Evrie levantó la vista y se encontró con la apuesta y elegante cara de Berto.
Sintió que sus mejillas se calentaban, y se apresuró a negar con la cabeza.
—No, no hace falta.—
—¿Por qué no? Si la última vez que viniste al hospital no lo viste, ahora es el momento perfecto para encontrarte con él, ¿quieres que te ayude a pasar sin hacer fila?—
—No, de verdad, no.—
Evrie agitaba su cabeza, visiblemente nerviosa.
Berto era demasiado entusiasta, siempre los miraba fijamente y con mucho cariño a ella y a Farel, como si fuera un fan de la pareja.
Como si deseara con todas sus fuerzas poder emparejar a los dos.
Justo entonces, Blanca salió y Evrie rápidamente se la llevó del hospital.
Berto miró cómo se alejaba apresuradamente y se tocó la barbilla pensativo.
Esta pareja sí que sabía cómo hacerse sufrir.
De regreso a casa, Blanca, sentada en el metro, se contuvo durante un buen rato antes de preguntarle a Evrie con cautela.
—Evi, ¿todavía no has podido olvidar al Dr. Farel?—
Evrie se quedó paralizada por un momento y luego forzó una sonrisa.
—Quizás no ha pasado suficiente tiempo, tal vez lo olvide después de un rato.—
—¿De verdad?—
—Sí.—Evrie sonrió con esfuerzo.—Después de todo, solo fue una ruptura, no es el fin del mundo.—
Blanca suspiró en silencio.—Otros hacen un drama de sus rupturas, y tú actúas como si nada hubiera pasado, no sé si eso es bueno o malo.—
Evrie bajó la mirada y murmuró suavemente.
—La vida tiene que seguir, y el amor no siempre tiene que ser perfecto.—
—Pero si no es perfecto, ¿cómo se le puede llamar amor? Eso es un arrepentimiento.—dijo Blanca.
—El proceso también es importante.—dijo Evrie, hablando más para sí misma.—Amar a alguien, cada momento del proceso puede ser invaluable.—
Blanca parpadeó, sin entender del todo.
Tal vez eso era lo que llaman amor grabado en el alma.
……
En el hospital.
Farel salió después de cambiar su vendaje.
Berto estaba apoyado en la puerta y dijo melancólicamente.—Parece que no estaba destinado a ser, si hubieras salido un poco antes, habrías podido ver a tu amada.—
—Lo sé.—respondió Farel.
—¿Eh? ¿Estás evitándola a propósito?—
—Es ella la que quiere evitarme.—
El lunes.
Evrie llegó a la oficina, fichó y se sentó en su puesto.
Su jefe llegó corriendo emocionado.
—Evi, tenemos un nuevo proyecto. No es muy grande, pero el cliente es impresionante, quiere un diseño con mucho estilo. Ven conmigo a la reunión para que veas cómo es el asunto.—
—Sí, jefe.—
Evrie se emocionó.
Tomó su cuaderno y siguió a su jefe hacia la sala de reuniones.
Ya había alguien esperando allí.
En el extremo de la larga mesa de conferencias, en el primer asiento a la derecha, había una figura delgada y elegante, con el cabello largo y ondulado cayendo libremente, cubriendo la mitad de su rostro.
Llevaba ropa de alta costura, y en su muñeca blanca lucía joyas incrustadas con diamantes, que parecían muy caras, claramente era una joven de familia adinerada.
—Señorita Olivia, nuestro departamento está listo, puede comenzar a presentar sus requerimientos.—
Al oír ese nombre, Evrie levantó instintivamente la vista de su computadora.
Sus ojos chocaron directamente con los de la mujer.
En el momento en que vio su rostro, Evrie se quedó paralizada.
¿Cómo podía ser ella?
Comentarios
Los comentarios de los lectores sobre la novela: Receta para robarle el corazón al Dr. Farel
Hola ya no hay más capitulos...
Llevo mucho tiempo revisando dia a dia para ver si actualizaron y nada😪😪...
Muchos dias sin subir capituños y nos vamos a quedar sin saber que pasa con los protagonista. Que pereza....
Para el buen lector es de muy mal gusto esperar por alguien para darle continuidad a una buena e interesante lectura, son muchos días de espera....
Por favor más capitulos😢😢...
Hola por favor que pasa capitulo...
Quiero más capítulos por favor me tiene triste ver como esta berto😔😔...
Hola amiga más capítulos...
Más capitulos vale...
Quiero más capítulos para ver que pasa con la salud de berro...