Obsesionada con sus besos romance Capítulo 10

Cristofer ni siquiera levantó la cabeza para mirarla mientras cortaba un pequeño trozo de pescado y se lo comía antes de decir:

—Estoy aquí para ayudar a Bernardo a recuperar un documento. Resulta que Vanesa estaba cocinando, así que me quedé para comer gratis. —Su boca se curvó en una sonrisa burlona-, ¿Hay alguna regla que prohíba a los forasteros entrar en la casa, o?

Eso la tomó por sorpresa, y se dio la vuelta malhumorada para mirarme.

-¿Qué clase de plato es éste? Tiene demasiados huesos y está demasiado crudo. ¿Y si Bernardo se ahoga con una espina de pescado?

«¿Pues qué crees que es él? ¿Un niño que no puede quitar las espinas de su propia comida? Que idiotez».

Siguió criticando, añadiendo:

-¡Mira esta lonchera! Es horrible y usaste demasiado aceite. ¿Cómo se supone que Bernardo va a comer esto? ¿Intentas que se muera de hambre?

La ira se encendió en mi interior.

«¿Cómo podía haber una mujer tan vil y malvada? Espera... ¿Lonchera?».

Miré a Cristofer, que me guiñó un ojo. No me extraña que la lonchera fuera tan fea. Bernardo tenía suerte de que Cristofer no hubiera escondido unas espinas de pescado dentro de ella a propósito.

—¡Mírame cuando te hablo! —Inés gritó.

«Sí, sí. Perdón por distraerme y no reconocer tu presencia divina».

-Prepararé una nueva. —Recogiendo la lonchera de la mesa, intenté utilizarla como excusa para emprender mi huida.

—¿A dónde vas? Todavía no termino contigo —me interrumpió—. Uy, estás enojada porque te hice una crítica constructiva, ¿no? ¿Ya empiezas a hartarte de mí?

Exhalé muy profundo por las fosas nasales.

-No me atrevería a pensar en algo así.

Se burló.

-¿Hay algo en la tierra que no te atreverías a hacer? Me habrías pegado si no fuera porque soy tu suegra, ¿no?

«Bueno, no se equivoca».

Capítulo 10 1

Capítulo 10 2

Verify captcha to read the content.Verifica el captcha para leer el contenido

Historial de lectura

No history.

Comentarios

Los comentarios de los lectores sobre la novela: Obsesionada con sus besos