Lorenzo…

Sr. Lorenzo…

Según la conciencia de Lorenzo, nadie se atrevería a llamarlo así, excepto su padre y su abuela.

Disminuyó la velocidad del automóvil y miró al espejo retrovisor inconscientemente. Vio una joven que se había caído junto a un hombre y una mujer a su lado que podrían ser de su familia o de sus sirvientes.

Lorenzo era un caballero muy decente, ni siquiera tenía la intención de acercarse a su prometida y mucho menos a una chica desconocida.

《Tal vez ella se confundió con otra persona.》

No se le ocurrió otra razón mejor.

—Señorita Camila, ¿qué le sucedió? No veo nadie ni auto que anda por aquí, usted...

Violeta miró a su alrededor y no encontró nada especial. Además, Camila llegó a Fretston hace poco tiempo, no hay nadie que fuera lo suficientemente importante como para que lo alcanzara de forma locura.

—Señorita Camila, ¿acaso vio alguien conocido o se equivocó de persona?

Hasta Rubén que era una persona insensible igual pudo anotar de ese comportamiento raro de Camila.

—No pasa nada, solo llévenme al auto y aplicaré un tratamiento a mis heridas —habló Camila en voz baja mientras bajó la mirada, ocultando la tristeza y la desilusión en sus ojos.

Rubén quiso preguntar más, pero fue detenido por la mirada de su esposa Violeta.

Después de que la herida se curó, estacionó el auto en el aparcamiento.

—Oye, ¿la chica del vestido de princesa no es la prometida de Lorenzo, Estela?

Rubén habló inconscientemente.

—La Familia Bailey no es nada especial. No te subestimes. La señora de nuestra familia no muestra ninguna emoción cuando se encuentra con los dirigentes de familias grandes.

La voz de Violeta de repente se volvió fría.

—Sí, querida, discúlpame por mi imprudencia.

Para Rubén, todo lo que dijo su mujer era correcto.

—Señorita Camila, no le haga caso a Rubén, Estela solo tiene un padre con unas influencias, aparte de eso, ella no se compara para nada con el talento que tiene usted. Lo más importante aún, usted no solo es una postdoctoral del departamento de arte, sino también es académico en medicina, e incluso la señora de su familia es una persona muy poderosa. Ella para nosotros es una persona noble y con elegancia, cuando hablamos de la Sra. Eva, todo el mundo sabe que ella es fundadora de la Academia Coligny, de la Escuela de Medicina de Capttar, sobre todo, también es la fundadora del Instituto de Fretston.

—Claro que la señora también tiene otras identidades que no son conocidas por nosotros.

Al mencionar la señora Eva, Violeta no podía dejar de hablar de sus innumerables hazañas, se notaba que en sus ojos había admiración indescriptible hacia ella.

Camila igual adoraba a su madre, quisiera esforzarse en toda su vida para conseguir los éxitos como había logrado ella.